ooColumnistas -JUAN ORIBE STEMMER

Políticas de Estado


La inauguración, la semana pasada, de la Terminal de UPM abre una nueva etapa en el desarrollo del Puerto de Montevideo.La Terminal conecta dos sistemas de transporte -el terrestre (ferrocarril) y el marítimo (buques especializados)- que deben funcionar en forma sincronizada y eficiente. En cierto sentido, los verdaderos desafíos para el proyecto comenzarán en el momento en que se termine el enlace ferroviario con la planta y comience el funcionamiento rutinario de un sistema de producción y transporte tan complejo.

La nueva facilidad se construyó ocupando espacios existentes y ganando terreno a la bahía detrás del Muelle C y la Terminal de Graneles de Montevideo. Su propósito es recibir, manejar y almacenar celulosa y otras sustancias químicas utilizadas por UPM, incluyendo ácido sulfúrico, soda cáustica, fuel oil, piedra caliza y sal.

La Terminal tiene, se ha informado, la capacidad para mover dos millones de toneladas de celulosa al año y recibir, cuando en pleno funcionamiento, unos 100 buques especializados. Prácticamente un buque cada 3,6 días.

Para tener una idea del impacto de ese movimiento para el Puerto de Montevideo. Primero, éste movió en el año 2021, en total, 15,8 millones de toneladas de carga general, carga en contenedores (incluyendo transbordos), y graneles. El volumen de lo exportado ascendió a 10,1 millones de toneladas. Segundo, en aquel año entraron al puerto 495 buques portacontenedores, 235 graneleros y 112 buques de carga general. Claramente, la nueva terminal elevará considerablemente el movimiento de cargas y buques del puerto. Lo que se traducirá en una mayor demanda por mejor infraestructura, servicios y trabajo.

Un elemento clave será la profundidad del puerto mismo y de su Canal de Acceso. En la actualidad, los mayores calados promedio de los buques que llegan a Montevideo oscilan entre 12,61 metros, en el caso de los portacontenedores, 11,88 metros en el de los graneleros, y 7,41 metros en el de los buques de carga general. Ahora será necesario dragar a una profundidad que permita el pasaje de buques con un calado de 13,0 metros. Es decir, si tomamos en cuenta la revancha debajo de la quilla, en el futuro cercano será necesario dragar a - 14,00 metros al Cero Wharton.

Entretanto, el proyecto para la expansión de las facilidades de Terminal Cuenca del Plata involucra la construcción de un segundo muelle de 730 metros y la playa de contenedores complementaria. Ello sumará a la Terminal dos puestos de atraque adicionales capaces de recibir buques de los de mayor tamaño que llegan a nuestra región, de unos 400 metros de eslora (los buques que llegan actualmente tienen en torno de los 320 metros de eslora).

Estas instalaciones se suman a una cadena de proyectos completados en las últimas décadas, por privados y por la ANP, que han transformado el Puerto de Montevideo. Este es el resultado positivo de la aplicación metódica de políticas de Estado -en este caso, la Ley Forestal de 1987 y la Ley de Puertos de 1992- por sucesivos gobiernos de diferentes partidos políticos.

La inauguración de la Terminal de UPM es buenas noticias para el puerto y su comunidad marítima y portuaria. Especialmente, cuando se ha anunciado que Argentina avanzará en el proyecto de construcción del Canal de Magdalena.

Diario EL PAIS -Montevideo -URUGUAY - 10 Octubre 2022