propolSe reanudan los negocios de exportación de propóleo y puede aumentar la producción

En un acuerdo entre el MGAP, exportadores y productores apícolas se definieron las pautas volver a exportar propóleo en bruto, una resina que es un antiséptico natural.Tras más de un año sin concretar negocios, el sector apícola uruguayo podrá volver a vender propóleo en bruto al exterior –y no para consumo humano–, según lo autorizó el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP).

Se trata del segundo producto de exportación apícola en el país, un antiséptico natural que sirve para reforzar sistemas inmunológicos y para conservar y proteger colmenas.

Nestor Causa, presidente de la Comisión Honoraria de Desarrollo Apícola (CHDA) del MGAP, comentó a El Observador que, tras esa noticia, ahora en la medida en que los mercados se regularicen habrá posibilidad de aumentar la producción de propóleo en el país.

Antiséptico y momificador
El propóleo es una resina que las abejas recolectan de secreciones en la corteza de los árboles y yemas de las plantas, como pinos, álamos o eucaliptos, cuando estos están en crecimiento.

Las abejas recogen este producto como una sustancia antiséptica y también lo utilizan como un mecanismo de defensa.

Se usa para barnizar las colmenas y los paneles “por dentro”, para aplicar a las crías de abeja apenas nacen, para desinfectar la colmena, pegar los marcos y cubrir los agujeros que pueda tener el cajón.
Para realizar esas tareas, las abejas mezclan la resina con secreciones salivares y cera y con ellas logran sellar huecos de 6 mm o menos en el interior de la colmena, explicó Causa.

Además, utilizan el propóleo como protección. “Por ejemplo, si llegara a entrar a la colmena un ratón o un animal que las abejas no pueden retirar, ellas tienden a hacerle una carcasa de propóleo, lo tapan y queda como momificado”, contó, y destacó que investigaciones internacionales descubrieron que en algunas vendas de momias egipcias encontradas se utilizaba el propóleo como un  conservante natural.

Desde el punto de vista químico, esta sustancia tiene cerca de 150 componentes, que varían dependiendo la planta de la que proviene.

Para consumo humano el propóleo puede encontrarse en jarabes, caramelos, gel y gasas, que se utilizan, entre otras cosas, para quemaduras.

Esta sustancia también puede utilizarse en algunas raciones de animales pequeños, como perros, y por otro lado, puede tener un uso industrial, en la elaboración de barniz u otras pinturas.

Causa indicó que el propóleo tiene sustancias que fortalecen al sistema inmunológico en humanos, “y hacen que las defensas de cualquier organismo se fortalezcan”. Es por eso, dijo, que en el último tiempo este ha sido un producto muy buscado e investigado en diferentes países como una herramienta para mejorar las defensas, sobre todo después de ser diagnosticado un paciente con covid-19 o para prevenir una baja en las defensas.

Dos formas de producir
Hay dos formas en las que los apicultores uruguayos trabajan el propóleo: por raspado o por malla.

Una vez que las abejas “propolizan” el techo de la colmena el productor se encarga de raspar esa sustancia. Ese es el llamado propóleo de raspado o bruto, conocido así porque se vende sin procesar.

La otra manera de trabajar esta sustancia es colocando mallas entre los marcos de la colmena y el techo de la misma.

Varias empresas venden estas mallas y luego compran el propóleo que en ellas se produce. Estas deben rotarse cada seis meses para que las abejas cubran toda la superficie. Una vez que están llenas de propóleo, se arman paquetes de 60 mallas, se entregan a las empresas y ellas devuelven mallas limpias y pagan la diferencia de peso.

“Ese propóleo, comparado con el de raspado, es de mayor calidad, porque tiene menos contaminantes ambientales o de algún manejo que el apicultor pudo hacer”, indicó Causa.

Precio: US$ 34 por kilo
El propóleo de raspado se vende por kilo y si bien los precios varían, antes de que se pararan los negocios había un precio de exportación en el eje de US$ 34, con un retorno de US$ 25 o US$ 28 por kilo del producto para el productor en Uruguay.

