Argentina afianza obras en Canal Magdalena; quiere evitar trasbordos en Montevideo y tener un puerto hub
El gobierno argentino anunció que llamará a licitación para el comienzo de las obras en el canal
El gobierno argentino continúa con su apuesta al Canal Magdalena como una vía de conexión marítima directa para sus exportaciones. Sus impulsores afirman que otorgará la posibilidad de evitar trasbordos de mercadería en Montevideo y permitirá que Argentina tenga un puerto hub.El 1º de marzo, el presidente argentino Alberto Fernández anunció en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso que se realizará la licitación para el comienzo de las obras.
“En los próximos días lanzaremos la licitación pública para la construcción de la vía navegable Canal Magdalena. Obra de dragado y balizamiento que le brindará a la provincia de Buenos Aires la posibilidad de exportar su producción de manera más eficiente con una salida directa a aguas profundas”, dijo.
El jueves 9 de marzo se realizó el seminario Potencial logístico del Canal Magdalena en la sede del Consorcio de Gestión Puerto La Plata y otros jerarcas profundizaron sobre el tema. El vicepresidente del Ente Nacional del Control y Gestión de la Vía Navegable, Hernán Orduna, explicó que la primera etapa para las obras comenzará con la licitación para el dragado de apertura.
El tiempo estimado para ese trabajo es de 21 meses y una vez que esté en marcha se realizará el llamado para la señalización y luego se efectuará otro para el dragado de mantenimiento. Recordó que el proyecto fue presentado, junto a otros estudios, entre 2014 y 2015 ante la Comisión Administradora del Río de la Plata (CARP) y aprobado por la delegación uruguaya el 26 de enero de 2016.
“El proyecto no se puede modificar, porque si se modifica aunque sea un milímetro, hay que someter nuevamente a consulta previa de Uruguay. Por eso el proyecto no se toca”, afirmó.
Otro de los disertantes fue el presidente del Consorcio de Gestión del Puerto La Plata, José María Lojo, que transmitió las ventajas competitivas que le traerá esa obra a Argentina.
“Si tenemos el Canal Magdalena podemos pensar en un puerto principal, hub, en la costa del Río de la Plata en la República Argentina. Eso quiere decir que pasamos a tener conectividad directa con las grandes embarcaciones”, indicó.
Lojo expresó que esos barcos portacontenedores necesitan calados y canales de navegación que la vía troncal argentina no ofrece de manera eficiente. “Hoy en día tienden a instalarse en otros puertos para hacer sus operaciones y obligarnos a hacer trasbordos. Nuestros puertos son alimentadores de un puerto principal y concentrador. Eso genera mayores costos y esos costos los pagamos nosotros”, sostuvo.
“Sin el Canal Magadalena no tenemos un puerto principal en nuestro país y los buques de gran calado quedan en Montevideo o en Santos. También las inversiones y la competitividad de los productos argentinos”, agregó.
Por eso, desde su visión, es fundamental que Argentina tenga conectividad directa con sus destinos de exportación. “En Puerto La Plata se sacan entre 600 y 700 barcos con combustible para distribuir en toda Argentina. Para llegar a Comodoro Rivadavia, por ejemplo, hay que pasar primero por Uruguay”, informó.
Idas y vueltas
Evitar los trasbordos de mercadería en el puerto de Montevideo siempre fue un tema que estuvo en la agenda de las autoridades argentinas en distintos períodos. En noviembre de 2013, durante el gobierno de Cristina Fernández, la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables emitió la resolución 1108 con la que prohibió los trasbordos de mercadería argentina en puertos uruguayos.
La medida generó una fuerte caída de la actividad en Montevideo que captaba una buena parte de las exportaciones argentinas en tránsito para luego embarcarlas en buques de ultramar y trasladarla hasta su destino final.
La resolución fue derogada por Mauricio Macri en diciembre de 2015 a los pocos días de asumir como presidente.
En la actual administración de Alberto Fernández comenzó a cobrar fuerza la construcción del Canal Magdalena. Uno de sus principales impulsores fue Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos, y político cercano a Cristina Fernández. En junio del año pasado planteó públicamente que se debía avanzar lo más rápido posible en la construcción del canal porque básicamente se trataba de “una cuestión de soberanía”.
También a mediados de 2022 una funcionaria argentina se refirió a la necesidad de potenciar la actividad portuaria. Florencia Carignano dijo durante una conferencia sobre hidrovías que se debía ”fortalecer los puertos argentinos en detrimento de los uruguayos”.
La respuesta del lado uruguayo es continuar profundizando el canal de acceso al puerto de Montevideo. Actualmente está en 13,5 metros y la intención es que alcance los 14. Uruguay presentó en noviembre del año pasado el pedido formal ante la Comisión Administradora del Río de la Plata, ya que debe contar con el aval de la delegación argentina.
Con esa profundidad el puerto estará en condiciones de recibir portacontenedores que necesitan mayor calado. También le dará una mayor competitividad regional para seguir captando carga en tránsito.