ENTREVISTA EN VIDEO
Caetano: “El Frente Amplio tiene que jugar la campaña electoral como si fuera perdiendo”
En diálogo con LARED21, Caetano se mostró convencido que el retraso en la inversión de la empresa finlandesa UPM en nuestro país está en la perspectiva de “preferir un cambio de gobierno”.
Cabe recordar, que la empresa finlandesa UPM tiene plazo hasta febrero de 2020 para responder si hará o no, la inversión en el país.
Agregó también, que el PIT-CNT “saldrá a hacer campaña como brazo social del FA” y que ahora “la oposición también tiene su brazo social que es empresarial”.
Caetano también hizo un repaso de los desempeños de Daniel Martínez, Luis Lacalle Pou, Ernesto Talvi y Guido Manini Ríos.
El domingo 30 hubo ganadores y perdedores, partidos que salieron mejor y otros peor, el que salió mejor fue el Partido Nacional, tuvo una gran votación y confirmó un liderazgo.
Han pasado algo más de 15 días de la elección interna ¿Cómo ves la coyuntura política?
Las elecciones internas tuvieron un resultado que si bien no se puede proyectar a octubre, y si bien no define, marca la campaña hacia octubre. Una campaña que puede considerarse corta, falta algo más de 100 días. El domingo 30, hubo ganadores y perdedores, partidos que salieron mejor y otros peor.
El que salió mejor fue el Partido Nacional, tuvo una gran votación y confirmó un liderazgo. Si bien no resolvió el problema interno, Juan Sartori es un problema para el Partido Nacional, y si bien no votó mal, quedó en un segundo lugar lejos. Lacalle Pou fue confirmado de manera categórica por los votos que obtuvo. El “fenómeno Sartori” está acotado, pero sigue estando allí. Tanto el Partido Nacional como su candidato, están bien posicionados para la campaña.
El Partido Colorado tuvo una votación razonable, importante, y sale con un ganador, Ernesto Talvi, podemos hablar de un “liderazgo emergente” porque le gana nada menos que a Julio María Sanguinetti. Con su triunfo, activa a todo el Partido (Colorado), incluso con una intención manifiesta, a mi juicio difícil, que es pasar al balotage. Sin embargo, sigue habiendo una diferencia apreciable entre el Partido Nacional y el Partido Colorado, lo vimos el domingo 30, y también lo indican las encuestas.
El que salió complicado fue el Frente Amplio. Revela que la elección responde a una construcción que fue equivocada. En la obsesión por preservar la unidad, que no estaba en entredicho, armó una campaña, “casi pactada” donde salvo Oscar Andrade, los otros candidatos no marcaron “la cancha”. La votación que obtuvo el FA fue muy inferior a la esperada, por eso sale complicado.
El Partido que también salió fortalecido fue Cabildo Abierto, liderado por el ex Comandante en Jefe del Ejército Guido Manini Ríos. Manini marca “en punta” entre los partidos menores, y allí se puede definir el próximo gobierno y con un liderazgo también emergente, que tiene referencia y está “articulado” con una institución pública como es el Ejército, es decir, no es solo un Partido militar.
Es un escenario donde la “cuesta arriba” la tiene el partido de gobierno y la oposición parece estar en mejores condiciones para ganar la mayoría legislativa, sin embargo, con un nivel de fragmentación que parece muy difícil la construcción de un gobierno, aunque obtenga la mayoría legislativa. La principal desavenencia entre blancos y colorados, es como cada uno percibe al gobierno de coalición, mientras Lacalle Pou habla de una coalición multicolor que incluye a Cabildo Abierto y al Partido de la Gente (Edgardo Novick), Ernesto Talvi los excluye en particular a Cabildo Abierto y a mi juicio con acierto, donde el propio Talvi expresa que las diferencias son “oceánicas”.
Lacalle Pou afianza un liderazgo y Talvi es un liderazgo emergente. Daniel Martínez en tanto, no sale consolidado de la campaña. Es muy difícil consolidar liderazgo ganando con el 42%.
¿Daniel Martínez, Luis Lacalle Pou, Ernesto Talvi son los nuevos líderes partidarios?
Hay situaciones diferentes.
Creo que Lacalle Pou afianza un liderazgo, no parece tener rivales fuertes dentro de su Partido. La derrota de Larrañaga corta la pelea por el liderazgo dentro del Partido Nacional y lo de Sartori es un “misterio” que algún día podremos dilucidar pero quedó lejos.
En el Partido Colorado hay un liderazgo emergente, y no solo un candidato. El propio Talvi lo había dicho “voy de punto pero si gano, le gané nada menos que a Sanguinetti”, además le ganó por goleada. Talvi decía “le voy a ganar en el último minuto y con un gol de cabeza” y en realidad le ganó en la mayoría del país. Es decir, no le ganó únicamente en Montevideo y Canelones, le ganó en la mayoría de los departamentos del interior. Talvi reorientó su visión ideológica, era una visión más “liberal empresista” de sus años como Director de CERES, ahora en la política se presenta con una perspectiva más de centro, incluso de centro izquierda, peleando un lugar efectivamente batllista, se posicionó en un lugar que disputa votos con Lacalle Pou, tiene fronteras electorales con el Partido Independiente e incluso con el FA.
