Viviendas: cooperativas y Estado debaten buscando el mejor camino
En opinión del secretario general de Federación Uruguaya de Cooperativas por Ayuda Mutua (Fucvam), Gustavo González, se vienen momentos muy difíciles para el país y la situación de la vivienda no escapa a esta realidad.
Consideró que «la vivienda necesita presupuesto», pero el problema de la vivienda debe asumirlo el Estado con una fuerte financiación, sin embargo, remarcó el sindicalista, «el país no cuenta con lo más importante, que es un verdadero Fondo Nacional de Vivienda».
Recordó que en breve se votará precisamente la Ley de Presupuesto, pero con «las declaraciones de la ministra Arbeleche, advirtiendo que será un presupuesto austero, obviamente habrá más recortes».
«Es por ello que la batalla tiene que darse en la calle, de forma madura como siempre lo ha hecho el movimiento popular, con un plan de lucha entre todas las organizaciones sociales, colectivos pequeños y grandes organizaciones históricas, para sumar una unidad en el accionar del movimiento popular y así frenar esta ofensiva», expresó González.
Por su parte, el director de la Agencia Nacional de Vivienda (ANV), arquitecto Klaus Mill von Metzen, manifestó en diálogo con República Radio que el trabajo se sigue procesando pese a la situación que atraviesa el país. «Se han escriturado más de 500 préstamos para viviendas cooperativas; en marzo fueron entregadas 5 cooperativas sumando un total de unas 100 familias aproximadamente». Agregó que hay unas 250 familias -desde marzo cuando asumió el nuevo gobierno- que «tienen vivienda nueva y suponemos que para fin de año unas 70 familias más tendrán su techo».
Para el dirigente de Fucvam «el recorte a los ministerios que refiere a un 15% no es real, ya que ahora deben sumarle la inflación por lo que se llegaría a un recorte aproximado del 25%».
Esto «obliga a que el Ministerio no firme, por ejemplo, a cooperativas que ya tenían todo pronto desde noviembre del año pasado a la espera precisamente de esa firma».
En ese marco, agregó González, se reclamó una gracia debido a la situación laboral de las cooperativas que están en proceso de amortización, «se nos concedieron 4 meses, pero esto no resuelve el tema de la vivienda».
Al ser consultado el director de la ANV sobre si ha habido apertura de ofertas para nuevas cooperativas, indicó que se están estudiando nuevas alternativas de trabajo y de construcción.
Dijo que se estudia la posibilidad de ingresar nuevos sistemas alternativos de construcción, utilizando madera, por ejemplo, elementos que requieren de un documento de aptitud técnica y en el que trabaja un equipo interdisciplinario de distintos entes y organismos estatales -públicos y privados-, al igual que universidades elaborando la instrumentación de una normativa nacional para la madera.
Por ello se apuesta a tener «una norma uruguaya general para el uso de la madera tanto de vivienda como de edificios comerciales o edificios de altura», explicó.
En cambio, en opinión del dirigente de Fucvam «la nueva tipología, el abaratamiento de costos, etc., siempre aparecen como alternativas, esto no es nuevo. Pero un problema como el de la vivienda debe asumirlo el Estado con una fuerte financiación. Y hoy tenemos un 0,5 del Presupuesto nacional para cubrir el déficit habitacional, por lo que es imposible abatirlo. Se han hecho múltiples propuestas electorales de construcción de viviendas pero no son reales, son inviables si no se cuenta con un Fondo Nacional de Vivienda».
Consultado el jerarca de la ANV sobre a cuánto alcanzaría la demanda de vivienda en el país, indicó que llega a las 60.000 viviendas, desde los niveles más bajos a los medios y altos, remarcando que la Agencia se alineará con la política del Ministerio.
Hay otro mecanismo que refiere a la dinamización de los DAT que permiten la incorporación más rápida de sistemas constructivos para brindar soluciones de vivienda, contó Mill von Metzen.
