El medioambiente entra en agenda: el Ministerio presenta su hoja de ruta ante el Congreso de Intendentes
Por primera vez en la Feria de la Construcción, el Congreso de Intendentes dedicó su sesión plenaria a discutir, con especial énfasis, las políticas ambientales. Fue durante la quinta sesión del ciclo 2025, celebrada en Montevideo, donde el Ministerio de Ambiente —con Edgardo Ortuño al frente— expuso ante los jefes departamentales un conjunto de iniciativas que delinean lo que denominó una “hoja de ruta ambiental”.
La intervención de Ortuño, respaldado por los directores nacionales Alejandra Varela y Alejandro Nario, condensó meses de planificación interinstitucional. En un auditorio dominado por el interés en la obra pública y los modelos de desarrollo territorial, el ministro marcó un giro temático: la urgencia climática, la gestión de residuos y el agua como eje de gestión pública.
“El impulso al desarrollo y producción sostenible es prioridad para el Ministerio”, dijo Ortuño. Lo hizo con una afirmación que buscó ser más que un gesto retórico: en su presentación, detalló políticas concretas y cronogramas de implementación, con apoyo técnico y financiero para las intendencias.
El basural, símbolo de una era que se quiere cerrar
Uno de los puntos centrales fue el cierre progresivo de vertederos a cielo abierto. “Algunas intendencias ya alcanzaron este objetivo”, señaló el ministro, en alusión a casos departamentales que lograron reemplazar los vertederos por sistemas controlados. El resto, afirmó, será acompañado por el Ministerio con recursos y asistencia técnica, en una transición que busca ser “nacional y definitiva”.
Al mismo tiempo, se anunció el fortalecimiento del Plan Vale, un programa destinado a la recuperación de materiales reciclables —vidrio, plásticos, latas, multilaminados— que se articulará con los gobiernos locales.
Agua y clima: una política territorial
El enfoque sobre los recursos hídricos incluye la actualización de mapas de riego, el monitoreo sistemático de los cursos de agua y la protección de fuentes subterráneas, medidas que apuntan a evitar crisis como las ya vividas en varias zonas del país.
El capítulo dedicado al cambio climático incorporó la creación de una Red Local de Acción Climática, una iniciativa pensada para fortalecer la coordinación entre municipios y gobernaciones departamentales frente a eventos climáticos extremos.
El planteo del Ministerio incluye también líneas de trabajo en biodiversidad y servicios ecosistémicos, como la ampliación de áreas protegidas y su gestión compartida con los departamentos. Y en la misma línea, dos planes nacionales: uno de Gestión Costera Integrada y otro de Restauración Ecosistémica, como parte de una visión ambiental de mayor alcance.
Política ambiental como política pública
En un contexto donde las urgencias suelen desplazarse hacia lo inmediato —infraestructura, presupuesto, seguridad—, la propuesta ambiental del Gobierno nacional irrumpe con una promesa de transformación estructural. La estrategia del Ministerio de Ambiente es doble: anclar las políticas ecológicas en el territorio y articular su ejecución con los gobiernos subnacionales.
El Congreso de Intendentes, en esta ocasión, no solo fue escenario de anuncios. Funcionó como caja de resonancia para una política que busca salir del centro y tomar cuerpo en las orillas.