Denuncian “muy triste escenario” de la apicultura en el este del país
En el informe presentado en la CAR se advierte que la apicultura nacional presenta incertidumbre en los mercados, con crecimiento en la cantidad de apicultores que abandonan sus apiarios o lo venden “a precio de rutina”. Todo eso “configura un muy triste escenario”.
Montevideo – TodoElCampo – El 4 de setiembre se llevó a cabo la reunión del Consejo Asesor Regional (CAR) en el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) Treinta y Tres, en la cual se abordan diferentes áreas de acción de la producción agropecuaria, una de ellas la apicultura.
En el informe presentado en la CAR se advierte que la apicultura nacional presenta incertidumbre en los mercados, con crecimiento en la cantidad de apicultores que abandonan sus apiarios o lo venden “a precio de rutina”. Todo eso “configura un muy triste escenario”.
El informe sobre apicultura presentado en la reunión del CAR de INIA Treinta y Tres realizada el 4 de setiembre aborda la situación de la actividad apícola en los departamentos de Treinta y Tres, Maldonado, Lavalleja, Cerro Largo y Rocha.
El documento comienza con una introducción en el que se señala la situación de la apicultura de la zona este del país es de “estabilidad en los apiarios e inestabilidad en las empresas apícolas”.
TREINTA Y TRES. NO HAY TANQUES NI ESPACIO EN LAS SALAS.
En el departamento de Treinta y Tres la miel está “toda en los galpones” y “sin vender” en tanto que las colmenas van “arrancando bien, ya hay algunas flores de temporada, no arrancan las praderas viejas, las nuevas algunas no nacieron”.
Se ha detectado que “hay apicultores abandonando colmenas, si no se vende esta producción”, previéndose la próxima zafra será “muy complicada”, “no hay tanques y no hay espacio en las salas”.
MALDONADO: RECIÉN SE REVISAN LAS COLMENAS.
En Maldonado, setiembre es un mes de poca floración, comenzando el flujo en octubre. Los productores recién estaban comenzando a revisar las colmenas al momento de elaborar el informe.
LAVALLEJA. SIGUE SIN VENDERSE 1/3 DE LA COSECHA.
Las limitantes económicas a consecuencia de las dificultades para comercializar la miel han afectado a los productores serranos que “han revisado muy esporádicamente sus apiarios”.
El informe señala que “aún queda en depósito” y sin vender “aproximadamente 1/3 de la cosecha”. “Los precios obtenidos han oscilado en torno a U$S 1,10 - U$S 1,20 el kilo, aunque la cooperativa pudo lograr U$S 1,40, debido a la calidad de su producción. Se comenta que quedarían sin vender, a nivel país, de 2.500 a 3.500 toneladas”.
Destaca que “hay gran desánimo entre los apicultores, debido fundamentalmente a la gran incertidumbre que genera esta situación de la comercialización”.
CERRO LARGO. LA PEOR TEMPORADA DE LOS ÚLTIMOS TIEMPOS.
En las primeras recorridas de los apiarios “se ven colmenas con poco desarrollo, pero normales para la época, todavía con buenas reservas. Pocas bajas, abandono o muertes fuera de lo común”.
No se han detectado problemas sanitarios de varroa, mosemosis o loque. “De todas formas, es común encontrar colmenas con abejas de reducido tamaño, cría desordenada o salteada producto de curas tardías contra varroa, sobre todo en casos de uso de Oxálico, suponemos que se trata de tiras en mal estado, con el producto cristalizado o directamente mal formuladas. Se reportan casos de colmenas desabejadas o directamente perdidas luego de ser tratadas con este producto”, afirma el texto.
En lo comercia señala que se vendió “en el mejor de los casos, la mitad de la miel depositada en las salas de extracción, con precios de entre U$S 1,15 - 1,30”, lo cual “no llega satisfacer las expectativas del productor que ve así concluir la peor temporada de los últimos tiempos”.
El mal estado de los tambores “complica la operativa comercial” porque los os exportadores “intentan descontar parcial o totalmente el valor de los mismos”. Eso más el bajo precio de la miel y en caso del flete su alto costo relativo, lleva a que haya apicultores que no cosecharon la miel de otoño dada la poca rentabilidad esperada.
El significativo que cada vez más se encuentran “ofertas de ventas de maquinaria apícola, vehículos, empresas enteras, y de colmenas que en algunos casos llegan a precios ridículos de U$S 35, cuando este verano el precio más normal rondaba los U$S 60”.
ROCHA. SE ESPERAN NIVELES NORMALES DE PRODUCCIÓN.
El informe hace hincapié en la humedad de la zona. “Una de las características de este departamento es su abundante nubosidad, situación que contribuye a sostener altos porcentajes de humedad ambiente, lo que fue potenciado por alta frecuencia de lluvias, a tal grado que los suelos se han mantenido con niveles hídricos muy cercanos al 100 % de su capacidad de campo”.
“Ello ha llevado a que haya muy reducida actividad al aire libre, tanto de abejas, (por malas condiciones para el pecoreo), como de apicultores, (por malas condiciones para transitar por los campos)”.
Las colmenas revisadas “están muy pobladas, con mucha reserva de alimentos (que vienen de larga data) y, con muy buen estado sanitario, por lo que se puede pronosticar una primavera con niveles normales de producción”.
Por otra parte, “la floración inverno-primaveral, (Acacia longuifolia), este año se ha presentado muy abundante, lo que garantiza, un gran aporte de polen de excelente calidad nutritiva, con la consiguiente generación de pecoreadoras vigorosas”, expresa. “En cuanto a comercialización, condiciones incambiadas”.
CONCLUSIONES: UN MUY TRISTE ESCENARIO.
En sus conclusiones finales, el informe apícola del este del país señala que se “sigue padeciendo por una continuidad de situación de incertidumbre de mercados, a la que no se le ve solución cercana”.
Advierte que “sigue cayendo el número de apicultores en la actividad, al mismo tiempo que se incrementan los comentarios de un desánimo general. Así, surgen con frecuencia, noticias de apiarios abandonados, otros casi no atendidos, otros ofrecidos a la venta a precios de ruina. Todo ello configura un muy triste escenario, de una producción que, por sus características, merece estar en una situación de equilibrio y normalidad”.
Se señalan las “trabas arancelarias y no arancelarias” que “encuentran un fácil blanco en los países tomadores de precios y, especialmente, en las producciones de reducida escala”, dos características que tiene Uruguay.