SINDICALES
Conflicto en UTE por fin de 500 empleados "toma consumo" y repartidores de facturas
El ente inició un proceso de colocación de medidores inteligentes y proyecta que en 2022 no habrá más sistema manual.
Aquella imagen casi folclórica de un funcionario de UTE que recorre con paciencia casa a casa para registrar el consumo de cada domicilio (si es que puede entrar, claro), está cerca de pasar a la historia. El ente inició un proceso de colocación de medidores inteligentes y proyecta que en 2022 no habrá más sistema manual.
También está en la mira el fin del reparto de facturas, ya que -al igual que en otros entes- van rumbo al sistema electrónico. Pero la gran interrogante que se abre ahora es el destino de los cerca de 500 empleados (de un total de 6.600) que, por la lógica de este nuevo mundo automatizado, ya no tendrán tareas que hacer a corto plazo.
Y ese es también, en el fondo, el nudo de un conflicto con el sindicato del ente. La Agrupación UTE (AUTE) realizará este miércoles un paro de 24 horas que afectará toda la atención y la operativa comercial e incluirá una concentración en el Palacio de la Luz a las 11 de la mañana.
Si bien el sindicato dice que apoya los cambios proyectados y considera que pueden ser “muy buenos” para los clientes, cuestiona que la empresa no respete algunos acuerdos logrados. El año pasado se formó un ámbito de negociación para definir cómo impactarían estos cambios en el área comercial y, en concreto, en el salario y las condiciones laborales de los empleados. Negociaron durante tres meses y llegaron a un acuerdo, donde se estableció que ningún trabajador sería despedido y se fijó un mecanismo para reconocer los derechos salariales adquiridos por los funcionarios que se dedican a tomar el consumo y repartir las facturas.
Los medidores inteligentes van a generar “una mejora enorme en la calidad del servicio” pero también van a suprimir tareas, admitió a El País el presidente del sindicato de UTE, Gabriel Soto. Desde la empresa, un jerarca que pidió no ser identificado dijo a El País que “habrá que buscarle la vuelta para reciclar el personal en otras múltiples tareas de la organización”.
Hoy en Montevideo hay unos 60 funcionarios de esos que se llaman “lectores distribuidores”, que toman los consumos. En el interior son polifuncionales y cumplen también otras tareas. Los que distribuyen facturas son unos 400 en todo el país, según las cifras que maneja UTE. Pero desde el sindicato afirman que en total son unos 700 empleados entre las dos tareas .
En el caso del reparto de facturas, se trata de una tarea compartida con el Correo. Los funcionarios de UTE lo hacen fuera de horario y cobran a destajo. Esa tarea “se va a abandonar” porque “es tendencia mundial el fin del papel” y un “proceso natural”, indicó Soto, el presidente de AUTE.
Pero no está tan claro qué plazos se manejan. Hoy el cliente debe manifestar su voluntad de que se la envíen por correo electrónico. “Ahí hay un techo”, afirman desde el ente, por lo cual creen que a corto plazo seguirá habiendo reparto en los domicilios, aunque en un porcentaje menor.
En los medidores, en cambio, es una política de la empresa y -salvo un cambio drástico de rumbo- se va a un sistema inteligente. El propio presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla, dijo el año pasado que a fines de 2020 se prevé que el 50 % de los hogares uruguayos cuenten con este sistema de medición digital y que en 2022 se llegue a todos los hogares.
Condiciones del acuerdo.
Por el acuerdo firmado, está claro que nadie perderá su empleo. “Tenemos un déficit de casi 4.000 funcionarios y en UTE hay dónde reubicar”, dijo Soto.
¿Qué complicó todo? Según el sindicato hubo un hecho “que alteró la cosa” y es que el directorio agregó temas no incluidos en las negociaciones y hace pocos días fijó cómo considerar los derechos adquiridos a nivel salarial, con cambios respecto a lo acordado. Según AUTE esto sucedió después que un grupo pequeño de funcionarios presentó una nota y “de forma unilateral” hubo cambios. “Vaya a uno a saber qué intereses o que lobby interno se realizó”, indicó Soto.
Para AUTE, la situación “es muy grave” porque “la negociación colectiva debe ser respetada” y esto “siembra incertidumbres enormes” para el futuro. “Con este directorio nos ha costado muchísimo que respete lo acordado”, afirmó Soto, muy molesto.
“Si en la primera de cambio nos patean el tablero, no hay garantías. Lo que busca el directorio es casi una medida de fuerza. Es bastante irresponsable porque se están por ir”, dijo el presidente del sindicato. “¿Qué garantías hay de que me respeten lo que resuelva en el futuro? Necesitamos señal de compromiso clara de este directorio y también del próximo”. Desde UTE, en cambio, un jerarca dijo a El País que el acuerdo con los sindicatos “se va a cumplir” y que la empresa tiene “puertas abiertas” para negociar el tema, aunque en menos de dos semanas asuma un nuevo directorio.
Chau al “consumo estimado”: hay 280 mil medidores inteligentes
UTE ya ha colocado unos 280.000 medidores inteligentes en todo el país, que envían la información en forma remota y registran el consumo a intervalos de 15 minutos. Es cerca del 20% del total, ya que hay un millón y medio de clientes. El cambio se realiza sin costo para los usuarios y el proceso en los hogares se inició en 2018, cuando se colocaron unos 25.000 aparatos. Los grandes y medianos clientes, en cambio, ya cuentan desde hace años con medidores inteligentes.
Este cambio en el sistema de medición en los domicilios implicará que también será historia el famoso consumo estimado, que hoy se aplica cuando el funcionario no puede tomar el consumo, ya sea porque no concurre al lugar o porque no puede entrar. Se trata del 14% del total de los consumos, según publicó El Observador el año pasado.
Para el consumo estimado se toman tres factores: un histórico de consumo del suministro, el consumo del mes anterior y el del mismo mes del año pasado. Cuando están los datos reales, UTE vuelve a facturar y corrige lo estimado. Según el sindicato, los consumos estimados son cada vez más comunes por los recortes de personal.
Hoy no abren las oficinas de UTE en todo el país
El paro en UTE es de 24 horas este miércoles, tiene alcance nacional pero solo afectará al área comercial de la empresa estatal. En la práctica, estarán cerradas todas las oficinas que atienden público. “Por más que la parte distribución no entra en este paro, remarco que nunca nadie se queda sin luz por un paro de nuestro sindicato”, indicó el presidente de la agrupación UTE (AUTE), Gabriel Soto. Los trabajadores del área comercial se concentrarán a las 11 frente al Palacio de la Luz y le entregarán a los directores una carta con los reclamos del sindicato.