EXONERACIÓN FISCAL
Gobierno dio señal esperada por proyectos de construcción por al menos US$ 250 millones
El Ministerio de Economía anunció ayer la extensión del plazo para brindar exoneraciones fiscales a construcciones de gran porte.
El gobierno extendió el plazo de los beneficios fiscales para las construcciones de “gran dimensión económica” -alrededor de US$ 16 millones- para la venta o arrendamiento de inmuebles con destino a oficinas o vivienda, que se habían puesto en 2016 y que vencían el 31 de diciembre de 2021.
Tras una reunión entre empresarios de la construcción de viviendas y oficinas y el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori y el subsecretario de esa cartera, Pablo Ferreri, se hizo el anuncio.
El nuevo decreto señala que el plazo para ejecutar las obras se extendió un año, del 31 de diciembre de 2021 al 31 de diciembre de 2022.
Eso será siempre que la obra se inscriba ante el Banco de Previsión Social antes del 31 de diciembre de este año y se comience con su ejecución antes del 15 de enero de 2020.
“Esto les da más tiempo a las empresas, que por distintos motivos asociados a las realidades del mercado vieron demorado el inicio de las obras o la ejecución de las mismas”, dijo Ferreri a El País.
“Esta extensión del plazo, permitirá que efectivamente puedan utilizar los beneficios que prevé la norma” lo que “con el plazo más corto les hubiera resultado inviable”, agregó.
Los beneficios incluyen la exoneración de algunos impuestos y tasas a la importación de equipos, máquinas y materiales destinados a la obra civil y exoneración del Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas por el equivalente al 20%, 25% o 30% de la inversión (a mayor monto invertido, mayor porcentaje de beneficio), entre otros.
“Según lo conversado con algunos de los principales promotores de la construcción, esto posibilitará la ejecución de proyectos por aproximadamente US$ 250 millones”, señaló Ferreri a El País.
El vocero del encuentro por el lado de los empresarios fue Eduardo Campiglia, director de Campiglia Construcciones.
“Nos comunicaron la extensión de plazo que habíamos solicitado, porque hay proyectos muy importantes que sin (la extensión del) plazo se perdían los beneficios fiscales, entonces no se iban a comenzar”, señaló Campiglia.
“Este beneficio ayuda muchísimo, muchísimo”, afirmó.
En el caso de Campiglia, el ejecutivo explicó que están con un proyecto de oficinas y viviendas en la zona del World Trade Center en Pocitos. “Es un proyecto que venimos luchando hace 27 años y esperamos concretarlo ahora. La extensión del plazo (de los beneficios fiscales) ayuda a tomar el riesgo” de la inversión, aseguró.
“Si no tuviéramos este beneficio sería imposible (de concretarlo) porque es un proyecto a largo plazo”, agregó y remarcó que la iniciativa implica unos US$ 100 millones.
Campiglia dijo que desde la Asociación de Promotores Privados de la Construcción (Appcu) se planteó al gobierno la posibilidad de que aquellas empresas con varios proyectos pero que individualmente no alcancen a ser de “gran dimensión económica” pudieran sumarse y así acceder a los beneficios. Ferreri señaló que “esto en principio no se analizó”.
El empresario dijo que la construcción “no está en el mejor momento. Pero, la construcción es así, tiene momentos más altos y más bajos”,