CONFLICTO
“Se les terminó la ventaja”: transporte de carga uruguayo sale al cruce del reclamo de los argentinos
El presidente de la Cámara de Autotransporte Terrestre del Uruguay (Catidu), Mauro Borzacconi defendió la normativa aprobada por el Poder Ejecutivo y dijo que hay “cero chance” de volver hacia atrás.El decreto del Poder Ejecutivo que estableció que los fleteros argentinos no podrían cobrar viajes en efectivo en Uruguay, enfrentó a los sectores transportistas de ambos países .
Por Pía Mesa
Por un lado, las compañías de transporte de carga terrestre argentinas, reclaman que la normativa es inconstitucional, por lo que ya presentaron recursos administrativos contra el decreto reglamentario y solicitaron su suspensión. Y por otro lado, las empresas uruguayas dedicadas al transporte internacional defienden la normativa y afirman que a los argentinos “se les terminó la ventaja”.
En diciembre pasado, el Poder Ejecutivo promulgó una ley y aprobó un decreto reglamentario de la misma, que obliga a las empresas argentinas que realizan fletes en Uruguay, a cobrar sus servicios a través de transferencia bancaria o por entidades financieras, y no en efectivo como lo venían haciendo hasta el momento. Esto, con el objetivo de que los transportistas argentinos no se lleven dólares en efectivo desde Uruguay para luego cambiarlos en el mercado paralelo, al dólar blue argentino y así ofrecer fletes más baratos.
De esta forma, el gobierno contempló el reclamo que desde hace tres años hacía la Cámara de Autotransporte Terrestre Internacional (Catidu) y la nueva normativa comenzó a regir en enero de este año.
El presidente de esa cámara, Mauro Borzacconi, dijo en diálogo con El País que “aunque tarde, el decreto fue buenísimo” para el sector porque permitió que el mercado volviera “a la normalidad”.
Al ser consultado sobre los reclamos de las empresas argentinas hacia la normativa y la amenaza de corte de puentes en los pasos internacionales, Borzacconi señaló que eso “deja claro que se les terminó la ventaja”
En este sentido, el presidente de la Catidu señaló que las empresas argentinas que hacen fletes en Uruguay y que compiten “desde siempre” en igualdad de condiciones con los transportistas uruguayos, “lo siguen haciendo”, mientras que las que “ahora están reclamando” son “las oportunistas, las (compañías argentinas) que coyunturalmente sacaron ventaja por (la diferencia entre) el dólar blue (y el oficial) en Argentina. Empresas que nunca habían venido” a trabajar al país, explicó.
Según Borzacconi, a partir del decreto, el sector transportista internacional de bandera uruguaya, logró recuperar entre un 20% y un 30% del mercado perdido y esperan “en los próximos meses” poder recuperar el resto.
“Comenzamos a perder todo ese mercado desde hace tres años, desde que empezó el dólar blue”, indicó el empresario.
El dólar paralelo existe desde hace años en Argentina como consecuencia de diferentes restricciones del gobierno para la adquisición de moneda extranjera, conocidas comúnmente como “cepo cambiario”. Sin embargo, desde septiembre de 2020 las restricciones se fueron endureciendo, lo que llevó a una suba del dólar paralelo.
En concreto, el dólar blue pasó de valer $ 142 argentinos en septiembre de 2020 (frente a un dólar oficial en $ 79), a cotizar ayer en $ 378 (frente a un dólar oficial a $ 199,95, según los datos de La Nación Argentina), una brecha cambiaria del 89%.
“Tradicionalmente, el transporte argentino no venía a Uruguay porque no le convenía. Es un flete que demora una semana en hacer un ida y vuelta por un valor que ellos pueden duplicar o triplicar, por semana, haciendo transporte interno. Lo que ellos hicieron fue aprovechar la coyuntura por la diferencia de cambio entre Argentina y Uruguay, agarrar los dólares acá en efectivo y transformarlos al doble allá”, criticó Borzacconi.
Asimismo, el empresario desmintió a los transportistas argentinos que dijeron a El País que ya habían notado una baja del 70% de los viajes a Uruguay, a causa del decreto. “Puede que” el descenso en la cantidad de fletes de los argentinos “se deba también a que bajó el trabajo, el puerto está moviendo menos de lo que movía hace unos meses”, defendió.
No obstante, el presidente de la Catidu dijo que el 30% del mercado que recuperó el sector transportista uruguayo se debe a la nueva normativa. “En el estado que sea, con mucho trabajo o poco trabajo, si la carga hubiese bajado un 50%, de ese porcentaje ellos tenían entre el 80% y 90% y nosotros entre el 10% y el 20%, ahora no, recuperamos el 30% y aspiramos a recuperar más”, afirmó.
La advertencia por parte de las empresas argentinas que realizan fletes en Uruguay, es que la normativa llevará a un aumento en las tarifas de sus viajes. Al ser consultado sobre esta posibilidad, Borzacconi dijo que “puede llegar a pasar” pero afirmó que se da “por la coyuntura” respecto al dólar y la brecha cambiaria entre ambos países.
“¿Por qué nunca vinieron los argentinos acá? Porque nunca les sirvió el volumen de carga y de fletes con relacion al transporte interno de ellos”, reafirmó el empresario.
Por otra parte, Borzacconi dijo que las tarifas de los fletes uruguayos que transportan mercadería a a supermercados, aumentaron entre US$ 100 y US$ 200 aproximadamente, y fue crítico con las empresas que cuestionaron esa suba.
“Dicen que los fletes se les encarecieron US$ 500. Si fue así, pregunto: ¿Por qué no trasladaron los precios a las góndolas cuando pagaban US$ 500 menos de fletes? Si tanto patean, ¿por qué no bajaron los precios cuando pagaron menos durante tres años”, criticó.
SABER MÁS
“Catidu no va a negociar”
Desde el sector transportista argentino habían dicho a El País que había conversaciones extraoficiales entre las principales gremiales de transporte internacional de ambos países, para que la normativa se prorrogue por unos meses, hasta las elecciones primarias en Argentina.
Sin embargo, Borzacconi lo desmintió y dijo que con él “nadie habló”.
Sobre esto, el presidente de la Catidu afirmó que la cámara “no va a negociar” la postergación de la normativa porque es un reclamo que hacen “desde hace tres años”.
Borzacconi relató que los transportistas argentinos “se lo dijeron también al Ministerio de Transporte” y la cartera consultó a la Catidu por esa posibilidad.
“Cuando llamaron (desde el gobierno) para preguntarme, les dije que de ninguna manera vamos a ceder, cero chance”.