Realizarán 400 tests aleatorios en la construcción a dos semanas del retorno de la actividad
Los hará ASSE a partir de un muestreo realizado por el Grupo Asesor Científico Honorario y el Instituto Nacional de Estadística para evaluar próximos pasos
El Poder Ejecutivo comenzará este miércoles a realizar testeos aleatorios en el sector de la construcción, para medir el impacto de la primera reapertura de las actividades desde la declaración de emergencia nacional sanitaria por coronavirus el 13 de marzo.
La Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) será la encargada de realizar entre miércoles y jueves unos 400 testeos en obras ubicadas en cuatro departamentos: Montevideo, Canelones, Maldonado y Durazno.
El director del Instituto Nacional de Estadística, Diego Aboal, dijo a El Observador que junto al Grupo Asesor Científico Honorario elaboraron un muestreo de las obras en las que se harán tests y explicó que en cada una de ellas, de acuerdo con la cantidad de trabajadores que tengan, se hará un sorteo para definir a quiénes se le harán las pruebas diagnósticas.
La medida de realizar testeos aleatorios en los colectivos que se incorporaron al trabajo, fue propuesta por Rafael Radi, el encargado de coordinar el grupo que asiste al gobierno en la transición hacia la “nueva normalidad”.
El científico dijo el fin de semana a El Observador que estos tests irán dando “una idea de cómo viene la apertura” y si se acompaña de un “aumento preocupante” de la contagiosidad. “Si se mantienen las medidas de distanciamiento social o físico sostenido, y se mantienen normas de higiene muy intensas, tenemos muchas mayores chances de éxito y de que no haya que apretar el freno”, señaló.
El grupo que asesora al gobierno se constituyó algunos días después que la construcción retomara sus actividades, y sus integrantes destacaron en varias entrevistas la importancia de tener un “monitoreo objetivo” que permita identificar el estado de situación antes de dar los “próximos pasos”.
En este sentido, en el Poder Ejecutivo entienden que realizar los análisis dos semanas después del retorno de la actividad en la construcción les permitirá contrarrestar el efecto tardío que tiene el virus al manifestarse.
El área de ciencias de datos y modelos, que lidera el matemático Fernando Paganini, fue la encargada de elaborar junto al INE el muestreo. En el gobierno prefieren concentrar los recursos en “barrios” y “sectores” donde se han registrado casos.
El presidente de la Junta Nacional de la Salud, Luis González Machado, dijo el lunes a El Observador que el Poder Ejecutivo tenía capacidad de realizar hasta 2.000 análisis diarios, pero hasta el momento, esa capacidad ha sido reservada para estudiar los testeos “asistenciales”, es decir, los análisis de aquellas personas que tuvieron síntomas de covid-19 y llamaron a su prestador de salud para pedir el examen.
Con el testeo aleatorio en la construcción, el gobierno empezará a ejecutar un plan para ir más allá de eso. Sin dejar de ocuparse de la atención asistencial, el MSP se encargará de coordinar tests de “monitoreo” en varios frentes: geriátricos, construcción, educación y personal de la salud.
El viernes, en la reunión del Consejo de Ministros, el canciller Ernesto Talvi consultó sobre la posibilidad de aumentar la cantidad de testeos hasta llegar al millón, una estrategia utilizada en países como Corea del Sur. Ni el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, ni el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Isaac Alfie, coincidieron con el planteo y señalaron que la estrategia del gobierno pasaba por una apuesta mayor a la inversión en atención en los centros de salud que en seguir aumentando la cantidad de tests.
El presidente de la Cámara de la Construcción del Uruguay, Diego O’Neill, dijo a El Observador que el protocolo acordado entre empresarios y trabajadores no incluyó la realización de tests de diagnóstico, pero que algunas pocas empresas decidieron hacerlo asumiendo los gastos por su cuenta.
La finlandesa UPM, que construye su segunda planta de celulosa en Pueblo Centenario en el departamento de Durazno, lleva realizados unos 500 hisopados desde el 13 de abril, dijeron desde la empresa.
En tanto, la cementera Cielo Azul en el departamento de Treinta y Tres realizó el estudio diagnóstico a 83 funcionarios brasileños que llegaron para trabajar en el montaje electromecánico de la planta. Cuatro de ellos dieron positivo y se encuentran en cuarentena en la capital del departamento, mientras el MSP realiza un monitoreo de quienes estuvieron en contacto con ellos en los pocos días desde que llegaron de Brasil.
El dirigente del Sindicato Único de la Construcción (Sunca), Richard Ferreira, señaló que la gran mayoría de las empresas se han limitado a cumplir el protocolo acordado y que los únicos tests que se realizan son a los trabajadores que presentan síntomas.
El presidente de la Cámara de Industrias, Gabriel Murara, dijo que las empresas están cumpliendo con las normativas sanitarias y extremando al máximo los cuidados cuando reciben insumos o ingresan trabajadores a las plantas, pero que no tenía constancia de que alguna hubiera realizado análisis a sus funcionarios.
Pedirán tests para trabajadores de frigoríficos
La Federación de Obreros de la Industria de la Carne (Foica) solicitará este miércoles en una reunión con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y las cámaras del sector que se realicen estudios diagnósticos a todos los empleados de los frigoríficos como medida de prevención.
El secretario general del gremio, Luis Muñoz, dijo que en otros países como Estados Unidos y Brasil se han dado brotes importantes de trabajadores de esta industria, debido a las condiciones en que trabajan.
*Aclaración: Una primera versión de esta nota señalaba que fue el gerente general de ASSE, Eduardo Henderson, quien dijo que había capacidad de hacer 2.000 tests diarios. La información es incorrecta, ya que quien realizó esta declaración fue Luis González Machado, presidente de la Junasa. A los lectores e involucrados, las disculpas del caso.