sectores forestal y de la biomasaGalicia marca el camino para considerar esenciales los sectores forestal y de la biomasa

“Es lo mismo que debería hacer el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico”. Tanto desde el Colegio Oficial de Ingenieros de Montes (COIM) como desde la Asociación Española de Empresas Productoras de Pélets de Madera (Apropellets) tienen claro que el ministerio debe emitir una nota similar a la de la Xunta de Galicia en el que se defina exactamente que la silvicultura y el suministro de biocombustibles sólidos son consideradas actividades esenciales durante el estado de alarma provocado por la COVID-19. Otras comunidades han publicado notas aclaratorias más ambiguas.

 

La nota aclaratoria de la Conselleria de Economía, Emprego e Industria de la Xunta de Galicia está vinculada al real decreto-ley 10/2020 del 29 de marzo que intensifica las medidas de confinamiento ligadas a la crisis del COVID-19 y limita las actividades laborales a algunas que se consideran esenciales. Sin embargo, dicho RD no especifica qué actividades son esenciales acorde con la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE).

La Xunta sí lo hace, e incluye entre lo que considera industria manufacturera esencial las siguientes acorde con su número CNAE: silvicultura y otras actividades forestales (0210), explotación de la madera (0220), aserradero y cepillado de madera (1610), fabricación de chapas y tableros de madera (1621), fabricación de envases y embalajes de madera (1624) y fabricación de otros productos de madera; artículos de corcho, cestería y espartería (1629).

Por lo que respecta a los biocombustibles sólidos, el grupo 1629 incluye a los pélets y el 0220 a la leña y las astillas. Quedan en el aire otras materias primas que se aprovechan para producir energía, como residuos agrícolas y ganaderos. Estos estarían encuadrados en el grupo 3821: tratamiento y eliminación de residuos no peligrosos. Sin embargo, la Xunta es mucho más precisa que las normativas impulsadas por el Gobierno central.

Indefinición que genera inseguridad jurídica
“La indefinición de la norma (RDL 10/2020) al no considerar expresamente esencial toda la actividad forestal ha motivado una clara inseguridad jurídica a las empresas y profesionales del sector que según interpretación de los Colegios Oficiales de Ingenieros Técnicos Forestales (COITF) y de Ingenieros de Montes (COIM) resulta imprescindible para el suministro de materias primas a industrias esenciales, producción de biocombustibles y para la lucha contra incendios”.

Como ya denunciaron Apropellets y la Asociación Española de Biomasa (Avebiom), y coinciden ahora COITF y COIM, falta por definir esas actividades esenciales. Y el Miteco no responde ante las demandas de aclaración que le han presentado todos estos colectivos. “Cinco días después de haber presentado la primera solicitud de aclaración todavía no han emitido respuesta efectiva”, se afirma en la nota de prensa conjunta del COITF y COIM.

El pasado 31 de marzo el Gobierno aprobó medidas adicionales de protección y acompañamiento para garantizar los suministros en las que se aseguraba que “el Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), amplía la garantía de suministros energéticos y de agua en todos los hogares mientras se prolongue el estado de alarma”, pero sin citar expresamente el origen de esos suministros.

Hay que seguir los pasos de Galicia
Verónica Rodríguez, decana del COIM en Galicia, considera que “la misma nota aclaratoria que ha sacado Galicia debería sacarla el Miteco porque muchas empresas forestales trabajan en varias comunidades autónomas a la vez y el actual real decreto las deja a expensas de interpretaciones subjetivas por parte de los agentes de la autoridad que a su vez reciben instrucciones de las delegaciones del Gobierno”.

“Nos causa extrañeza –prosiguen en la nota de prensa– que precisamente el Miteco, que ha liderado la lucha contra el cambio climático y la apuesta por las energías renovables ante esta crisis, limite el suministro energético a las energías fósiles emisoras de CO2 y por su olvido ponga en riesgo el abastecimiento de los ciudadanos, empresas y administraciones que han venido apostando por la biomasa como energía renovable y carbono-neutral”.

Además de Galicia, otras comunidades autónomas han sacado notas aclaratorios para intentar solventar la ambigüedad tanto del real decreto mencionado como del que se decretó el estado de alarma (463/2020). Algunas de ellas son País Vasco, Navarra y Andalucía, pero ninguna es tan explícita como Galicia.

País Vasco, Navarra y Andalucía, no tan claros como Galicia
El Gobierno vasco considera “esenciales por encontrarse definidas como tales en los dos RDL de 14 marzo y de 29 de marzo: industria de la alimentación (con CNAE que comience por 10), fabricación de bebidas (11), industria del papel (17) y fabricación de productos farmacéuticos (21). En ninguno de estos grupos están reflejadas las actividades demandadas por los sectores forestal y de la biomasa, como tampoco en otras menciones.

La misma nota señala otras actividades imprescindibles, siempre que se dirijan a la fabricación de equipos para la prestación de  servicios sanitarios y sociosanitarios, industria farmacéutica o industria alimentaria; por la necesidad de asegurar suministro de energía y agua; y, en cualquier caso, para garantizar el correcto funcionamiento de todos los servicios esenciales.

La nota aclaratoria del Gobierno de Navarra es prácticamente calcada a la del País Vasco y la de Andalucía concreta algo más las actividades, pero sin aparecer por ningún lado los grupos de la CNAE relacionados con las demandas de los dos colegios de ingenieros, de Avebiom y de Apropellets. En total, Andalucía relaciona veinticuatro grupos de actividades tanto esenciales como imprescindibles para el correcto desarrollo de estas. 

El sector de las renovables también están descontento en Europa
En el resto de Europa hay un malestar similar por la ambigüedad que tanto la Comisión Europea como los Estados miembros se manejan a la hora de dar prioridad a las actividades energéticas y considerar todas como esenciales. La Asociación Europea del Biogás suscribió la semana pasada un comunicado junta a otras asociaciones europeas principalmente de energías renovables y cogeneración en este sentido.

Consideran que “tras la publicación de las Directrices para medidas de gestión de fronteras para proteger la salud y garantizar la disponibilidad de bienes y servicios esenciales (C (2020) 1753 final) de la Comisión Europea el 16 de marzo de 2020, nos gustaría llamar la atención de la CE sobre un área adicional aún no cubierta: el sector energético y los servicios e infraestructura relacionados como contribuyentes clave para garantizar el buen funcionamiento de la economía y la sociedad de Europa”.

En el comunicado piden a la CE que “complemente las directrices e incluya al sector energético como un servicio e infraestructura esencial”. También consideran que deben preverse excepciones para asegurar el suministro continuo de componentes y repuestos, para que se trabaje durante estas restricciones, “siempre limitando su exposición y asegurando su bienestar al enfocar su participación en actividades comerciales centrales”. Algo similar reclaman para las operaciones de mantenimiento.

Concluye el comunicado que “si bien se están adoptando diversas medidas en los diferentes Estados miembros, ya que las situaciones nacionales también difieren, creemos que sería útil que la Comisión Europea aborde y brinde orientación general sobre esta cuestión”.

ENERGIA RENOVABLES - ESPAÑA - -06 Abril 2020