agro maquinaEl agro registra una leve expansion este año, la celulosa supera a la carne y pasa a liderar el rubro exportaciones

La celulosa desbancará a la carne vacuna en el primer lugar de las exportaciones de Uruguay en 2018 y pasará a consolidarse en esa posición en 2019, debido a un incremento del monto de negocios, que rondará los US$ 1.800 millones, según proyecciones de la Oficina de Programación y Política Agropecuaria (Opypa).

En su anuario divulgado ayer miércoles 19, esa repartición del Ministerio de Ganadería (MGAP) indicó que este año la cadena forestal volvió a destacarse por la generación de divisas con sus exportaciones. Con las dos plantas de celulosa produciendo a capacidad completa, los volúmenes de venta de ese producto se mantuvieron estables este año respecto _ a 2017.

A su vez, los precios de exportación registraron un ‘importante aumento" y llegaron a un nivel “récord”, lo que derivó en un incremento del valor exportado de 34% en enero-setiembre, en comparación con el mismo período del año anterior.

La Opypa proyectó que en ese contexto de precios sostenidos por la fuerte demanda proveniente de China, las exportaciones de celulosa totalizarían US$ 1.740 millones al cierre de 2018 y ocuparían el primer lugar del ranking de exportaciones de bienes del país.

Mientras, el monto de las exportaciones de carne vacuna será de US$ 1.618 millones en 2018 y bajará 6% en 2019, para quedar en US$ 1.521 millones, en un contexto de menor producción ganadera, estimó.

Opypa calculó que este año el Producto Bruto Interno (PBI) agropecuario crecerá 0,9% y que en 2019 el agro registrará una contracción de 0,4%.

En un año en el que el negocio agrícola registró una caída, por la disminución de la producción de soja y de arroz, Opypa consideró que el destaque se lo llevó la cadena forestal que en 2018 alcanzará un monto de exportaciones de US$ 2.250 millones y en 2019 se mantendría relativamente estable.

‘El negocio de la madera sólida también se encuentra favorecido por altos precios internacionales, debido a la expansión económica
destino’, señaló.

La técnica Ángela Cortelezzi, autora del informe de Opypa, planteó que el descenso del valor de ventas de productos agrícolas se vio parcialmente compensado por el incremento de valor de las colocaciones de celulosa (debido a una fuerte suba de su precio internacional) y a un aumento de las ventas externas de lácteos y carne bovina, en comparación con lo registrado un año atrás.

Enlos precios promediodeven-ta de los principales productos agroindustriales que exporta Uruguay se observan desempeños disímiles: leche en polvo entera, carne bovina refrigerada deshuesada y soja registraron descensos, en tanto celulosa, arroz y carne bovina congelada deshuesada registraron aumentos.

Granos. La sequía del verano 2017-2018 generó impactos significativos en la producción de soja (que alcanzó su menor nivel en nueve años) y desencadenó otra serie de inconvenientes a lo largo de la cadena, como un descenso del valor exportado a la mitad de
lo registrado en 2017, afectación en el resultado de los agricultores, dificultades para atender compromisos financieros y caída de la demanda de servicios logísticos, según Cortelezzi.

Explicó que en el caso de las ventas externas de soja, además de la fuerte reducción de los volúmenes exportados por factores climáticos, se agregó un contexto de precios con presiones a la baja debido a las crecientes existencias a escala global y una mayor oferta proveniente del Cono Sur. Las exportaciones de soja totalizaron algo más de US$ 500 millones.

Para la zafra 2018-2019 Opypa prevé que la producción de ese grano se recupere y se ubique en 2,3 millones de toneladas, con base en una superficie de siembra de un millón de hectáreas y un rendimiento de 2,3 toneladas por hectárea.

En el Cono Sur la producción total (incluyendo Uruguay y Bo-livia) de soja crecerá en torno a 13% y alcanzará un nuevo máximo histórico, vaticinó. Eso, sumado a las previsiones climáticas favorables para el desarrollo del cultivo, configuraría un escenario con presiones a la baja para los precios internacionales. Considerando dichos factores, esa repartición ministerial proyectó que las exportaciones de soja ascenderían a unos US$ 865 millones en 2019.

La producción de trigo se redujo significativamente en el ejercicio 2017-2018 como consecuencia de la caída de 10% de la superficie cultivada (que se ubicó en el menor valor de la última década) y particularmente por el descenso de la productividad media (-35%), debido a la incidencia de condiciones climáticas desfavorables, analizó Cortelezzi. Señaló que "e¡ consumo local se mantuvo firme, impulsado por el uso para alimentación animal y la producción de etanol por relaciones favorables de precios respecto a los sustitutos, lo que determinó una importante reducción de las existencias remanentes de zafras anteriores y de la corriente exportadora’ de ese grano en 2018. Las ventas de harina de trigo aumentaron respecto a la zafra anterior, tanto en volumen como en valor.

Para el ejercicio 2018-2019 el MGAP prevé una expansión de la oferta de ese cereal, por un aumento de la superficie sembrada y por la incidencia de condiciones climáticas favorables registradas en la primavera 2018 que permitiríanobtener rendimientos récord, cerca de 4.000 kilos por hectárea.

La mejor perspectiva de oferta para la próxima zafra implicará una recuperación de la corriente exportadora de trigo y buenas condiciones de abastecimiento para la industria local.

En el caso del arroz, la zafra agrícola 2017-2018 se caracterizó por un descenso de 12% de la producción como resultado de una caída de 5% del área sembrada y de menores rendimientos (8% respecto al ejercicio anterior) ante la incidencia de distintos inconvenientes climáticos a lo largo del ciclo del cultivo. El menor rendimiento déla zafra 2017-2018 afectó a los molinos arroceros, algunos de los cuales debieron cerrar de forma temporal o definitiva, debido principalmente a la falta de materia prima, lo que impactó en los costos unitariosy, por ende, en el resultado económico final de la industria procesadora. Ese sector operó con una capacidad ociosa de 17% en el ejercicio 2017-2018, indicó. Y estimó que en ese contexto las exportaciones de arroz registrarán una caída interanual de alrededor de 22% en valor.

Para la zafra 2018-2019 Opypa proyectó que la superficie sembrada de arroz mantenga su tendencia decreciente, con un descenso de 10% respecto a la zafra previa.

Suponiendo un contexto con condiciones climáticas favorables para el desarrollo del cultivo y un rendimiento promedio de 8,2 toneladas por hectárea, esa oficina técnica calculó que la producción registre un descenso del entorno de 4% en comparación con la zafra 2017-2018. El valor exportado en 2019 reflejará un leve incremento respecto a 2018.

Empleos. Entre 2014 y 2017 el agro perdió 11.546 empleos, los que sumados a los 1.190 quesere-dujeronenel sector agroindustrial totalizan 12.736 puestos detrabajo perdidos en ese período, según cálculos de Opypa con base en datos de las Encuestas Continuas de Hogares del Instituto Nacional de Estadísticas.

Entre el segundo trimestre de 2014 y el primer trimestre de 2018 se perdieron unos 46.800 puestos de trabajo en la economía uruguaya, según estimaciones del Ministerio de Economía y Finanzas.

La mayor variación a la baja la registraron la industria no vinculada a la actividad agropecuaria, la construcción y la fase primaria agropecuaria, con descensos acumulados de 15%, 9% y 7%, respectivamente.

Semanario BUSQUEDA - Montevideo - URUGUAY - 21 diciembre 2018