glifosato abejasCómo afecta el glifosato a la población de abejas en Uruguay (y por ende a la economía)

Un estudio del Instituto Clemente Estable muestra que aun en dosis subletales la exposición diaria al herbicida es una de las principales causas de la despoblación de colmenas.La disminución de la población de abejas a nivel mundial es un problema reconocido de los últimos 15 años.

Alejo González - Especial para Cromo

Fue dado a conocer primero en Europa y Estados Unidos y desde el año 2016 existe la Sociedad Latinoamericana de Investigación en Abejas (Solatina) que se ha dedicado al monitoreo de la pérdida de colmenas en el continente.

Según los últimos datos obtenidos por Solatina (2017-2018), en Uruguay la pérdida de colmenas es del 25% y el 30% anual. A nivel mundial las pérdidas llegan a promedios de entre 30% y 40% mientras que en América Latina países como Colombia y Chile llegan a estar por encima del 50%.

¿Por qué pasa esto? ¿Cómo se explica?

En un seminario realizado este miércoles a través de Zoom, Karina Antúnez doctora en Ciencias Biológicas del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable (IIBCE) dio pistas sobre esto al referirse al descenso en la población de abejas melíferas. Apis mellifara, su nombre científico, es una especie no autóctona utilizadas por apicultores y productores agrícolas de todo el mundo. Su uso extendido se debe a que es un "polinizador muy efectivo" por tener el cuerpo cubierto de pelos que le permiten captar mayores cantidades de polen que otras especies.

En Uruguay, su ausencia se produce por tres factores: la exposición de las abejas a patógenos, desnutrición e intoxicación con pesticidas.

Importancia en la economía
Antúnez aseguró que “3/4 partes de los cultivos se benefician por la polinización de las abejas”. La polinización consiste en el proceso de fertilización de flores para la formación de semillas y frutos mediante el traslado del polen de una flor a otra. Se estima que el 90% de las plantas con flor son polinizadas por animales y las abejas son consideradas el principal agente polinizador ya que su alimentación se basa en gran medida en polen y néctar.

Según un estudio del año 2009 del Instituto Clemente Estable y las Facultades de Ciencias, Química y Agronomía (Udelar) los beneficios de la polinización que llevan a cabo las abejas van desde el aumento de la producción hasta la mejora en la calidad de los productos (mejor tamaño, forma y maduración temprana).

En dicho trabajo se calculaba que el valor económico estimado de la “acción polinizadora de la abeja melífara” en Uruguay había sido de más de $1.600 millones de pesos en 2008.

El estudio
En 2019, el Laboratorio de Microbiología y Salud de las Abejas del IIBCE en el que trabaja Antúnez llevó a cabo un estudio con esta especie para comprobar las consecuencias de los pesticidas sobre la salud de estos insectos. El Laboratorio trabaja con investigadores de Facultad de Ciencias, Veterinaria y Química (Udelar), Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) y la División de Laboratorios Veterinarios (DILAVE).

Para realizar el estudio se llevaron abejas a punto de nacer para que emerjan en condiciones controladas y sean enjauladas para las pruebas.

El pesticida seleccionado para este experimento fue glifosato que, según afirma Antúnez, es “el herbicida más utilizado alrededor del mundo”. Fue introducido por la empresa Monsanto en 1974 quien fue su único comerciante hasta el año 2000 cuando el producto pasó a ser de libre uso para otras empresas. En 2015, la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer lo clasificó “probablemente cancerígeno para los seres humanos”.

Las abejas fueron sometidas a cuatro tratamientos diferentes por un período de 14 días: un grupo de control fue alimentado con jarabe, otro fue intoxicado con glifosato y otro alterado con el hongo Nusema ceranae (considerado uno de los patógenos causantes del despoblamiento de colmenas) y un último grupo con glifosato y Nusema ceranae. Las dosis de glifosato suministradas fueron subletales y similares a las que se encuentran en zonas de producción de alimentos

Los resultados dieron que la exposición a glifosato y Nusema generó cambios en la inmunidad, una mayor susceptibilidad a patógenos y una disminución de la supervivencia de las abejas. En aquellas expuestas al glifosato o a la mezcla entre el glifosato y el hongo la expectativa de supervivencia con el paso de los días era significativamente inferior a la de las abejas del grupo de control.

Soluciones
El laboratorio investiga diferentes soluciones que puedan ayudar a mejorar la salud de estos insectos mediante el desarrollo de suplementos nutricionales, probióticos (microorganismos que generan beneficios cuando son consumidos) y propóleos (sustancia natural de propiedades antibacterianas).

El trabajo aún no fue publicado pero estará disponible a la brevedad debido a que "fue aceptado para su publicación" la semana anterior al encuentro virtual. El seminario puede verse a través de Youtube en página de divulgación del Instituto Clemente Estable o haciendo click aquí.

Diario EL OBSERVADOR -Montevideo - URUGUAY - 16 Abril 2021