PARLAMENTO
Advertencia "muy fuerte" de Bomberos posterga ley de incendios forestales y enfrenta a Cabildo con sus socios
El FA desistió de votar la iniciativa ante la serie de "errores técnicos" advertidos por Bomberos.Una "intervención muy fuerte" de las autoridades de la Dirección Nacional de Bomberos hizo desistir este miércoles al Frente Amplio de su intención de aprobar en forma inmediata el proyecto sobre prevención de incendios forestales y a la vez que concretó una nueva derrota de Cabildo Abierto, ya que desactivó, al menos por algunas semanas, una crisis en la coalición y que había puesto sobre la mesa el pedido de un nuevo veto presidencial.
Los cabildantes y la oposición habían intentado sumar sin éxito este martes sus votos para ratificar la iniciativa -ya aprobada en Diputados- de forma "grave y urgente". Como no llegaron, derivaron el proyecto a la Comisión de Ganadería del Senado para subsanar la exigencia de mayorías especiales. Pero los duros reparos expresados allí por las autoridades involucradas hizo cambiar la ecuación.
Los frenteamplistas repararon específicamente en dos falencias advertidas por Bomberos en torno al "corazón" de proyecto. Una está referida a la obligación de que todo predio forestado contenga áreas cortafuegos perimetrales, en fajas de 20 metros de ancho libres de árboles en el caso de plantaciones de madera para celulosa, o de 50 metros si se trata de maderas para aserrío o de calidad. Pero Bomberos, según el informe que presentó esa entidad y al que accedió El Observador, considera fundamental que, más allá de la distancia prevista, esas áreas cortafuegos permanezcan limpias. La conclusión es clara: por más extensas que sean, de nada servirá si están sucias. Allí se advierte que el proyecto nada dice al respecto, y ni siquiera se prevén sanciones.
Otro de los factores fundamentales para el cambio de actitud del Frente Amplio fue que Bomberos reparó en el hecho de que el texto deja en un limbo a las superficies de bosques públicos, al no establecer claramente si comprende o no a áreas como los parques Roosevelt o Santa Teresa.
Desconocimiento técnico
En la práctica, la lista de cuestionamientos de Bomberos es larga y ya había sido planteada hace algunas semanas, durante la discusión del proyecto en Diputados. Allí su director nacional, Ricardo Riaño, había exhortado a los legisladores a "analizar minuciosamente" lo que pretendían aprobar.
"El proyecto adolece de errores basados en el desconocimiento de aspectos técnicos en lo que refiere al combate y prevención de incendios forestales", afirmó. También en lo que respecta a aspectos legales o normativos, además de resultar reiterativo en función del marco legal vigente a la fecha a través de varias leyes y decretos.
A los efectos del artículo 1° del proyecto, Riaño recordó que por ley Bomberos ya tiene establecida su competencia en materia de incendios en todo el territorio nacional a través de dos leyes de 1987. También que, cuando ve superadas sus capacidades, coordina el combate a los siniestros con otros organismos. Así, Riaño cuestionó que el proyecto pretende centralizar en su oficina todas las atribuciones en la lucha contra incendios.
A su juicio, esto traerá complicaciones funcionales, ya que Bomberos debería asumir todas las tareas que ahora son desarrolladas por otros organismos, lo que implicaría una "tarea titánica", que incluirá además da la prevención y el combate, el mano de suelos y plantaciones hasta aspectos como la erosión.
Citando un balance cerrado en 2021, el jerarca dejó en claro que el 60% de la flota de la dirección cuenta con más de treinta años de servicio. "Se nos viene rompiendo asiduamente y no tenemos una reposición debido a los recortes presupuestales", recordó. "Por eso, no podemos adquirir vehículos buenos". Como refuerzo, informó, próximamente serán recibidas veinte camionetas.
El director de Bomberos también cuestionó el distanciamiento previsto por el proyecto para las franjas cortafuegos perimetrales. Así, dijo, la distancia actual prevista -12 metros en los predios de hasta 50 hectáreas- está basada en un estudio técnico: por cada metro de altura de los árboles deben haber cuatro metros de cortafuegos que, insistió, están relacionados con la altura de la llama y la velocidad de propagación de los incendios. "No se trata de tirar un número al azar", dijo Riaño.
Sin embargo, dijo que lo que más le preocupa es el artículo 11 que, directamente, establece la derogación lisa y llana de toda la normativa previa que "se oponga" al texto propuesto, lo que a su juicio derivaría en una "laguna legal".
