El núcleo industrial volvió a caer por quinto año consecutivo y no prevén que mejore
La producción industrial, sin incluir los datos de la refinería de Ancap y las zonas francas, tuvo una caída de 2,4% en el 2019.
La producción de la industria manufacturera cayó en 2019 por quinto año consecutivo, con un descenso más pronunciado en el primer semestre que en el segundo.
Según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), la producción industrial registró un descenso de 1,5% el año pasado, mientras que en lo que refiere al núcleo industrial (que excluye la producción de las plantas de celulosa de UPM y Montes del Plata y la de concentrados de Pepsi, además de la refinería de Ancap), la caída en el año fue de 2,4%.
Si se toman los datos de la industria sin incluir las zonas francas, “se confirma otro año más de recesión en la industria”, lo cual es “preocupante” porque significa que “es el quinto año consecutivo de caída y de desaceleración de la producción”, dijo a El País el director de Estudios Económicos de la Cámara de Industrias (CIU), Sebastián Pérez.
Según los datos del INE, en el acumulado del año la variación para el Índice de Volumen Físico (IVF) en 2019 fue negativa al caer 0,9% si se cuenta la industria sin refinería y para el total de la industria cayó 1,5%.
El rubro de mayor incidencia negativa en el acumulado de 2019 fue la división de fabricación de productos derivados del petróleo y carbón, que registró una caída del 4%, seguido de los rubros curtiembres y talleres de acabado (cayó 13%) y de elaboración de sustancias y productos químicos (bajó 3%).
De forma contraria, los rubros que incidieron positivamente en las cifras del acumulado del año fue el de fabricación de papel y productos de papel, con un crecimiento del 3,3%.
El informe del INE reveló además los datos relacionados al desempeño de diciembre y si bien estos fueron positivos, dado que la industria sin refinería creció 2,6% interanual en el último mes del año, “no fue suficiente para revertir la caída en el promedio anual”, según indicó el economista Aldo Lema a través de su cuenta de Twitter.
El crecimiento industrial de diciembre estuvo explicado según la socia de la consultora Exante, Florencia Carriquiry, por un “fuerte rebote de la faena vacuna”, aunque transitorio.
Además, otros factores que explicaron el aumento de diciembre fueron una mayor actividad de la fabricación de bebidas no alcohólicas y de la industria farmacéutica, un crecimiento importante en algunas ramas vinculadas a la construcción, tales como la producción de cemento y la industria básica de hierro y metales no ferrosos.
Al igual que Lema, el asesor económico de la CIU dijo que pese a que las cifras de diciembre marcaron una mejora, se debe considerar que “los datos mensuales son volátiles” y que por lo tanto, “más allá del dato puntual del mes, no hay un cambio de tendencia”.
Según Pérez, “lo más impactante del año” 2019 es la pérdida de empleo en el sector industrial que es “relativamente elevada”. De acuerdo a los datos del INE, el Índice de Personal Ocupado (IPO) en el promedio del acumulado anual cayó 4,8%.
Si bien el Índice de Volumen Físico de la Industria Manufacturera (IVF) para diciembre fue de crecimiento, no ocurrió lo mismo con el panorama laboral, dado que el IPO retrocedió 5,1%.
“En definitiva, es mucha gente que queda sin trabajo y eso obedece a que hay una pérdida de competitividad del sector y una baja rentabilidad que los empresarios de alguna forma tienen que intentar revertir, y en parte lo hicieron a través del empleo”, explicó Pérez.
Asimismo, el asesor económico de la CIU manifestó que “cinco años de recesión es demasiado” para el sector empresarial y advirtió que “al empresario le puede ir mal uno o dos años pero después de que acumula varios ejercicios de caída empieza a tomar decisiones más rápidas”.
En lo que refiere al componente tendencia-ciclo de la producción (un indicador más estable dado que aísla a la serie de los elementos de carácter irregular y estacional), el Centro de Investigaciones Económicas (Cinve), estimó que tuvo una variación negativa mensual de 0,5%.
A lo largo del año 2019, el componente tendencia-ciclo fue mayoritariamente negativo puesto que solo registró crecimiento en los meses de febrero y marzo y estancamiento en julio y agosto, mientras que en el resto del año mostró caídas de producción. Dicho indicador osciló en el correr del año entre -0,5% en diciembre y 0,4% en febrero.
Desempeño por ramas.
El Cinve destacó que diciembre fue “el único mes” de 2019 en el que cada una de las cuatro agrupaciones de ramas (comercio intra-rama, sector industrial exportador, industrias sustitutivas de importaciones y producción de las industrias de bajo comercio) creció en términos interanuales. De esas cuatro ramas, la que mostró más dinamismo según el informe de Cinve fue el comercio intra-rama que aumentó 1,9% interanual.
“Sin embargo, este significativo incremento se debe a que la producción de un año atrás había sido excepcionalmente baja”, concluyó el documento.
Tanto el sector exportador como el sustitutivo de importaciones tuvo un crecimiento de 3% en el mes y las industrias de bajo comercio subieron 0,7% su actividad.
Proyecciones para la industria en el 2020
Desde la Cámara de Industrias (CIU) consideran que la situación de la industria no va a mejorar este año. Según su asesor económico, Sebastián Pérez, estiman una nueva caída en 2020 de entre el 1% y el 2%. Por su parte, la socia de la consultora Exante, Florencia Carriquiry, manifestó que las proyecciones para este año “apuntan a un pobre desempeño de la industria manufacturera en general, aunque con desempeños heterogéneos al interior”. Desde Exante esperan por un lado, una caída de la producción de los frigoríficos (rama con incidencia alta en el valor agregado industrial) pero, por otro lado, esperan “que el proyecto de UPM siga impulsando la actividad en algunas ramas proveedoras de la construcción”.