Hecatombe de abejas en el tercer mundo
Ahora sí, las abejas empiezan a desaparecer a pasos agigantados en los países en los cuales la venta de la miel no cubre los costos. Sudamérica en particular tiene costos altos y precios desastrosos.
Christophe Lhéritier – Montevideo – TodoElCampo – Los norteamericanos son muy prácticos. Si un negocio no sirve, no produce dinero, se deja.
Cuando los precios de la miel bajaron, los apicultores de Norteamérica dejaron el negocio. La producción de miel bajó casi un 40 %. La polinización pagó mejor y a eso se dedicaron en su mayoría.
Varroa, pesticidas, clima y a veces el maltrato con químicos de los propios apicultores, se unieron para lograr que mundialmente mueran algo así como 25 % de las colonias de abejas. Eso se soluciona reponiendo abejas, con divisiones, núcleos y caza de enjambres.
Mientras la abeja siga dando miel, no se van a extinguir. Salvo…, salvo si lo que produzca la abeja no vale nada.
No money , no honey (no bees)*. Estamos en este proceso dramático de dejar el noble insecto abandonado a los factores climáticos y ambientales, sin reponerlo.
Ahora sí, las abejas empiezan a desaparecer a pasos agigantados en los países en los cuales la venta de la miel no cubre los costos. Sudamérica en particular tiene costos altos y precios desastrosos.
Tampoco se valora la polinización. Es factible que América Latina (América del Sur y América Central) pierda este año 30 % de sus abejas y de sus criadores, y no se repondrán.
(*) No money , no honey (no bees): traducción: sin dinero, sin miel (sin abejas).