La decisión del FA, la advertencia de los blancos y las dudas de Cabildo
El cambio de perfil del Frente Amplio responde a que se consideraron atendibles los planteos de Bomberos. El senador José Carlos Mahía le dijo a El Observador que se trabajará en modificaciones. Siempre, precisó, con una definición política de que el proyecto sea ley en el correr de febrero, antes que finalice el receso parlamentario.
En el Partido Nacional, ante la amenaza de aprobación de un proyecto con el que discrepaban radicalmente, algunos legisladores habían conversado seriamente sobre la posibilidad de pedirle al presidente Luis Lacalle Pou que vetara la ley si era ratificada. Allí iría a repetirse lo sucedido hace casi exactamente doce meses, cuando el gobierno vetaba la ley de suelos forestales aprobada por alianza entre Cabildo y los frenteamplistas.
El senador Sebastián Da Silva le dijo a El Observador que, tal como estaba planteado, el proyecto "atentaba contra el patrimonio nacional". La razón: le irían a restar 170.000 hectáreas al volumen forestal del país, reduciendo así el área efectiva de forestación y atentando seriamente contra la posibilidad de destinar los mejores campos a otros fines.
Más que "toquetear", los metrajes de calles internas y cortafuegos, Da Silva sostuvo que lo que hay que exigir es, justamente, lo que reclamó Bomberos: que esas zonas de seguridad estén limpias. La Sociedad de Productores Forestales había cuestionado fuertemente la iniciativa al afirmar que los legisladores estaban "legislando para la tribuna".
Nelson Ledesma, presidente de de esa entidad le había dicho la semana pasada a El Observador que este proyecto atenta contra las inversiones, porque "las distancias que ponen hacia las casas y para los cortafuegos son extremadamente grandes y van a reducir sustancialmente el área que se puede forestar, y no tiene sentido".
Con este panorama, en Cabildo Abierto dudan de que el proyecto sea aprobado alguna vez. El senador Guillermo Domenech quedó este miércoles en solitario en su exigencia de que el texto fuera sancionado sin modificaciones en esta misma jornada. "Es un tema que hay que resolver con cierta urgencia", le dijo el legislador a El Observador ante la posibilidad de que se repitan incendios como los que el año pasado afectaron varias zonas de Paysandú. "Me temo que esto no se irá a resolver", aventuró.
Para Domenech resulta evidente que el Partido Nacional, al igual que los colorados, no tiene interés en sacar adelante la iniciativa. "No quiero presumir intenciones, pero creo que se trata de proteger a la industria forestal", había comentado este martes. Ahora, Domenech lamentó que el Frente Amplio decidiera "plegarse a la mayoría" y avalar su postergación. También sostuvo que las observaciones técnicas realizadas por Bomberos son opinables y que, en todo caso, podían ser contempladas en la futura reglamentación de la ley.
Cabildo Abierto sumó así una nueva decepción por parte de sus socios en pocos días, luego que blancos y colorados rechazaran llevarle sus principales inquietudes para modificar el proyecto de ley de reforma jubilatoria, que el próximo martes comenzará a ser aprobado en el Senado.
Incendios diferentes
El director nacional de Bomberos explicó en el Parlamento que existen ciertas diferencias entre un incendio desatado en el norte del país con el que pueda ocurrir, por ejemplo, en la costa atlántica, donde los siniestros son mucho más agresivos y violentos, con una altura de llama de hasta 25 metros. En estas áreas la mayor peligrosidad está dada además por la presencia de viviendas en pleno bosque.
Según Riaño en el norte del país un incendio se propicia mayormente a nivel del suelo, con una altura que no suele superar los tres metros, a raíz de raleos, podas y el combustible vegetal acumulado en el sotobosque. Los cortafuegos y las zonas perimetrales, indicó, permiten contar con barreras ya sustentadas para que Bomberos, con maquinaría pesada, puedan erosionar el suelo para evitar la propagación del fuego de un plantío a otro. La posibilidad de su ratificación planteaba mucha preocupación en filas del Partido Nacional, en donde algunos legisladores llegaron a manejar incluso la posibilidad de que, en caso de ser aprobado sin cambios, pedir al presidente Luis Lacalle Pou que vetara la iniciativa.
Diario EL OBSERVADOR -Montevideo - URUGUAY - 22 Diciembre 2022