Tras un trabajo entre el ministerio, el sector productivo y el exportador, se definieron las condiciones necesarias para exportar propóleo en bruto nuevamente, pero Causa indicó que continuarán las reuniones porque la exportación de propóleos procesados continua en pausa.

“Vamos a ver ahora como arranca el mercado”, comentó sobre las ventas que seguirán al permiso dado.

Segundo producto de exportación apícola
En 2019, previo a que se suspendieran las exportaciones a mitad de año por diferencias entre el sector productivo, el exportador y las autoridades sanitarias, Uruguay exportó 4.178 kilos de propóleos, con un precio promedio de US$ 52,3 por kilo, según detalla el anuario de la Oficina de Programación y Políticas Agropecuarias (Opypa).

Además del propóleo en bruto, Uruguay vende a otros países como Alemania, Argentina, Nueva Zelanda, España y Paraguay extractos de propóleo, polvos y fluidos que se pueden incorporar en formulaciones líquidas, semi-líquidas, sólidas, en polvo, hidrosolubles o liposolubles.

Los principales clientes uruguayos de propóleo en bruto son China, Nueva Zelanda, Rusia y la Unión Europea (UE), indicó a El Observador el presidente de la Comisión Honoraria de Desarrollo Apícola. Añadió además que la UE tiene niveles de exigencia “bastante altos” respecto al propóleo que importa, y que el resto de los países tienen otras exigencias para la compra de este producto. “Eso hace que el propóleo uruguayo, dependiendo de la calidad que tenga, pueda ir a un mercado o a otro”, comentó.

China es  actualmente el principal país productor de propóleos a nivel mundial. Su cosecha anual es de 450 toneladas, según  detalla el anuario de Opypa, pero a la vez ese país es también un gran importador de este producto y el mayor comprador de propóleos uruguayos.

¿Por qué se pararon los negocios de exportación?
Desde mediados de 2019 las empresas uruguayas no pudieron exportar propóleo en bruto.

Causa explicó que la pausa en los negocios se dio después que un certificado sanitario uruguayo de propóleos que llegaron a Nueva Zelanda tuviera una falla. El documento no especificaba si el producto era apto para consumo humano. Si bien la situación se resolvió en el momento y el producto entró, eso motivó que las autoridades sanitarias uruguayas establecieran un protocolo interno con las condiciones que debían tener los propóleos procesados y sin procesar para exportación.

En ese momento, y aún lo sostiene, la CDHA entendió que “la exigencia que se planteaba no se adaptaba a la demanda de los mercados”.

Causa explicó: “Está bueno tener un protocolo con determinados límites establecidos, pero no al nivel que se planteaba, ni la cantidad de análisis que se planteaban; en definitiva entendemos que el mercado se puede manejar de otra manera”.

Tras reuniones y negociaciones, en más de un año, en los últimos días representantes de la CDHA, exportadores de propóleo, el subsecretario del MGAP –Juan Ignacio Buffa–, el director General de la Granja –Nicolás Chiesa–, la directora de Asuntos Internacionales del ministerio –Adriana Lupinacci– y representantes de la Dirección de Laboratorios Veterinarios del ministerio definieron una nueva certificación de exportación que permitirá vender propóleo sin procesar “con otros destinos, no para consumo humano”, especifica un comunicado del ministerio.

Buffa dijo que se trabajaron las condiciones “que marcan los mercados”. Sostuvo que Uruguay debe apuntar a condiciones de excelencia y rescató que en un trabajo del ministerio, el sector productivo y el exportador se resolvió el problema.

“El propóleo es sumamente relevante para el complejo apícola, una parte importante de los ingresos de los apicultores y un elemento positivo para la diversificación de las exportaciones”, comentó el subsecretario del MGAP.

La certificación se aprobó por un año y luego será evaluada.

Causa indicó que “una vez que lo acordado esté todo asentado en un documento, las empresas comenzarán a retomar la exportación lentamente, con el stock que tengan, y habrá otras que tendrán que salir a comprar propóleo a los apicultores para poder salir a negociar”.

La certificación que permite volver a exportar, en principio es únicamente para propóleos sin procesar.

Diario EL OBSERVADOR -Montevideo - URUGUAY - 20 Febrero 2021