Los tiempos económicos no están calzando con los tiempos políticos y esto que era el fuerte del gobierno ha dejado de serlo.
Daniel Martínez, en tanto, no sale consolidado, se esperaba que ganara, sin embargo, en la campaña arriesgó muy poco. Es muy difícil consolidar un liderazgo ganando con el 42%, ganó con claridad, pero no apabullante como ocurrió con Lacalle Pou y con Talvi. Aún después de haber sido Intendente de Montevideo, incluso fue el primer político frenteamplista que logró corrientes de simpatía similares a las de (Tabaré) Vázquez o (José) Mujica. Su campaña no fue lucida, y la semana siguiente a la elección interna, la manera de tramitar la conformación de la fórmula fue desprolija, él sale golpeado. La elegida, Graciela Villar, puede ser un acierto en términos de complementación, pero la cuestión fue como se tramitó esa elección. Martínez tendrá que relanzar su candidatura, en una situación que no es de liderazgo. Mujica y Lucía (Topolansky) saldrán a hacer campaña con sus “dos pollos”, Yamandú Orsi (intendente de Canelones) y el diputado Alejandro Sánchez, al que “candidatean” para la intendencia de Montevideo. Mujica con 83 años, mantiene su liderazgo, Vázquez no, incluso termina su presidencia con un bajo respaldo popular, así lo indican todas las encuestas. El FA tiene que encarar la campaña asumiendo que el gobierno ha tenido una popularidad que ha caído en “picada”, y al mismo tiempo, esa baja de popularidad que “calza” con problemas que son estructurales, que es muy difícil de cambiar de un día para el otro, como la seguridad. Este es un problema que está en el mundo, y en la región. El que diga que sacará al narcotráfico de un día para el otro, o que lo resolverá con mano dura o con tecnología, no hay magia, es un tema complicado. A su vez, los tiempos económicos, no están calzando con los tiempos políticos, y esto que era el fuerte del gobierno, ha dejado de serlo. Hasta el año pasado, el gobierno podía exhibir una performance que era muy buena, aunque siga siendo buena en relación a una región, donde en muchos países hay recesión. Pero Uruguay presenta un cuadro de estancamiento y la previsión más optimista habla de un crecimiento de 0.7%. La inversión cayó, hay destrucción de empleo y la desocupación aumentó, hay un consumo desacelerado. Y el contexto mundial y regional no es favorable. Además, los “agentes económicos”, tanto los nacionales como los internacionales, están jugados a un cambio de gobierno.
Estos agentes económicos ¿están jugando en contra del FA?
Este retraso de UPM en decidir la inversión (para construir la planta industrial), lo veo en la perspectiva de que prefieren un cambio de gobierno. No tengo evidencias, pero si la inversión de UPM se hubiera dado en 2017, estaríamos hablando de un crecimiento del 2% por lo menos, y no estaríamos hablando de desempleo y habría un clima de inversión distinto. Estamos hablando que la inversión privada nacional ha bajado, todo año electoral es de expectativa. También es cierto que el contexto regional es negativo, miremos lo que sucede en Argentina y Brasil.
Las Cámaras empresariales han dicho que prefieren dialogar con la oposición, tienen más cercanía.
Respecto a que UPM no haya decidido la inversión tenés sospechas que hay una intencionalidad política pero no tenés evidencias
Las Cámaras empresariales han dicho muy claramente que prefieren hablar con la oposición, tienen más cercanía. Estamos en un escenario donde el movimiento sindical está alineado al FA y saldrá a hacer campaña, como un brazo social del FA. Lo hizo en 2014 y lo repetirá, pero ahora también la oposición tiene un brazo social, que es empresarial, que ya no es únicamente en el medio rural sino que es a nivel general. Es una campaña complicada, y el tema económico, es el más complicado.
(Graciela Villar) es una figura donde un elector de izquierda y centro izquierda puede reconocerse. Además parece complementaria a la figura de Daniel Martínez.
¿Cómo viste la conformación de las fórmulas presidenciales?
