silviopastoreoGrupo de expertos se opone a forestar en Colonia para celulosa

Un grupo de profesionales vinculados a las ciencias de la tierra y otras actividades académicas presentaron un informe en la Comisión de Higiene de la Junta Departamental de Colonia donde señalan su posición contraria al modelo de excepciones de forestación que propone la empresa Montes del Plata. Aseguran que los argumentos que presenta la empresa no son ciertos.

El equipo de profesionales ha estudiado y analizado el expediente N° 157 del año 2019, referente al pedido de excepción del proyecto de forestación “El Negro”, presentado por Eufores S.A. (Montes del Plata), y ante ello presentó ante la Comisión de Higiene un informe que contiene un resumen ejecutivo con las principales conclusiones, aspectos generales del modelo de producción forestal celulósico y aspectos técnicos productivos relevantes vinculados a los argumentos presentados en el informe de la Dirección de Desarrollo para su aprobación por la vía de la excepción.
Según afirma, los sistemas de plantación presentados en “El Negro” no son sistemas de silvopastoreo, ni tampoco permiten actividades de pastoreo en la misma superficie. “Son macizos forestales donde la densidad de los mismos oscilan de 1200 a 1500 árboles/ha, esto no permite el desarrollo de pasturas en el sotobosque  IAF (índice de área foliar) = 5”, afirma el documento.
“Tampoco permite la interacción con el ganado de una forma funcional (ciclaje de nutrientes, bosteo, mejora de la pastura, mejora del suelo, mejora del crecimiento del árbol). El ganado sólo puede beneficiarse en este esquema a través de la protección de los fríos en la época de las pariciones refugiándose en los montes”, indica.
Tampoco constituyen cortinas de viento, pues las cortinas de viento son plantaciones forestales de no más de 2 a 3 hileras dejando el tapiz natural intacto en el resto de su superficie.
Por lo tanto no constituye una diversificación productiva funcional, sino una diversificación de rubros económicos ya que empresas como Montes del Plata arriendan a un valor en el entorno de 160 a 200 USD/ha/año.

Ataque de plagas

El documento presentado por el grupo de profesionales, señala que “se han reportado en otros departamentos que las plantaciones forestales promueven la proliferación de plagas problemáticas para la producción animal como caranchos, zorros y existen estudios donde reportan problemas con jabalíes constituyendo una interacción negativa entre la forestación y la ganadería”.

Impactos en el agua

También afirman que “diversos estudios plantean la disminución en la recarga de los acuíferos y en los caudales de los arroyos en el orden del 20 al 50 %, así como la disminución en la calidad del agua”.
Esto plantea una limitante en el mediano plazo para las actividades agrícolas ganaderas a desarrollar tanto en el predio, como en predios vecinos. Se considera importante este punto ya que las zonas a reforestar se encuentran en suelos asociados a los arroyos Miguelete y Los Molles (Grupos de Suelos 5.02 b).

Impactos en el suelo

Las plantaciones forestales acidifican los suelos debido a que son grandes extractores de cationes del suelo (Calcio, Magnesio, Sodio, etc.). “Esto empobrece la composición de los suelos alterando propiedades químicas, y por lo tanto físicas y biológicas. La pérdida de materia orgánica y destrucción de agregados causa la compactación de los suelos disminuyendo la calidad de los mismos y haciéndolos más erosionables. El impacto positivo en la mitigación del cambio climático es relativo, ya que implica una pérdida del C estable (nativo) de los suelos”, afirman.

El equipo

Denominado equipo asesor técnico de Ecoasamblea Colonia, que elaboró el presente informe, está formado por la doctora (Ciencias Biológicas) Natalia Bajsa, doctora (Derecho) MSc Carolina Neme, ingeniero agrónomo forestal Gastón Carro, licenciado social Daniel Pena y Educación Popular Soledad Recoba.

Gastón Carro: “no coincidimos con el modelo forestal” que propone Montes del Plata.
El ingeniero agrónomo Gastón Carro, integrante del grupo que elaboró el informe, cuestionan el modelo de forestación que presentó la empresa en el proyecto de forestación El Negro en la zona interior de Tarariras y Ombúes de Lavalle.
“No estamos de acuerdo que se hagan excepciones a la reglamentación contra forestar Colonia, pasando por arriba la reglamentación departamental”, dijo.
Lo segundo, agregó Carro, “es que los argumentos que se exponen no son ciertos. Uno de los argumentos que repetían mucho es el de silvopastoreo, querían incorporar las plantaciones para hacer silvopastoreo y eso no es verdad ni posible porque el marco de plantación que tienen los montes forestales es de un metro por 1,4 es decir 1.500 árboles por hectárea que no permite la llegada de luz al suelo entonces no hay producción de forraje, no hay incorporación funcional del ganado”.
El silvopastoreo “tiene menos densidad que permite la producción de forraje y todos los beneficios, la sombra para el ganado, la producción del ganado, mejor confort térmico para el animal, que no es lo que están proponiendo”, explicó.

 También lo ecológico

Además tiene ciertos problemas que tienen que ver con lo ecológico, dijo, “por ejemplo los macizos forestales tienen una productividad mucho más alta que las praderas, cinco veces más biomasa por superficie, porque son como edificios apilados y ese carbono que se produce extrae mucha más cantidad de agua y nutrientes, principalmente cationes para el suelo acidificando los suelos, baja la actividad biológica, tienen baja permeabilidad al agua y se hacen mucho más erosionables”.
Tienen alta tasa de extracción, crece mucho en un período corto, “se corta y se vuelve a plantar. Hay quienes dicen que en dos turnos a ese suelo lo dejás aniquilado”.

Más peligroso: bajará el caudal del arroyo Miguelete

“Pero lo más peligroso es que la forestación está en suelos 502B”, dijo. Y agregó que “son suelos asociados a las cuencas de agua. Específicamente este proyecto planea reforestar 160 há. alrededor de dos arroyos, uno de ellos el Miguelete, hay estudios que plantean que disminuyen el caudal entre 20 y 50 por ciento”. Además hay estudios que dicen que hay problema entre la productividad animal y el monte forestal porque “aumenta la cantidad de plagas como chanchos jabalíes y zorros que atacan las crías de ganado”.
El ingeniero agrónomo Carro sostuvo que “yo trabajo en plantación agroecológica y hago sistemas agroforestales, promuevo la forestación, pero un tipo de forestación inteligente, que se incorpore al árbol de una forma funcional al sistema de producción”.
Y puso como ejemplo el silvopastoreo que se realiza en Florida que planta 250 árboles por há., hace una doble hilera de eucaliptos grandes y se deja un callejón de 20 metros. Ahí predomina la pastura y eso no tiene el impacto que tiene la masa forestal y además son sistemas de alta rentabilidad. El eucaliptus grandis se exporta a Vietnam, es otro tipo de eucalipto y se extrae madera de alta calidad para hacer muebles de madera fina”.
Esto tiene rentabilidad, “el ganado está bien protegido, tiene pasturas dentro del mismo monte y se alimenta mayor período de tiempo porque tiene un microclima que lo favorece, y da unos números de producción excelentes, mayor carga de peso vivo que los que hacen ganadería extensiva. No es plantar o no plantar sino que cuando se planta, cómo se planta”, señaló.

EL ECODIGITAL -Colonia - URUGUAY - 12 Octubre 2021