Sergio AbreuDudas y preocupación por proyecto de puerto pesquero

El excanciller y exministro de Industria Sergio Abreu asegura que faltan controles en la actividad como para otorgar un emprendimiento de infraestructura del cual se tiene poca información
Mientras existen muchas preguntas sin respon¬der acerca de la instalación de un puerto pesquero chino en Montevideo, algunas instituciones defen¬soras del medioambiente, así como figuras del acontecer político nacional, han alertado a las autoridades sobre posibles irregularidades.
Las denuncias se basan en si¬tuaciones que se experimentan hoy día en el sector de la pesca y, en particular, en el puerto de Montevideo.

En su momento, la organización Océanos Sanos estuvo en el Parlamento nacional, donde fue recibida por la Comisión de Ganadería, Agricultura y Pesca de Diputados.
Según informó la institución, alió se presentaron informes so¬bre "la situación de la pesca ilegal, no declarada y no representada, y los casos de abusos a los derechos humanos relacionados a los pesqueros extranjeros en el puerto de Montevideo".
En otro orden, el informe asegura que "el puerto de Mon¬tevideo es el segundo a nivel mundial con mayor descargas de pesca sospechada" de pesca ilegal en aguas internaciona¬les y que "desde el 2013, según datos oficiales, se registra un fallecido por mes en el puerto de Montevideo procedentes de pesqueros extranjeros".
Esta situación no pasó inad¬vertida por algunos actores polí¬ticos, y es así como, por ejemplo, el diputado nacionalista Juan José Olaizola se mostró preocu¬pado por el futuro de esta actividad y por las posibles infrac¬ciones que se puedan cometer en un futuro puerto pesquero privado de origen chino.
El excanciller y exministro de Industria, Sergio Abreu, también entendió importante estudiar el tema y mostró sus preocupaciones.
En diálogo con Comercio Exterior & Transporte manifestó que Uruguay tiene responsa-bilidad en el control de estas actividades y aseguró que el gobierno no ha dado suficiente información acerca del proyecto del nuevo puerto.

Usted se ha manifestado prepcupado por el proyecto de puerto pesquero chino para Montevideo. ¿Cuáles son sus argumen¬tos?
Considero que no está bien analizado lo que significa esto para China y para Uruguay. Este proyecto es una especie de polo logístico chino, en el que funcionarían unos 500 barcos de pesca chinos. Pero esto se trata de una estrategia, ya que el país asiático tiene 25 mil barcos de más de 100 toneladas y una flota más precaria de más de 200 mil barcos. Lo que sucede es que China pretende distri¬buir los barcos logísticamente y pretende así construir un puerto en Montevideo. En,ese puerto se instalarían, además, servicios de reparaciones y de frío, junto a otros elementos vinculados a la actividad pesquera, pero no al procesamiento de la merca¬dería. Lo que le interesa a China es tratar de aumentar la captura en todo el mundo. Hoy capta un tercio de la pesca mundial, pero necesita duplicarlo debido a la demanda interna y externa. Con esa meta han invertido más de US$ 3.000 millones en el continente africano y tienen la idea de expandirse a nuestro continente.