En materia de procedimientos, el Partido Nacional y el Partido Colorado fueron más prolijos y Daniel Martínez extremadamente desprolijo y en algún sentido incomprensible. No por la elección de la persona (Graciela Villar) ya que Villar para el electorado frenteamplista descontento y para sectores sociales populares, es una figura muy interesante, buena oradora, con trayectoria social. Una trayectoria que tiene la marca de la lucha contra la dictadura. Es una figura donde un elector de izquierda y centro izquierda puede reconocerse. Además, parece complementaria a la figura de Daniel Martínez. Daniel Martínez tuvo actuación en el movimiento sindical, pero al decir de Oscar Andrade, ya está asociado a la izquierda institucional. Villar, aunque fue parte de la Junta Departamental, tiene una dimensión de izquierda social. Lo del “título” de Graciela Villar, no es asimilable a lo que ocurrió con Raúl Sendic, son situaciones distintas, aunque la connotación llega. No creo que tenga peso, su figura es interesante. El FA hizo una campaña donde prácticamente no hubo competencia para cuidar la unidad, y luego de la elección, fueron 15 días “horrorosos” en términos de confrontación interna. De la interna surge un “caudillo popular” como es Oscar Andrade, que conforma una alianza con Carolina Cosse, tenemos un Partido Comunista con una expectativa de voto “muy fuerte”. Hay que ver como impacta en la lógica de competencia. Por otro lado, está la debilidad del Frente Líber Seregni. Danilo Astori, en estos días, terminó deslucido y eso se transfiere a su espacio político. La dificultad que causó su no apoyo a Mario Bergara y a la vez Bergara con su estatura académica, no deslumbró desde el punto de vista político, fue demasiado “tímido”, no se animó a decir ciertas cosas en la campaña. El que sí se animó y entró en la elección de una manera y sale fortalecido, es Andrade. Martínez ganó pero con un margen menor al esperado, y Carolina Cosse no cumplió con las expectativas y contaba con el apoyo del MPP.
En el año del centenario de Wilson Ferreira, el “wilsonismo” ha perdido pie dentro del Partido Nacional. El “wilsonismo” ya no es invocado, estamos ante un Partido Nacional distinto.
¿Y en el Partido Nacional?
Tuvo una interna muy complicada, la tendencia de crecimiento de Juan Sartori, la forma en que desarrollo la campaña, con propaganda sucia, con un uso ostentoso de la billetera, con compra de militantes y con ataques durísimos contra sus compañeros. Estuvo planteada la pregunta: ¿Qué pasa si gana Sartori o si queda cerca de Lacalle? En 9 meses cambió el mapa del Partido Nacional y Alianza Nacional que competía por el liderazgo ya no compite, veremos cómo le va en las legislativas y en las departamentales. Lacalle Pou sale fortalecido y su sector “Todos” es más que el herrerismo. Esta diluida la polarización herrerismo vs wilsonismo. En el año del centenario de Wilson Ferreira, el “wilsonismo” perdió pie dentro del Partido Nacional. El “wilsonismo” ya no es invocado, estamos ante un Partido Nacional distinto. Lacalle Pou y “Todos” ha transcendido la frontera del herrerismo, es el herrerismo y algo más.
El Frente Amplio tiene que jugar la campaña electoral como si fuera un partido que va perdiendo.
¿Observas que el FA está perdiendo la elección?
Observo procesos, más que encuestas puntuales, y que es lo que muestra la evidencia, el país se corrió hacia la derecha, no de forma categórica, no se pasó a la ultraderecha, pero se corrió, siguió el camino de América Latina y de Occidente. En el mundo existe este corrimiento. En América Latina hay incluso corrimientos hacia la extrema derecha, que en Uruguay por suerte no ocurre y digo por suerte porque la ultraderecha cuestiona la democracia liberal. Pienso en Bolsonaro (Brasil), Duque (Colombia) países centroamericanos, incluso la “deriva” de los gobiernos bolivarianos. ¿Qué es Maduro hoy? ¿Qué es Lenin Moreno (Ecuador)? Las encuestas todavía dan un margen de indefinición. Los días que faltan para la elección pueden ser mucho o poco, depende de la campaña que se realice. Si uno ve la mirada larga, si se ve la evolución del descontento, la articulación de la agenda y los desempeños, la situación económica que no calza con los tiempos políticos, no cabe duda que hoy lo que prima es que el FA está perdiendo. Eso quiere decir que ya perdió, no. Tiene que revertir una situación que “rompe los ojos”, quién no la ve tiene que “cambiarse los lentes”. Hoy quien tiene que recuperar en la campaña, es el FA. ¿Cuán consciente es de esta situación? Públicamente poco, en privado lo aceptan. El FA tiene que jugar la campaña como si fuera un partido que va perdiendo.
Por el lado de la oposición es la diversidad y la fragmentación política e ideológica de su “arco”, si blancos y colorados más el Partido Independiente no alcanzan la mayoría, y la llave del gobierno la va a tener Cabildo Abierto, ahí la coalición de gobierno para convertirse en alternativa, se complica. Es muy difícil un gobierno, donde se sienten juntos Talvi y Manini Ríos, creo que también es difícil Manini Ríos y Pablo Mieres. También está en duda como le irá al Partido Independiente. Esto que se formula casi en clave de voluntad, de una coalición “multicolor” que incorpora también a Cabildo Abierto y al Partido de la Gente, es muy complicado en términos políticos, ideológicos y de persuasión de la ciudadanía. La mayoría puede obtener las mayorías legislativas y sin embargo, tener problemas para conformar una alternativa viable. En octubre no habrá mayorías y entre octubre y noviembre se podrán dar situaciones muy distintas. La oposición tiene que confirmar una alternativa viable y hoy Lacalle Pou y Talvi no opinan lo mismo respecto a esto. Hay muchos elementos que fortalecen a Talvi y es que con Cabildo Abierto es muy difícil conformar un gobierno.
Diario LR21 - Montevideo - URUGUAY 19 julio 2019