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Opinión: El empresario, su rol, su imprescindible presencia

"Hasta no hace mucho, el monopolio de la palabra y presencia mediática en los medios y redes pertenecía al PIT CNT, totalmente ideologizado para la izquierda", escribe Aníbal Durán.Hasta no hace mucho, el monopolio de la palabra y presencia mediática en los medios y redes pertenecía al PIT CNT, totalmente ideologizado para la izquierda pese a que debería representar a trabajadores de todos los pelos. Pero su cúpula comunista, es notoria.

Ya hace algunos años apareció en escena la Confederación de Cámaras Empresariales (CCE), a impulso de varios empresarios y hoy es una realidad consolidada con más de 20 gremiales que se aglutinan en torno a ella. Es perentorio destronar, abominar, esa mala concepción que se tiene del empresario (que los habrá buenos y malos como en todo conglomerado humano) y virar esa mala espina que los aqueja. Por suerte los empresarios se han curado “del pánico escénico” y han salido a la palestra, proponiendo temas que deben estar en el debate público.

Suscribió esta postura, la Cámara Nacional de Comercio y Servicios, siempre presta a reivindicar estos postulados.

Los empresarios son los forjadores de los empleos privados en este y en cualquier país y con su incesante tributación hacia las arcas estaduales, bancan el gasto público que, aunque mermado sigue siendo importante.

Y un empresario es desde un gran promotor privado que construye miles de metros cuadrados, hasta el propietario de un kiosko, que seguramente sea de utilidad para los vecinos del barrio, que también debe aportar al fisco y que por ahí tiene algún empleado en planilla. No desdeñemos a nadie.

El empresario es en definitiva quien arriesga su dinero, su tiempo y esfuerzo para construir y poner en marcha una unidad de producción de bienes o servicios que responda a las necesidades de la sociedad y que como contrapartida, Perogrullo dixit, le permita obtener ganancias.

Seguramente existan muchos empresarios que profesan una ideología de izquierda (cada vez más me cuesta entender a qué se refieren con izquierda y derecha) y que entienden bien a qué me refiero.

Los sectores empresariales del ámbito privado asumen una responsabilidad activa en el esfuerzo por servir a los requerimientos del bien común. La CCE hace caudal de ello y lo transmite.

Asimismo, un empresario que solo se preocupe por evaluar la cuantía de sus ganancias, difícilmente podría subsistir al frente de sus negocios en estos tiempos, signados por la interrelación económica, cultural, social, que condiciona la producción y comercialización de bienes y servicios.

De cara al futuro y se viene dando por añadidura, se necesita una filosofía de la gestión empresarial basada en valores profesionales y no solo en la maximización de los beneficios.

Es decir, además de preparación para la tarea empresarial, hay que tener aptitud moral para esforzarse al máximo, independientemente de remuneraciones o incentivos adicionales.

Compete resaltar un aspecto ético insoslayable: los empresarios de este país son conscientes del valor de su independencia frente a las presiones políticas mezquinas. Garantía de transparencia y seguridad institucional. Tal vez existan empresarios prebendarios, pero de ninguna manera es una constante en el país, son excepciones que coliden marcadamente con las pautas que se vierten desde la CCE.

Ésta (la CCE), está al margen de los avatares políticos, que no quiere decir ajena a la política. Se encaran temas de la realidad, se manifiestan inquietudes, se le sugieren distintas opiniones al gobierno. Pero en un marco de irrestricto respeto.

Error en que incurre permanentemente el PIT CNT que todo lo ideologiza y en principio aquello que venga del gobierno ya es malo per se, incurriendo en posturas con un sesgamiento marcado en desmedro del oficialismo.

La proclama del 1 de mayo del 2022, del PIT CNT rezaba “Por la Unidad de quienes movemos la Rueda…”.

Título excluyente; parecería que la rueda la mueven solamente los obreros y sí que la mueven, pero les faltó una pata imprescindible, en una muestra del más rancio desprecio hacia el empresario.

Para ir a nuestro metier: hoy existen más de 62 mil obreros trabajando en forma directa, porque hay un promotor privado que invierte el dinero en una obra para que eso suceda, o porque existe UPM que hace lo mismo o porque el Estado (el gran promotor público), hace algo similar. Si no aparece dicha inversión no habrá rueda que se mueva, así acudamos a plegarias del cielo.

Hay que terminar con esa absurda cantinela que prejuzga con nula afabilidad al

empresario “poderoso” y con decoro a su contraparte obrera “sojuzgada”, en una adjetivación que además de ser lineal y estructurada es totalmente falaz.

Sigamos moviendo la rueda, empresarios y obreros y no nos hagamos trampas al solitario con consignas para la tribuna que no se condicen con la realidad y gozan de una “espuria fama”.

Diario EL PAIS -Montevideo - URUGUAY - 19 Marzo 2023