¿Pero cuál es el problema que usted ve en que se instale un puerto de esas características en Uruguay?
China y Taiwán tienen las flotas de pesca ilegal más grande del mundo, entonces lo primero que me surge es preguntarme con qué normas se ya a controlar la pesca que llegue a este puerto. No hay que olvidar que Uruguay ha ratificado el acuerdo sobre medidas destinadas aprevenir, desalentar y eliminar la pesca ilegal no declarada y no regla¬mentada. Paralelamente hay una exigencia para cada barco, que debe tener un sistema satelital para que pueda ser rastrea¬do y verificar en qué zona está pescando. Pero el problema que tenemos es que, sin bien existe una comisión coordinadora de prevención de pesca ilegal a nivel de Poder Ejecutivo, esta nunca se ha reunido. En este sentido, la preocupación es ma¬yor si vemos que durante 2018 solamente se inspeccionó el 10% de los buques pesqueros que operaron en Montevideo. Y más aún si analizamos que de los barcos chinos, no se inspeccio¬nó ninguno. Por otro lado, hay denuncias de que los pesqueros chinos duplican la identidad; es decir, que hay barcos con el mis¬mo nombre, y que desactivan los sistemas de control. Todo esto enciende las alarmas porque es imposible saber si hay transbor¬dos ilegales en altamar, si existe la sobrepesca u otras irregu¬laridades. Asimismo, no hay control del trabajo que realiza la tripulación y existen denuncias de un régimen laboral de escla¬vitud que muchas veces termina con varios tripulantes muertos por año que llegan al puerto de Montevideo sin que se sepa en qué condiciones se producen esas muertes. En definitiva, si hoy no hay ningún tipo de control de los barcos que están pescando en la zona, ¿cómo se va a hacer cuando los barcos sean cientos más por año?

¿Qué tendría que hacer Uruguay?
Lo que tiene que hacer es con¬trolar dónde están los barcos, evitar el transbordo, que es otro asunto muy grave porque esa práctica tiene vinculaciones con el crimen organizado, además se perjudicial para aspectos ambientales de contaminación y de amenazas a la biodiversidad. Si se deja pescar en cientos de barcos que terminan hacien¬do transbordo en el barco que efectivamente vuelve al puerto, se genera una depredación sin cumplir con las normativas ambientales y comerciales. Entonces, si Uruguay va a tener un puerto para 500 barcos pesqueros y esos barcos van a funcionar en el Atlántico sur, como funcionan con los puertos logísticos de África, y no se con¬trola en qué aguas están pescan¬do, ni la identidad de los barcos, ¿cómo es posible controlar que no haya sobrepesca?

¿Quién tiene que tomar medidas y atender estas alertas ante la idea de este nuevo puerto?
Esto no es simplemente una obligación del puerto, sino de cancillería y del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. En el caso de la autoridad por¬tuaria, lo que tiene que hacer es asegurar un sistema de control para inspeccionar los barcos que, hoy, no se inspeccionan.

¿Eso seria una traba para el avance del desarrollo del proyecto?
Primero deberían ajustarse todos estos asuntos y controles; después otorgar el permiso para hacer un puerto. Además, lo que está faltando es informa¬ción transparente de lo que se va a hacer con y en este nuevo puerto pesquero. Uruguay tiene responsabilidad política ambiental para poder exigir a una inversión de esta naturaleza, aquello que protege sus obligaciones asumidas en los tratados o simplemente hace como con UPM, que permiten la instalación a cualquier costo. Otro punto de la construcción de este puerto es la mano de obra. Existen muchas dudas de que se vaya a hacer con mano de obra uruguaya y todo hace pensar que va a ser mano de obra china.

¿Cómo piensa que se puede con¬trolar la pesca en altamar?
Uruguay tiene que encontrar una forma de preservar sus recursos marítimos y quizás la tarea recae sobre la mariná y las Fuerzas Armadas. Y en ese caso, ¿qué recursos se destinan para eso? No es un tema menor y cobra más relevancia con un puerto pesquero chino instalado en Montevideo.

¿Y en qué está el proyecto?
Esa es la gran pregunta. Se dice que el gobierno sigue nego¬ciando, pero no hay acceso a la información.

Frase

"Uruguay tiene que encontrar una forma de preservar sus recursos"
"La preocupación es mayor si vemos que durante 2018 solamente se inspeccionó el 10% de los buques pesqueros que operaron en Montevideo. Y más aún si analizamos que de los barcos chinos, no se inspeccionó ninguno"
Sergio Abreu
Excanciller y ex ministro de Industria, Energía y Minería

Diario EL OBSERVADOR - Montevideo - URUGUAY - 30 mayo 2019