Azucarlito vendió el 53% de sus acciones a un grupo argentino que planea inversiones de US$3 millones para potenciar su competitividad
La azucarera sanducera que estuvo los últimos 30 años en manos 100% uruguayas volvió a integrar capital extranjero.o es la primera vez que Azucarlito está, parcialmente, en manos extranjeras. Desde sus comienzos en los años 50 y hasta 1995 la compañía estuvo integrada por una azucarera francesa que tenía el 60% de las acciones en su poder.
En ese entonces y luego de suscribirse el acuerdo de Asunción que dio lugar al Mercosur, que cambiaba cómo se movían las piezas en la región, la empresa tomó la decisión de interrumpir cultivo de la remolacha, pero se propuso sostener una actividad industrial en base a refinar crudo importado.
En ese contexto, en la mitad de la década de los 90, los europeos presentes en la empresa decidieron vender su parte y la firma pasó a ser 100% uruguaya, hasta ahora que el Grupo tucumano Budeguer entró en juego y adquirió el 53% de las acciones de la empresa, según informó Forbes Uruguay
En entrevista con Café y Negocios, el gerente general de Azucarlito, Miguel Fraschini, dio detalles de la negociación que tomó alrededor de un año y se concretó a finales de octubre, pero comenzó el año pasado cuando históricos accionistas de la compañía se interesaron en vender su parte.
“Ante la imposibilidad de mi familia de poder comprar las partes intentamos matar dos pájaros de un tiro, conseguir un comprador que fuera buena para vender y que sea un socio con mayor potencial, que productor y preferentemente de Argentina”, ya que resulta más conveniente importar el crudo desde Argentina que desde Brasil. A Fraschini no le tomó mucho tiempo encontrar al candidato ideal, algunos antecedentes de trabajos en conjunto le habían demostrado que el indicado era el Grupo Budeguer.
“La relación que se había desarrollado a lo largo de los años era en base a confianza, se entusiasmaron con la invitación y procedieron a negociar sus condiciones para comprar las acciones y entrar de socios. Y la historia tuvo un final feliz porque los vendedores aceptaron la oferta, hicimos un buen convenio de accionistas, los integramos como socios y está funcionando bien esa sinergia”, sostiene Fraschini.
Las inversiones de Azucarlito
En el mercado local Azucarlito es líder con la venta de más de 60.000 toneladas anuales. Lo sigue Alur con 20.000 y otras 20.000 toneladas se importan desde el exterior.
“Uruguay es un mercado de 100.000 toneladas de azúcar, más o menos. El 80 % del mercado está cubierto por las dos empresas nacionales, Alur y Azucarlito. Y 20 % todavía se está trayendo importada. Y digo todavía porque tengo la expectativa de poderla sustituir por producción propia”, remarca el empresario.
Esas 20.000 toneladas son lo máximo que la empresa puede crecer a nivel local, el resto de su desarrollo depende de la exportación, práctica en la que Azucarlito tuvo algunas buenas pruebas, pero no realiza de forma recurrente. “Para exportar toda la cadena tiene que ser más eficiente”, subraya Fraschini. El interés de la empresa está, sobre todo, en poder aprovechar la capacidad ociosa de su planta. La fábrica de Azucarlito tiene la posibilidad de producir 500 toneladas por día por 300 días al año. “Podría producir 150.000 toneladas al año y estamos produciendo 60.000”, cuenta el gerente general.
En su camino por mejorar la eficiencia, Azucarlito planea algunas inversiones clave para la planta impulsadas por Grupo Budeguer que ahora tiene el control de la firma. “Es muy bienvenida la inversión, es austera y razonable”, dice Fraschini. El gerente hace hincapié en que el desembolso se dirige puntualmente a áreas clave que se deben potenciar para mejorar la eficiencia del negocio. “Es una intervención pequeña para lo que es el tamaño de la fábrica. Una refinería de 500 toneladas por día, como es Azucarlito, es una inversión de US$30 millones de dólares, vamos a invertir US$3 millones”. La apuesta será a las áreas de centrífuga, filtros prensas, eficiencia térmica y movimientos internos de producto con sistemas más eficientes.
El primer país en la mira para la exportación sería Chile, donde la firma ya tuvo una experiencia exportadora hace tres años atrás cuando por una situación coyuntural Azucarlito envió 2.500 toneladas anuales durante dos años al país andino, con resultados positivos. “Fue una buena experiencia porque demostramos que podemos llegar con azúcar de buena calidad, de forma puntual, de una semana para otra”, apunta el gerente general y agrega: “Para ser competitivos estructuralmente y vender todos los años a Chile, tenemos que ser más competitivos de lo que somos hoy”.
El camino de la eficiencia en un contexto adverso
En la última década Azucarlito viene en un proceso de optimización de sus costos de producción, pero lo hecho hasta el momento no resulta suficiente para competir en el concierto internacional.
“Llevamos un proceso importante de búsqueda de eficiencia. Equipos automáticos que lleven menos incidencia de mano de obra y menos energía. Estamos en esa lucha hace rato, pero para ser competitivos a nivel mundial y poder exportar a donde se nos antoje, falta mucho. Falta mucho en un país que de por sí es caro para producir”, reconoce Fraschini.
“El país es caro en mano de obra, es caro en logística, es caro en energía, son las tres cosas más importantes que hacen a nuestro proceso”, señala el titular de la empresa uruguaya y apunta: “Es un milagro si tenemos éxito”. Fraschini que se define como optimista y cabeza dura da la pelea para mejorar la competitividad con las herramientas que la empresa tiene a su alcance. “En Uruguay el dinero es más barato, las tasas de interés son más baratas por el investment grade, se puede contratar un crédito a tasas interesantes, entonces hay que invertir en tecnificar, hay que aprovechar tasas de interés baratas, hacer inversiones inteligentes, tecnología de primer mundo”, apunta y finaliza: ”Las cosas más caras que tiene este país hay que bajarlas con tecnología”.
Diario EL OBSERVADOR -Montevideo - URUGUAY - 19 Noviembre 2025
