Los que ganan y los que pierden con el acuerdo Mercosur-UE
El convenio firmado el viernes traerá consecuencias positivas para algunos sectores e implicará un desafío competitivo para otros
Se trata del “acuerdo más grande del mundo”, dijo este lunes el canciller de la República, Rodolfo Nin Novoa, en referencia al convenio alcanzado por la Unión Europea (UE) y el Mercosur, que según afirmaron fuentes de ambos bloques implicará abarcar un mercado de bienes y servicios para 800 millones de consumidores.
Además, Nin Novoa se animó a aventurar que las quitas arancelarias le traerán a Uruguay beneficios anuales por US$ 100 millones.
A medida que los días fueron pasando, comenzaron a conocerse los detalles, con algunos sectores que se verán ampliamente favorecidos mientras otros tendrán que plantearse competir con sus pares del viejo continente, que son más eficientes y competitivos.
La UE representa el segundo destino comercial, tanto para el bloque en su conjunto como para Uruguay. En concreto, en el caso uruguayo, las exportaciones de bienes hacia ese bloque representaron en torno al 18% del total en 2018. Durante ese año, los principales rubros de exportación fueron la celulosa (49%), la carne bovina (22%) y la madera (7%), según consignó en un análisis realizado por la consultora CPA Ferrere.
Para el caso de los bienes, el objetivo es que la UE elimine los aranceles para el 92% de las exportaciones provenientes del Mercosur, otorgando además acceso preferencial a otro 7,5% con otras modalidades que no significarán la eliminación total de impuestos para el ingreso de mercadería.
En tanto, el Mercosur se comprometió a eliminar para el 91% de las importaciones que parten desde el bloque europeo, con la excepción de un 9% que quedará excluido en defensa de algunos sectores “sensibles”, como calzado, muebles y vehículos, temas que preocupan sobre todo a Argentina y Brasil. Para estos casos, se realizará una liberalización algo más prolongada, que podrá llevar hasta 15 años, se anunció.
En aspectos más específicos, una vez entrado en vigor el acuerdo –que puede tener un plazo de alrededor dos años– algunos productos de exportación destacados en Uruguay tendrán un arancel de 0%. Entre ellos, se destacan la harina y el poroto de soja, aceites de usos industria (soja, maíz, girasol) y productos de la pesca como la merluza.
Otros insumos más relevantes del aparato productivo nacional como el arroz y las frutas cítricas (limones, naranjas y mandarinas) entrarán en una canasta de “desgravación” que irá de cuatro a 10 años progresivamente.
El acuerdo llevará al menos dos años para ponerse operativo y para su aprobación necesita el voto de los parlamentos de los países de ambos bloques, pero una vez aprobado por los parlamentos de la UE y el Mercosur pueden empezar a funcionar algunos aspectos referidos a lo comercial. En este sentido el gobierno de Francia (uno de los 28 países que integran el bloque europeo) anunció este lunes que por el momento “no va a ratificar” el acuerdo.
En 2014 Uruguay pasó a ser considerado un país de renta alta y perdió preferencias arancelarias en la UE para el ingreso de cítricos. Esto llevó a que las empresas nacionales del sector tuvieran que invertir en cambios varietales. Hoy el principal mercado para ese productor es Estados Unidos, con más del 90% de lo exportado.
El acuerdo llevará al menos dos años para ponerse operativo y necesita del voto para su aprobación de los parlamentos de los países de ambos bloques, pero una vez aprobado por los parlamentos de la UE y el Mercosur pueden empezar a funcionar algunos aspectos referidos a lo comercial. En este sentido el gobierno de Francia (uno de los 28 países que integran el bloque europeo) anunció este lunes que "no va a ratificar" por el momento el acuerdo.
Los rubros que importan
En el sector cárnico, uno de los más importantes, el acuerdo hará que un porcentaje de la “cuota Hilton” deje de pagar aranceles. Actualmente las exportaciones uruguayas pagan un 20%, por lo que según cálculos realizados por El Observador, Uruguay se ahorraría alrededor de US$ 14 millones, ya que su cupo es de 6.280 toneladas.
El Mercosur podrá exportar hasta 99.000 toneladas peso carcasa con un arancel de 7,5%, de las cuales un 55% será para cortes enfriados y el 45% restante para los congelados.
La cuota para el sector arrocero será de 60.000 toneladas para todo el Mercosur sin aranceles. Actualmente Uruguay paga 65 euros por tonelada y exporta alrededor de 100 mil toneladas al año.
Para la lechería, que es uno de los rubros a los que más le preocupa la concreción de este acuerdo puntual, se acordó una cuota recíproca para las dos vías de 10 mil toneladas para la leche en polvo, tanto entera como descremada, y de 30 mil toneladas para los quesos.
Estas cantidades abarcan límites para todo el bloque y todo será implementado en un plazo de 10 años de forma progresiva. A su vez, los aranceles que van hasta el 28% se van a ir reduciendo hasta que en el año 10 van a llegar ser cero.
El acuerdo proporcionará acceso libre de impuestos sujeto a cuotas para los productos lácteos de la UE (actualmente arancel del 28%), especialmente los quesos.
Otro de los rubros que se mostraron preocupados, una vez conocido el acuerdo, fue el vitivinícola, sobre por la posibilidad de que algunos regiones europeas con vinos muy baratos –sobre todo el sur de Italia y España- puedan competir en Uruguay. Los aranceles en este caso se van a ir eliminando progresivamente durante ocho años, hasta ser cero tanto para los vinos que provengan de Europa como les que vayan desde el Mercosur.
Los bienes industriales
Según el breve análisis de CPA Ferrere, este acuerdo implicará beneficios para Uruguay, pero no son tan claros para Brasil y Argentina dado el peso del sector industrial en su economía. Más allá de que el 100% de las exportaciones del Mercosur en ese sector ingresarán a la Unión Europea, el porcentaje inverso será del 90%.
“Para los casos de los dos socios más grandes del Mercosur, las industrias manufactureras son las que en primer término tienen menos oportunidades de beneficiarse del acuerdo. Entre estas se destacan las industrias textiles, plásticos, automotriz, autopartes metalúrgicos y químicos (principalmente localizadas en Argentina y Brasil)”, se señala en el documento de la consultora. Para la industria automotriz los aranceles fijados por el Mercosur son de 35% para automóviles y entre 14 y 18% para autopartes.