ecomoniasGobierno presenta resultados económicos y con dólar “planchado” BCU define si baja o mantiene la tasa de interés

Esta semana destaca la presentación de resultados y proyecciones económicas que hará la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche. También vuelve a reunirse el Comité de Política Monetaria del BCU, en un contexto de inflación controlada y dólar congelado en $ 39

Tras el impasse obligado que imponen las vacaciones de verano, la agenda económica en Uruguay vuelve a rodar esta semana con hechos relevantes.

Las miradas están puestas en la presentación que realizará el próximo miércoles la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche. La exposición se centrará en la situación fiscal y las perspectivas macroeconómicas del país para 2024.

Esta presentación que funciona como una “rendición de cuentas” del equipo económico se realiza de manera ininterrumpido desde 2021 y al promediar febrero. El balance de resultados suele extenderse entre 45 minutos y una hora, y en esa instancia se hace referencia a la evolución reciente de distintas variables.

Salario real y empleo

Cabe esperar que el gobierno destaque la recuperación observada del salario real en el último año y el dinamismo del mercado trabajo en 2023, que se mencione la suba del grado inversor -clave para las condiciones de acceso al financiamiento internacional-, los proyectos de inversión privada, las transferencias sociales, la importancia de la reforma de la seguridad social, y las inversiones en infraestructura vial, entre otros puntos.

Además, es una oportunidad donde se suelen actualizar proyecciones oficiales sobre el crecimiento esperado de la economía. Hoy está vigente una estimación de 3,7%, que es lo que el gobierno estableció a mitad del año pasado en el proyecto de Rendición de Cuentas, pero que quizás puede afinarse.

La economía que viene

Con desempeño magro, la economía de Uruguay crecerá apenas unas décimas por encima de 0% en 2023, algo previsible en un año que estuvo marcado por factores extraordinarios como la sequía. También pesó la finalización de las obras de UPM 2, la parada técnica de la refinería de Ancap.

Ese impacto que jugó negativamente en las cuentas nacionales no estará en 2024, y hace prever mejores resultados en la producción del agro y las exportaciones de bienes, a lo que también se sumará el funcionamiento a pleno de la nueva planta de celulosa en Durazno.

También caben esperar efectos más acotados por la diferencia cambiaria con Argentina que se ha ido acortando. Las perspectivas apuntan a un mayor dinamismo de la economía, que crecería en el eje entre de 3% y 4%.

Hay otro asunto que probablemente se incluya en la presentación y son los resultados de inflación (5,1% interanual a enero). El fuerte descenso de los precios es un punto que seguramente las autoridades no querrán dejar de destacar.

Aunque vale recordar que este punto no estuvo presente en oportunidades anteriores, cuando el nivel de precios minoristas estaba muy por encima de la meta oficial.

Metas fiscales y resultado estructural

Un capítulo fundamental de la presentación girará en torno a la situación de las cuentas públicas. Las autoridades harán público el resultado fiscal estructural –excluye efectos de fluctuaciones cíclicas y factores extraordinarios como la sequía–­.
Este es uno de los tres pilares de la regla fiscal -junto con el tope de crecimiento del gasto y el tope de endeudamiento- que se cumplió en los tres años anteriores. El gobierno ha insistido en que esa meta se ha logrado sin tener que aumentar impuestos.
El cálculo del resultado fiscal estructural también será revisado y calculado por el Consejo Fiscal Asesor, que se expedirá sobre el tema pocos días después. Este es un órgano técnico, honorario, e independiente, que tiene como objetivos dotar de mayor transparencia al manejo de la política fiscal, así como velar por la sostenibilidad de las finanzas públicas.
El rojo de las cuentas públicas (3,6% del PIB a diciembre) fue tema de debate en buena parte del año pasado, a la luz del empeoramiento que mostró el resultado corriente durante varios meses. Algunos analistas remarcaron que el próximo gobierno tendrá un margen de maniobra presupuestal limitado para aumentar el gasto.
Copom del BCU y tasas de interés

A la presentación del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), le seguirá el jueves la primera reunión del año del Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central (BCU).

La reunión tendrá como telón de fondo un resultado de inflación que lleva 8 meses dentro de la meta oficial (entre 3% y 6%) y con tendencia a la baja del promedio de las expectativas.

Los analistas que participan de la encuesta de expectativas que realiza el BCU proyectan en mediana inflación de 6% para 2025. En el caso de los empresarios se ubican un punto por encima para ambos horizontes y fuera del rango.

La tasa de interés de política monetaria está fijada en 9%, tras seis recortes ocurridos desde inicio de 2023 cuando estaba en niveles de 11,5%. Algunos analistas han señalado que si la prioridad es que la inflación converja al centro del rango meta (4,5% en 2025) el margen para seguir bajando la TPM sin entrar en terreno expansivo es reducido.

En diciembre analistas estimaron en mediana una tasa en niveles de 9% sobre mayo y una tasa que se ubicaría en niveles de 8,75% sobre noviembre de 2024.

La caída de la inflación en 2023 ocurrió en un contexto de política monetaria contractiva que deprimió el tipo de cambio, a lo que se sumó menor inflación internacional y reversión en precios de alimentos.

Competitividad y dólar planchado

Un aspecto que se le critica al gobierno es el atraso cambiario y la competitividad internacional del país. Estos puntos están entre los aspectos señalados como más negativos por los empresarios uruguayos. Así lo marcó la encuesta de expectativas empresariales que realizó la consultora Exante durante octubre del año pasado entre más de 300 ejecutivos.

La cotización del dólar en Uruguay al cierre de 2023 se ubicó levemente por encima de los $ 39 y volvió a caer respecto a 2022, un año en que había retrocedido 10,3%.

En lo que va de 2024 el dólar en Uruguay se mantiene planchado en valores próximos $ 39 en el interbancario, tras una leve valorización ocurrida en las primeras semanas de enero que duró poco.

Como parte de la construcción del régimen de metas de inflación, el BCU se mantiene al margen del mercado cambiario y no realiza compras. Esto pese a los reclamos de exportadores y otros sectores de la economía por un tipo de cambio más alto. Esta política de libre flotación se ha mantenido en el arranque de 2024.

Tema de campaña
En año electoral el asunto se va metiendo de a poco en la campaña. En los últimos días el precandidato del Frente Amplio y ex presidente del BCU, Mario Bergara, criticó al gobierno por generar lo que definió como “el mayor atraso cambiario del siglo”.

“El gobierno y el Banco Central chiflan para el costado”, señaló Bergara, que pidió que el BCU intervenga en el mercado para tener un dólar más competitivo.

Agregados monetarios y platitos chinos

Sobre este punto, el economista José Antonio Licandro, recordó que en los gobiernos del Frente Amplio se aplicó la política de platos chinos. Eso implicó que se compraran dólares para que no cayera la competitividad. “En sus propios términos, la caída del TCR fue enorme, se acumularon reservas de manera innecesaria y se emitieron LRM”, sostuvo en su cuenta de X.

Licandro añadió que en esos años la política monetaria “nunca logró los objetivos inflacionarios (aunque se apuntó a un nivel alto) y se estuvo a las idas y venidas con el instrumento monetario (agregado a tasa en 2007 y vuelta a agregados en 2013), generando descrédito en el BCU”.

Por su parte, el economista Javier de Haedo señaló que el tipo de cambio real con fuera de la región está hoy 3% por debajo del mínimo del gobierno anterior (marzo-mayo 2017) y 13% por debajo del promedio del año 2019 (que ya estaba atrasado).

Diario EL OBSERVADOR -Montevideo - URUGUAY - 19 Febrero 2024