“Perdimos una preciosa oportunidad de negociar bien con UPM”
Según el presidente Luis Lacalle Pou “nos haría un daño enorme como país si no podemos revisar lo que está firmado”, haciendo referencia al contrato con UPM. Además desarrolló sus planes para invertir en infraestructura. Y fijó posición sobre el Instituto Nacional de Colonización.
Pablo D. Mestre, Martín Olaverry.
– ¿Cuál es su posición sobre UPM II?
– En noviembre de 2017 convoqué al Senado a cuatro o cinco Ministros, ¿cuál era y cuál es nuestra línea de razonamiento?: la de siempre, 1987 se vota la Ley Forestal, 2003 tratado de protección de inversiones con Finlandia, instalación de la primera industria de celulosa; ahí fui crítico y tuve algún reparo con el tema ambiental, después que me informé no lo tuve tanto. Llega la inversión y estamos del mismo lado del mostrador. Que es favorable a la instalación de la planta. Ese es el concepto general. Cuando uno ve la hoja de ruta, el mal llamado contrato que acuerdan el gobierno uruguayo y la empresa, notoriamente era desequilibrada. Notoriamente. Las obligaciones que asume el gobierno en nombre del Estado fueron totalmente desmedidas, en la inversión, en los compromisos y en la contraparte. No parece, ni es, un acuerdo marco justo. De allí se derivan obligaciones jurídicas del gobierno, por ejemplo, la construcción por parte del puerto de la ANP, por fuera del recinto portuario, de un ingreso al puerto. No es competencia del puerto, cuesta en el entorno de los US$ 120 a US$ 130 millones y lo lleva adelante el gobierno. Nosotros con nuestro director de puertos votamos en contra, lo tenía que haber hecho UPM. Cuando uno ve lo que cuesta la vía férrea, por el mecanismo utilizado, las PPP, etc.. etc.., uno dice: con respecto a la inversión de UPM lo que le costará al país. Entonces me parece que nos perdimos una preciosa oportunidad de negociar bien. Y no entregar todo para la instalación de una empresa, que está bien que se instale y está bueno, pero nos deja con compromisos económicos que bien le haría falta al resto del país productivo.
– ¿Hay espacio para revisar el contrato o ya está cerrado?
– Lo que está jurídicamente firmado nos haría un daño enorme como país si no lo podemos revisar. Yo no me amputo sentarme con la empresa a hablar de muchísimas cosas, y no me gusta adelantar más, no tengo nada escondido. Tengo un tema con la calidad de agua, se debe trabajar muy fuerte y hay que hablar de la calidad de agua con la empresa y de tantas cosas más. Obviamente que a esta negociación la corres de atrás, está casi todo el pescado vendido, hay que ver cuánto margen nos deja el gobierno, en éste y otros temas que comprometió muchas cosas. Pero cambia el gobierno, no el Estado y no cambia el reglamento jurídico.
“Tenemos que trabajar sobre la navegabilidad del río Uruguay”
– ¿Cuál va a ser la política de cara a los próximos 5 años en materia de infraestructura?
-Tengo un compromiso muy fuerte con la construcción de la Ruta 6, desde el arroyo Agua Sucia, antes de llegar a Sarandí del Yí, ya salvar ahí que se inunda entre ese tramo, hasta la frontera con Brasil. Tenemos que trabajar sobre la navegabilidad del río Uruguay, tengo una obsesión con un bypass del Salto Grande y el Salto Chico, ahí nos ayudaría no solo nacional sino también internacionalmente, podríamos llegar con barcazas de Brasil y Argentina, nos generaría prosperidad. Eso de alguna manera va a mejorar algunos puertos del litoral, vamos a generar más presión sobre Nueva Palmira, allí tenemos que mejorar la parte de acceso a la playa de Nueva Palmira, si bien parece una obra departamental, nosotros nos comprometimos que la vamos a hacer. Eso va a dar más actividad al puerto de Montevideo. Y después un tema portuario que está ahí habilitado y hay que ver collera y dragado, que es el puerto de La Paloma. Y evidentemente hay que analizar mucho el tema turístico y el ambiental. Si a esa parte Este del país le agregamos un sistema multimodal que hace al tema portuario también, ayudamos a muchos. Eso puede ser en los clásicos puertos planificados de Tacuarí y Charqueada, que saldrían por Brasil, o el puerto de La Paloma, allí hay que ver fortalezas y debilidades. Tengo el compromiso de hacer el puente entre Cebollatí y Charqueada, también me parece que uniría mucho y ayudaría a esa zona. Ganas de hacer cosas y visión hay.
– ¿Cuál va a ser la política de su gobierno en Colonización?
– Es el mayor tenedor de tierras del país y con miles de hectáreas sin adjudicar. El concepto, aunque llegamos un poco tarde, es el afincamiento de más gente el campo. Que no se siga despoblando. Es un tema de familia y de escala, crecen las familias y al gurí le gusta el campo, fue a una técnica en alguna actividad rural y uno de ellos se va a quedar, pero no da para todos. El concepto debería ser trabajar en escala. Un potrero más, unas hectáreas más, asistencia técnica, ayudar a que sean más intensivos, porque si no ¿qué hacemos? El hijo de ese productor se va y desarraigamos la familia.
– Combatir el minifundio…
– Buscar escala para no tener productores colonos que sabemos que no viven de la explotación. Nos tenemos que sincerar cuando afincamos a alguien en el campo que va a poder ser independiente para poder vivir del campo. Después esa concepción artificial de decir, vos te tenés que dedicar a esto. O formar grupos, que muchas veces esos grupos no tienen una cohesión social y terminan mal socialmente, por ende económicamente. Tenemos que potenciar algunas cosas que para mi son buenas, como por ejemplo los campos de recría. Eso es una buena experiencia.
– ¿Está bien el concepto que tenga prioridad Colonización sobre todos los campos de más de 500 Hás. que se venden? ¿El INC va a seguir comprando campos?
-Creo que hay que poner pausa. Hay que revisar, ver dónde se tiene predios. Si ha habido una visión de afincamiento demográfico y productivo. Además, hay miles de hectáreas sin adjudicar. Hay que rever eso, no la prioridad que puede estar, sí la acción directa de la compra.
– ¿Ya están determinados las distintas jefaturas, de INAC, INALE, INASE, INIA, etc…?
– Están todos los nombres en esta carpeta (risas). Me gusta estar en todo, no por un tema obsesivo, sino porque me parece que hay que darle la dimensión y la importancia a cada organismo o cada dirección, obviamente recibí propuestas del equipo del Ministerio, estuvimos acá conversando, al mismo tiempo hay otros miembros de la coalición que no tienen participación directa como Partido en el Ministerio pero sí tienen gente que vale la pena considerar.
– ¿Es cuota política o técnicos?
– En el MGAP son con criterios técnicos.
– ¿Los resuelve usted?
– Si, pero de común acuerdo. Llega un momento que cuando hay gente buena, la diferencia puede estar entre dos buenos. Tenemos espalda.