Tras varias idas y vueltas, el discutido proyecto logístico del puerto avanza

La empresa Lobraus dio el puntapié a su plan de dos depósitos y una torre de 21 pisos en la terminal de Montevideo.En el puerto de Montevideo está el esqueleto a medio construir rodeado de contenedores. Ya tiene el techo, pero todavía le faltan cinco meses para que sea uno de los dos depósitos que la empresa Lobraus tiene previsto instalar en ese lugar de la bahía portuaria.

El proyecto de este centro logístico también incluye una torre de oficinas, que comenzará a construirse en 2022.

Y aunque falten años para la inauguración final, en la empresa estadounidense celebran los avances de un plan que tuvo su origen hace 12 años.

En diciembre de 2007 se presentó este megaplan, pero fue recién en febrero 2020 que comenzaron con las obras para el diseño de este centro logístico en el puerto. En marzo se inaugurará el primero de los depósitos y luego iniciará la segunda etapa de la obra, que llevará entre 10 y 12 meses de construcción. Así lo informó a El Observador el presidente de Lobraus, Renato Ferreira.

Cuando los dos galpones para mercadería estén listos y funcionando, comenzará la etapa final –y más ambiciosa– del proyecto: una torre de oficinas de 21 pisos. El edificio, según la empresa, tendrá firmas importadoras, exportadoras, navieras, agencias marítimas, despachantes de aduanas, agencias de bancos internacionales y estudios jurídicos.

La inversión total de todo el proyecto es de unos US$ 30 millones.

La idea de la empresa es atraer empresas de e-commerce, que trabajen para todo el Mercosur, dijo Ferreira en rueda de prensa, aunque prefirió reservarse los nombres de las compañías que se instalarían en el puerto de la capital.

Este proyecto fue presentado por iniciativa privada en 2007 y ese mismo año fue aprobado por la Administración Nacional de Puertos (ANP), que solicitó a Lobraus la idea definitiva para empezar con los pliegos de la licitación.  Seis años después –en setiembre de 2013 y tras ser el único oferente para una iniciativa con esas características–, la ANP adjudicó la concesión del área y depósito solicitado por 30 años, bajo la obligación de construir el complejo proyectado en la iniciativa privada y contemplado en el pliego de la licitación.

El contrato de concesión se firmó en 2016, pero por distintos motivos las obras nunca comenzaron. En el medio hubo prórrogas, observaciones y hasta se puso en duda su concreción, al punto que el entonces ministro de Transporte, Víctor Rossi, habló de que todo podía quedar en un simple galpón.

En su discurso, Ferreira –que llegó en 2003 a Uruguay– agradeció al gobierno del presidente Luis Lacalle Pou –que siempre lo “apoyó”– y a los expresidente Jorge Batlle, Tabaré Vázquez y José Mujica. En mayo de 2014, Ferreira agasajó a Mujica con una cena en Estados Unidos e hizo lo mismo dos veces con Vázquez, primero en San Pablo (2016) y luego en Alemania (2017), cuando cerró un restaurant para recibir al entonces presidente y su comitiva.

Ley de puerto
La empresa destacó que el centro logístico está ubicado “estratégicamente” en una zona de “rápido acceso” a cualquier punto de la terminal. También informó que el depósito tendrá temperatura controlada en toda la instalación, con 10 bocas de carga y descarga y la posibilidad de monitoreo permanente de la mercadería por parte de los clientes

El ministro de Transporte y Obras Públicas, Luis Alberto Heber, estuvo en la preinauguración del depósito que hizo la empresa y destacó que con este proyecto se genera “trabajo y actividad”. “Nadie construye esto si no tiene clientes. Creen que esto crece y, por lo tanto, va a generar empleo. Es un signo de credibilidad para la actual administración muy importante", dijo el ministro.

El presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Juan Curbelo, dijo que “lo más importante” de este proyecto es el “mensaje de apoyo” y de “respaldo a inversiones” que llegan a Uruguay.

El presidente de la compañía destacó que eligió Uruguay por la ley de puerto libre, “que es única”. “Muchas personas no saben la ventaja que eso es”, destacó.

“Siempre creí en Uruguay por la ley de puerto libre (única en la región), por su fuerte democracia, respeto a las empresas extranjeras, por mantener una moneda estable, por no tener sorpresas (malas) como tantos países de la región y por la seriedad de sus gobernantes y autoridades”, dijo Ferreira en su discurso.

Uno de sus agradecimientos en el discurso fue para Carlos Perera y Carlos Baeremaechker, los líderes de un grupo inversor de plaza de capitales. Por este motivo se creó el fideicomiso Centro Logístico Lobraus, que es el vehículo jurídico que financia la obra, para la que se prevén desembolsar un total de US$ 30 millones (US$  20 millones en el edificio y US$ 10 millones en el depósito), según dijo a El Observador el director ejecutivo de Lobraus, Nicolás Constantinidi, en enero.

Un anuncio
“¡Pero todo esto es solamente la punta del iceberg!”, lanzó Ferreira en su discurso. El empresario planteó su deseo de “unir esfuerzos” entre privados y el gobierno para “difundir” el “puerto libre”. “Es un beneficio fantástico comparado con Brasil y Argentina”, resaltó Ferreira.

El presidente de Lobraus aprovechó el momento para anunciar un acuerdo con el empresario Juan Carlos León, gerente general de Murchison, con quien firmaron el primer acuerdo para la fase uno del depósito.

Durante la emergencia sanitaria el puerto de Montevideo continuó con su actividad sin interrupciones, aunque tuvo “meses complejos” entre abril y mayo, dijo Curbelo.

La perspectiva del puerto para este año es estar “un poco por debajo” del 2019, lo que es un “indicador positivo”. Los técnicos de la ANP estiman que la pérdida será de un 5% o 6% en relación al año anterior. Habrá un baja de entre 7% u 8% en el movimiento de contenedores.

Diario EL OBSERVADOR -Montevideo - URUGUAY - 23 Octubre 2020