Luz verde para obra millonaria de UTE que hará una estatal china en el norte
Comenzó la construcción de la línea de alta tensión entre Tacuarembó y Salto, que también utilizará la nueva planta de UPM. Se prevé quede operativa en enero de 2025."Empezaron las primeras excavaciones para las primeras bases de las torres. La obra implica 900 torres de alta tensión”, afirmó a El Observador la presidenta de UTE, Silvia Emaldi.
La empresa estatal China Machinery Engineering Corporation (CMEC) tiene en marcha la construcción del cierre del anillo de trasmisión del norte, una línea de 500 kV que unirá Tacuarembó con Salto.
Es una inversión millonaria y clave para el sistema de interconexión nacional que se prevé esté operativa en enero de 2025, y que también utilizará la nueva planta de celulosa de UPM en Pueblo Centenario para evacuar la energía que producirá.
La presidenta de UTE explicó que actualmente se está en etapa “de verificación, de ensayo y de validación” por parte del ente de todos los elementos constructivos que conforman las primeras bases. Parte de la maquinaria utilizada para los trabajos ya había arribado al país semanas atrás, y ahora comenzaron a llegar los primeros suministros, como transformadores y otras piezas necesarias para los montajes que iniciarán ya en los próximos meses.
El proyecto se desarrollará a través de un fideicomiso financiero constituido por UTE, con República Afisa como entidad fiduciaria, y tiene un costo total de unos U$S 207 millones. El cronograma inicial contemplaba casi tres años de trabajos hasta comienzo de 2025, pero por distintos motivos se tuvo que ajustar.
Por ejemplo, se demoró más de lo previsto el proceso de inscripción y autorización del fideicomiso, cuya emisión se realizó finalmente en mayo pasado. También hubo retrasos por parte de la empresa CMEC en los fletes que transportaron maquinaria y los primeros materiales que vienen en su totalidad desde China. En ese país hasta hace poco tiempo hubo ciudades que permanecieron cerradas y con severas restricciones de movilidad debido al covid-19. Eso demoró incluso la llegada de personal técnico de la empresa.
“Tuvimos que ajustar el inicio como en unos cuatro meses. Con las previsiones que se están tomando esperamos llegar en plazo para lo que es el contrato con UPM que es enero de 2025”, afirmó Emaldi.
La obra del anillo
La línea de alta tensión se compone de dos tramos: una que irá desde Tacuarembó y bajará hasta Chamberlain próximo a Paso de los Toros; y otro tramo entre Chamberlain y Salto Grande. Su trazado cubrirá una distancia de aproximadamente 365 kilómetros.
Los dos tramos se conectarán a través de la estación a ser construida en esa localidad de Tacuarembó. Asimismo, en la subestación de Chamberlain se conectarán líneas que permitirán el enlace con la nueva planta de UPM, la que además de producir celulosa, generará energía renovable e inyectará parte de lo generado al Sistema Eléctrico Nacional a partir del 2025.
También se incluyen dos líneas de 150 kV que conectarán la estación Chamberlain con las líneas existentes entre Rincón del Bonete y el Parque Eólico Palmatir. El proyecto complementa a la línea de transmisión que ya existe entre Melo y Tacuarembó.
Emaldi explicó que en algunos tramos de “suelos más rocosos” está previsto el uso de explosivos para poder colocar las bases de las torres. Esto requirió el trámite de autorizaciones ante las intendencias de la zona y el Ministerio de Ambiente.
El seguimiento del cronograma se realiza de manera mensual por UTE y CMEC en reuniones presenciales y vía zoom. El lanzamiento oficial de inicio de las obras se realizará el próximo 7 de octubre en pueblo Morató en el departamento de Paysandú.
Mano de obra local
Será la obra de infraestructura más grande realizada en el país por una empresa china hasta el momento.
Como informó El Observador, el proceso licitatorio se inició con la confección de una lista corta en la que se invitó a nueve empresas. Finalmente fueron tres las que se presentaron al llamado y compitieron con ofertas: la china CMEC (US$ 191 millones), el consorcio español uruguayo Elecnor-Saceem (US$ 221 millones), y Cymi –Semi (brasileño-española) (US$ 300 millones).
Cuando el proyecto fue adjudicado en 2021 tras la licitación internacional, las empresas locales que habían participado del llamado plantearon dudas. Uno de los puntos que llamó la atención fueron los precios manejados por la ganadora, y especialmente el monto que declaró la estatal china por la ley 14.411 de aportes sociales a la construcción. Por ese entonces el cálculo que realizó la Cámara de la Construcción era que con el monto manejado se pagaba la mitad de la mano de obra necesaria para realizar la línea de alta transmisión.
El contrato vigente establece que el 80% de la mano de obra utilizada sea de origen nacional. La obra empleará alrededor de 1.000 personas. En caso de no cumplirse la exigencia de mano de obra local, se prevén penalizaciones “altas” sobre el precio del contrato, había dicho Emaldi a El Observador en junio del año pasado.
“Van a tener todo el seguimiento y toda la vista de cuáles son las leyes sociales asociadas a las personas que estarán trabajando. ¿Qué análisis hizo la empresa china? No lo sé, pero en todas las instancias les hicimos ver ese punto (leyes sociales) y ellos dijeron que lo tenían todo bajo control y que iban a cumplir todo lo que está previsto y lo que el contrato establece”, afirmó en la oportunidad la presidenta de UTE.
Diario EL OBSERVADOR -Montevideo - URUGUAY - 24 Setiembre 2022