presidenteCONFLICTO EN EL AGRO
Gremiales quieren ahora "escuchar" al presidente

Sienten que sus planteos ya están claros y esperan medidas.
Se puede decir que ahora sí, tras desencuentros, manifestaciones, cruces de acusaciones y una evidente politización del tema, el gobierno y las gremiales agropecuarias comenzarán a buscar paliativos para la situación del campo. Será como empezar de nuevo.
El presidente Tabaré Vázquez recibirá hoy a las 10 de la mañana a seis gremiales agropecuarias tras una primer encuentro el 15 de enero que lejos de calmar las aguas, las agitó. Hasta ahora en concreto solo hay indicios de que el gobierno podría rebajar el gasoil y la electricidad para algunos sectores específicos en función de los niveles de consumo pero nada más.
 
Virginia San Martín, presidente de las Cooperativas Agrarias Federadas dijo a el País que las entidades van a la reunión con Vázquez "a escuchar" porque asumen que el mandatario ya tiene claro los puntos que les interesan dado que recibió la proclama que los denominados "autoconvocados" presentaron en el multitudinario acto del 23 de enero en Durazno. Allí enfatizaron en que hay atraso cambiario, en que se deben bajar los combustibles y la electricidad y los impuestos, en que se debe reducir el gasto público y en que se deben buscar más acuerdos comerciales, entre otros puntos."Lo que sabemos de las medidas es lo que el presidente adelantó a los "autoconvocados", dijo San Martín.
 
Panorama.
Las gremiales insisten en que, por distintos motivos, varios sectores tienen una rentabilidad nula o baja. En este contexto, la consultora Deloitte difundió un estudio en el que señala que "el sector agropecuario está relativamente estancado hace 5 años, luego de crecer 3,5% anual entre 2002 y 2011" más allá de que el sector forestal mantiene su dinamismo. El crecimiento del Producto Interno Bruto agropecuario habría sido el año pasado de solamente 1,1% cuando el conjunto de la economía habría crecido no menos de 2,5% y probablemente un 3%.
 
Frente al pico de la zafra 2013/14, el área agrícola acumula una caída de más de 20%, más allá de que el clima favorable del año pasado permitió rendimientos elevados y una mayor producción agrícola.
 
Aún así, Deloitte advierte que "pese a la alta productividad, los niveles de rentabilidad agrícola fueron malos en el último ciclo 2016/2017 (salvo en el caso de la soja)". "La caída de los precios internacionales de las materias primas no fue acompañada por una reducción del "costo país", enfatiza. Pablo Rosselli, economista de la consultora, consideró que "el problema central no son las rentas ni la presión fiscal al sector, la clave del problema es un dólar demasiado bajo".