embalse palmarDE ACUERDO CON EL REPORTE DEL MVOTMA, MAYORES CARGAS DE NITROGENO Y FOSFORO
Las aguas del Río Negro presentan menor calidad aguas arriba del embalse de Rincón del Bonete: Glifosato, Dieldrin, Endosulfan mediante

En mayor o menor medida, todo lo que hacemos en el departamento de Durazno influye sobre el río Negro. La cuenca comprende al río Yí, por ejemplo, y demás arroyos que desembocan en este río que atraviesa el país y lo divide en sur y norte.Dino Capelli 

Floración de algas en Embalse Palmar, año 2010
De acuerdo con el reciente reporte del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA) sobre calidad del agua de la cuenca del río Negro, correspondiente a julio 2018, hay diferentes parámetros que se deben analizar y tener en cuenta para emitir un juicio de valor serio y responsable.


Las cuencas
En territorio uruguayo, la cuenca alberga una población total de 371.529 habitantes (según el último censo del INE, año 2011). Casi el 100 % de la superficie se encuentra bajo algún tipo de uso productivo. En la cuenca alta, que incluye territorio de Río Grande del Sur (Brasil) y los departamentos del noreste del Uruguay, las actividades relevantes son la ganadería, la forestación, los cultivos y la producción de arroz.

En la cuenca media y baja, donde se ubica el departamento de Durazno con sus costas al norte, se destaca el desarrollo de los cultivos de secano (trigo, sorgo, soja, maíz), además de la ganadería y la forestación.
Si ponemos el foco en las cargas de nitrógeno total (NT) y fósforo total (PT) aportadas desde la cuenca, la cuenca del río Negro en territorio uruguayo recibió por fuentes difusas derivadas de la actividad agropecuaria (datos estimados) un total de 5820 ton/año de fósforo total (PT) durante el 2011 y 7110 ton/año de PT durante el 2015, estableciendo así desde el Ministerio las correspondientes comparaciones.
Fueron 24.370 toneladas/año de nitrógeno en el 2011 y 30.970 ton/año para el año 2015, más de 6000 toneladas adicionales.
En territorio brasileño durante el 2017, se estimó en 1030 ton/año de PT y 1970 ton/año de NT, bastante menos de lo que recibe en territorio nacional.
Con base en el monitoreo de la DINAMA (Dirección Nacional de Medio Ambiente) y su Programa de Evaluación de la Calidad del Agua de la cuenca del río Negro desde 2009 hasta la fecha (25 muestreos), se pueden extraer múltiples conclusiones.
En 2017 se incorporan 7 estaciones en el río Tacuarembó y 1 en el ingreso a Uruguay, mientras que para el año 2019 se prevé la incorporación del río Yí.
Se ha desarrollado monitoreo de 43 variables en 15 estaciones distribuidas a lo largo de toda la cuenca. La frecuencia de monitoreo trimestral permite ver estacionalidad, se informa desde el Ministerio, que desde el año 2015 trabaja con la Facultad de Ciencias (Sección Limnología) monitoreando arroyos vadeables de toda la cuenca alta, media y baja para establecer la calidad ecológica de la cuenca e identificar bioindicadores de calidad ambiental.

Calidad de agua
Como forma de resumen de principales aspectos, “el río Negro cuenta con tres embalses en su recorrido, presentando por tanto, tramos con características de sistemas lóticos (zonas alta y baja) y tramos característicos de sistemas lénticos (zona media). La mayoría de los parámetros fisicoquímicos medidos en el río Negro entre 2009 y 2016, como conductividad, alcalinidad, nutrientes nitrogenados y fosforados, presentó un patrón espacial que coincide con las características de las tres grandes zonas definidas en la cuenca
(Cuenca alta, media y baja). De acuerdo con los parámetros físicos y químicos, el río muestra condiciones de menor calidad en la zona alta de la cuenca (aguas arriba del embalse Rincón del Bonete), y en el tramo bajo (desde el embalse de Palmar y aguas abajo)”, reza el informe al cual accedió El Acontecer.
No obstante, en el período analizado todos los parámetros medidos, excepto los referidos a nutrientes, indicaron “una calidad aceptable en toda la cuenca”.
Los registros agregan que en las zonas alta y baja se observaron los valores más altos de nutrientes, mientras que en la zona media presentaron una gran heterogeneidad.
Considerando el índice de estado trófico (IET) con base en clorofila a y fósforo, los embalses se encuentran en estado eutróficos en años secos, como el 2011, y oligotróficos en los años 2014 y 2015 (años que fueron más lluviosos).
“Si bien los niveles de nutrientes más bajos se encuentran en la zona media, dado el mayor tiempo de retención hidráulico, la biomasa fitoplanctónica fue mayor en este tramo”, concluye el informe.

La industria cárnica y los vertidos domésticos: mayores aportes a la cuenca del río Negro
La industria y sus vertidos domésticos también afectan la calidad de las aguas de la cuenca del río Negro y, especialmente, la corriente de agua propiamente dicha.
La industria cárnica en un 32 %, el vertido doméstico un 34 %, la industria del papel un 3 %, los lácteos un 13 % (tambos), la industria de la madera un 10 %, los suministros de electricidad un 5 % y la industria de la lana un 3 % final son los que aportan al cauce.
Algunas de estas industrias están radicadas en el norte del departamento de Florida y, por ende, vuelcan al río Yí y sus arroyos afluentes. La mayoría se ubica en la ciudad de Durazno, a metros del río Yí. Lo propio sucede en Trinidad, capital de Flores, y Paso de los Toros en menor escala.
No se debe obviar a las industrias ubicadas al norte, en las cercanías de la ciudad de Tacuarembó. Arroyo Salsipuedes mediante, también aportan negativamente al lecho del río y sus aguas.
Según el reporte, hay 31 puntos de vertida de industrias y 14 plantas de saneamiento de OSE.
Las cargas de nitrógeno y fósforo que vertió el río Yí a la cuenca del río Negro se ubican en tercer lugar, por detrás del Arroyo Grande y el Arroyo Grande del Norte. Luego aparecen –en menor medida- el Arroyo Salsipuedes, Rincón del Bonete, el río Tacuarembó y el río Tacuarembó Chico.

Los contaminantes
Cuando los técnicos monitorean la cuenca y sus ríos, encuentran agentes contaminantes. Los tóxicos que han aparecido en el monitoreo del río Negro son varios. Destacan AOX, Fenoles, Endosulfan, Aldrin, Dieldrin, Atrazina, Glifosato, AMPA, DDD, DDE, DDT, Lindano, Heptacloro, Metoxiclor, Cromo, Nitrógeno, Hierro, Zinc y demás elementos.

Diario EL ACONTECER -  Durazno - 10 agosto 2018