En su opinión «el cambio de la ley posibilitó generar nuevos mecanismos de construcción, por lo que tenemos esperanza de que la participación de las empresas privadas se incrementará, ya que se trabaja en las exoneraciones, y el incentivo inserto en la nueva ley incrementará las construcciones».
Para Fucvam, abaratar costos «no resuelve el problema»
«Por primera vez va a tener que pagar la crisis de alguna manera el gran capital de nuestro país. El Poder Ejecutivo dice que el eje central es la empresa, para nosotros el eje central de la humanidad y de la gestación de riqueza es el trabajo. Es por eso que en este marco hoy se dirime el debate, y el problema de la vivienda no es solo nuevas tipologías o abaratar costos. Cuando se habla de abaratar costos hay que tener en cuenta que no se puede rebajar la calidad de una adecuada vivienda», expresó en República Radio el dirigente de Fucvam, Gustavo González.
Si algo ha desnudado el coronavirus, primero es la precariedad del sistema capitalista, demostrando su irracionalidad -y solo a título de ejemplo mencionaremos a EEUU- pero ello viene precedido de una crisis del sistema. Son momentos de reflexión para el conjunto de la humanidad y es momento de agrupar gente ya que la ofensiva va a continuar porque esta crisis recién empieza. Habrá más desempleo y las patronales están aprovechando el momento, hay una mutación en el mundo del trabajo y desde la perspectiva de los trabajadores la situación tiene que ser analizada.
Agregó que se da una situación «ridícula», por un lado «se nos llama al aislamiento y si se está infectado hay que aislarse» en una habitación con baño. «¿Qué hace un obrero que se enferma y vive en un asentamiento?» se preguntó. Recordó, además, que cuando empezó la pandemia el Poder Ejecutivo indicó el aislamiento, pero la Cámara de la Industria de la Construcción de un día para otro dijo: «todo el mundo a trabajar» y 50.000 trabajadores se vieron obligados a salir a trabajar. ¿El aislamiento es para todos? Deberíamos preguntarnos. Creo que estamos asistiendo al gran hermano de todas las noches entre 20 y 21 hs, cuando el coronavirus es el telón que cubre una brutal crisis del sistema.
La postura de la Agencia Nacional de Vivienda
El arquitecto Klaus Mill von Metzen indicó que lo primero que -junto al Ministerio- se hizo fue otorgar un 10% adicional a los descuentos previstos para el pago de cuotas, además de 4 meses de bonificación a quienes no pudieron hacer efectivo el pago de las mismas. Agregó que la ANV otorgó, mediante convenio entre el Mvotma y el Mides, unas 10 viviendas para alojar a personas en situación de calle.
«En los próximos días se entregarán 8 más, además se dispondrá de terrenos para instalar viviendas móviles y se están implementando reformas en viviendas que serán también utilizadas como refugios», indicó Mill von Metzen.
Señaló además que la ANV es el brazo ejecutor del Mvotma, por lo tanto «ejecutamos todas las políticas que implementa el Ministerio».
Consultado sobre cuál será el próximo paso en la estrategia de la ANV para introducir la madera en las futuras construcciones señaló que entre otros parámetros se maneja el hecho de necesitar «plazos mucho más cortos de construcción, pero también se pueden armar los paneles en industrias y luego ser trasladados, por lo que en pocos meses una obra estaría finalizada».
Esta herramienta es uno de los ejes que desde el Mvotma la ministra Moreira considera motivo fundamental en su gestión, indicó el director de ANV.
La morosidad, producto de la pandemia
Consultado sobre este aspecto, manifestó el jerarca que «la morosidad debido a la pandemia ha sido de un impacto importante». Aunque señaló que se deben separar dos tipos de morosidad: como la Agencia es fiduciaria y se creó con los créditos más duros del BHU, administra esos fideicomisos, y en estos casos hubo una morosidad del 18-20%. Respecto a las cuotas que cobra el Ministerio llegarían al 40% de morosidad.