botnia upm. El gobierno ve con optimismo la economía, aunque UPM y su posible impacto se aleja en el tiempo

Las autoridades del gobierno visualizan que la economía está creciendo a un ritmo algo mayor al esperado y confían en que ello se irá consolidando en los próximos años, coincidiendo con los tiempos electorales que se aproximan.

En ese contexto, si bien el proyecto de instalación de la segunda planta de celulosa de UPM es considerada como muy relevante para Uruguay, el Poder Ejecutivo cree que, se concrete o no, la economía seguirá mostrándose dinámica en los siguientes años, dijeron a Búsqueda fuentes oficiales. De hecho, asumen que, conforme a los plazos que manejan, la eventual construcción de la nueva fábrica se daría con otro gobierno en funciones.

La administración del presidente Tabaré Vázquez pretende tener firmado en pocas semanas un acuerdo con UPM en torno al emprendimiento, para avanzar luego en las siguientes etapas de la negociación asociadas a los estudios de pre-ingeniería y de autorización de la megaobra. Sin embargo, uno de los informantes aseguró a Búsqueda que varios ministros han expresado su desacuerdo con hacer algunas concesiones pretendidas por los finlandeses y respaldadas por el director de Planeamiento y Presupuesto, Álvaro García. Esas fricciones están entorpeciendo el cierre del acuerdo, agregó la fuente.

El proyecto de UPM —que involucra una inversión cercana a los US$ 4.000 millones e implica mejoras en infraestructura de transporte por otros US$ 1.000 millones— ocupa por estos días una parte importante de la agenda de García y de otros jerarcas del Poder Ejecutivo. También es uno de los temas centrales para el presidente Vázquez.

“Optimista”.
El mandatario participó el lunes 18, en Nueva York, en una reunión del Foro Económico Mundial sobre trabajo decente y crecimiento inclusivo, organizada en paralelo a la Asamblea General de Naciones Unidas. Allí destacó el “crecimiento económico ininterrumpido en los 15 últimos años” y aludió al aumento del poder adquisitivo salarial en Uruguay.

Al día siguiente, en rueda de prensa durante ese viaje oficial, Vázquez agregó acerca de la marcha de la economía uruguaya: “Soy optimista por lo que estamos viendo. El país ha seguido creciendo, viene creciendo por encima de las expectativas que teníamos, aumentan las exportaciones, aumenta la actividad industrial en el país, aumenta el comercio interno en el Uruguay, crece el turismo en el Uruguay. (…) Hay múltiples manifestaciones de elementos económicos que permiten sustentar que hemos salido de aquel estancamiento, que estamos creciendo y que vamos a seguir creciendo. Soy realmente optimista porque distintas variables económicas sustentan este optimismo. No es una vista del espíritu, es lo que estamos viendo diariamente. Así que el Uruguay empieza, yo creo, una etapa de recuperación bien importante”.

En abril-junio el Producto Bruto Interno creció 2,8% respecto a un año atrás, por la expansión en todos los sectores salvo la industria manufacturera (en gran medida por la paralización de la refinería de La Teja para su mantenimiento) y la construcción. Hubo aumento del consumo y las exportaciones de bienes y servicios, si bien se retrajo la inversión en capital fijo, según los datos difundidos el jueves 14 por el Banco Central.

Algunos indicadores sugieren que la actividad de ciertos sectores habría seguido creciendo en meses más recientes.

En esa línea, el índice de confianza del consumidor que calculan la Universidad Católica y Equipos Consultores se ubicó en 50,5 en agosto. De esa forma salió de la “zona de pesimismo” y se situó en un rango de neutralidad, según el informe difundido el miércoles 20.

Sobre la negociación con UPM, Vázquez dijo en Nueva York que se están “ajustando algunos detalles que por ser micro no dejan de ser importantes”.

Y agregó: “Espero realmente que en el correr de este mes o en el mes próximo estemos firmando una carta de acuerdo sobre la inversión de UPM en el Uruguay. Ahí clausuraríamos esta primera etapa y empezaría una segunda etapa que sería de los deberes que tenemos que hacer la empresa y el Uruguay, entre otras cosas lo del ferrocarril, pero no solo eso sino también el desembarco en la Aduana en el puerto de Montevideo, los acuerdos vinculados a las finanzas, etcétera, que tendríamos que estar instrumentando para que finalmente UPM tome la decisión definitiva que hemos fijado como plazo máximo 15 de febrero de 2019. Es el último plazo, puede ser tomada antes la decisión final”. El presidente ratificó que, “en caso de que la empresa no tome la decisión en esa fecha, el ferrocarril se hace igual porque Uruguay lo precisa, lo necesita. Lo necesita para aliviar las carreteras de la carga que hoy tienen que las destrozan, para abaratar el costo de flete y para tener una mayor agilidad en el traslado de la mercadería a comercializar”.

Semanario BUSQUEDA -  Montevideo -  URUGUAY -  24 setiembre 2017