upm.mantenimientoAPUESTA POR LA CELULOSA
Cinco años sin accidentes en UPM desafían a la nueva planta

Capacitarán al 100% de los trabajadores que construyan la nueva fábrica.

PABLO S. FERNÁNDEZ

La planta de celulosa UPM instalada en Fray Bentos cumplió cinco años sin accidentes laborales. La empresa finlandesa destacó el logro en Uruguay y la experiencia local se ha convertido en ejemplo de aplicación para el resto de las plantas del grupo a nivel mundial.

 

El responsable de seguridad laboral para UPM a nivel mundial, Gerardo Galimberti, dijo en una entrevista con El País que el nuevo desafío de la firma es mantener los altos niveles en el nuevo emprendimiento que está encaminado para Durazno. Para eso se capacitará al 100% de los funcionarios que trabajen en la construcción de la nueva planta.

El Poder Ejecutivo y la empresa finlandesa firmaron un contrato para la edificación de una nueva planta de celulosa, que de concretarse será la más grande de UPM en el mundo. Actualmente la empresa tiene cuatro fábricas, una de ellas instalada en Río Negro.

"Para nosotros es un orgullo llegar a cinco años sin accidentes de trabajo con tiempo perdido. Esto es la consecuencia del compromiso de la empresa y de la gente, de hacer las cosas en el día a día de forma segura y eficiente. Esto nos plantea el desafío de seguir trabajando en esta línea", dijo Galimberti.

Los estándares de seguridad exigidos por UPM en Fray Bentos también se extienden para las empresas contratistas. En lo que va de 2018 la firma finlandesa ha capacitado a más de 1.600 trabajadores de pequeñas y medianas empresas que se desempeñan dentro del predio industrial en distintos temas vinculados a la seguridad.

El último accidente de trabajo con tiempo perdido —que implica que el trabajador no puede reintegrarse a su puesto laboral al día siguiente del accidente— fue por una quemadura con agua en una cañería que tenía una pérdida.

El responsable de la seguridad laboral a nivel global de UPM explicó que la firma tiene un sistema digital de reporte de fallas o problemas que ha facilitado la rutina. Allí se reportan problemas como manchas de aceite en el piso, que pueden generar accidentes de los empleados. De esa forma toda la empresa está informada de los temas a tener en cuenta y solucionarlos antes que generen inconvenientes mayores.

"Hay un compromiso grande de todos los empleados con el tema. A su vez hemos generado una competencia constructiva entre aéreas donde se evalúa quién tiene el mejor desempeño en prevención y salud laboral", explicó Galimberti.

Los estándares y mecanismos de control son actualizados con el tiempo. A su vez muchos de los mecanismos de prevención son aportados por los trabajadores o el sindicato.

"Alcanzar cinco años sin accidentes de trabajo es un importante logro para UPM. Pero lo más importante es seguir y para eso no podemos distraernos. Si la gente se confía ante la rutina es un problema. Hay que reinventarse para mantener la seguridad como algo básico: cambiar reglas, nuevas formas de hacer a veces lo mismo, pero de forma más eficiente", explicó el responsable del área.

Esto llevó a que la empresa esté en los mejores niveles de seguridad laboral mundial, y que muchas de las experiencias adoptadas en Fray Bentos fueran luego legitimadas con normativas legales en el país. "De alguna forma eso marca que estamos adelantados. Estamos en los mejores niveles a nivel mundial. La planta de Fray Bentos es de las mejores, por no decir la mejor, de UPM a nivel mundial. Podemos decir que somos exportadores en materia de seguridad laboral para Finlandia", sostuvo Galimberti.

El encargado del área de seguridad laboral dijo que la empresa ya está trabajando y planificando el trabajo para la segunda planta que se podría insta-lar en el departamento de Durazno.

Aún falta la confirmación definitiva por parte de UPM de la inversión, ya que resta que el gobierno uruguayo cumpla con su parte en materia de infraestructura, por ejemplo.

Allí la reconstrucción del ferrocarril central que conecte Paso de los Toros con el puerto de Montevideo es clave para la confirmación del proyecto.

De confirmarse será la inversión extranjera más grande en la historia del Uruguay.

"Se va a trabajar con el mismo enfoque que venimos haciéndolo, claramente dimensionándolo al nuevo proyecto que se plantea. La seguridad en UPM es algo prioritario, es un valor central. Cuando viene un proyecto de magnitud se tiene que dimensionar y plantificar. En ese camino ya estamos", dijo Galimberti.

Uruguay ha avanzado muchísimo en esta materia desde que se instaló UPM en el país hace 10 años atrás. La intención de la empresa es capacitar al 100 por ciento de los obreros que participen en la construcción de la nueva fábrica. Para eso se trabaja en conjunto con el sindicato de la construcción (Sunca) y el Ministerio de trabajo y Seguridad Social.

Implementarán controles de alcohol y drogas en UPM2
Uno de los protocolos establecidos para la seguridad de UPM está vinculado al consumo de alcohol y drogas. El sistema está implementado desde la construcción de la fábrica en Fray Bentos. El mismo será implementado también, si se logra confirmar la edificación, en la segunda planta de UPM en Durazno.

Actualmente se realizan controles de consumo de marihuana mediante tiras detectoras de saliva, y de alcoholemia. Las normas imposibilitan el ingreso bajo efectos de alcohol o estupefacientes, pero la empresa no realiza controles de consumo de drogas fuera de los ámbitos laborales.

"En esta última parada de mantenimiento que hubo 2.000 personas y hubo cero casos de drogas. Tuvimos uno o dos casos de alcohol, pero no es un tema que se detecten problemas", dijo a El País, Gerardo Galimberti, responsable de seguridad de UPM a nivel mundial.

Galimberti explicó que los controles abarcan a toda la empresa y son de forma aleatoria. Van desde el primer jerarca hasta el último empleado sin hacer diferencias por cargos o áreas de operación.

"En general hay un nivel de conciencia importante con el tema y se genera un autocontrol entre los propios trabajadores", dijo el responsable de seguridad.

Diario EL PAIS - Montevideo - URUGUAY - 18 mayo 2018