30 AÑOS DE LA LEY FORESTAL
Retrospectiva y reflexiones desde la perspectiva de la investigación
Ing. Agr. (PhD) Zohra Bennadji
Ing.For. (PhD) Roberto Scoz
Programa Nacional de Producción Forestal
INTRODUCCIÓN
En diciembre de 2017, la Ley Forestal N° 15.939 cumplió 30 años desde su promulgación en 1987. Esta ley adquirió un verdadero carácter de política de estado por su papel rector en el desarrollo del sector forestal y en la economía del país.
En esta breve reseña, apuntamos a medir el transcurso de estos 30 años de aplicación desde la perspectiva de la investigación, procediendo a un breve histórico de la ley, una retrospectiva resumida de los principales aportes de la investigación en el ámbito del Programa Forestal de INIA y finalmente, algunas reflexiones sobre el significado de estos aportes en el pasado y sus proyecciones en el futuro.
LEY FORESTAL N° 15.939/DICIEMBRE 1987:
BREVE HISTÓRICO
El remarcable desarrollo de la forestación en Uruguay y la posterior conformación de polos industriales en diferentes regiones del país son unánimemente asociados a la promulgación de la Ley Forestal N° 15.939 de diciembre de 1987 y a sus decretos reglamentarios de aplicación. Esta
ley estableció efectivamente los marcos políticos, jurídicos y económicos nacionales para: (i) la mejora, la ampliación,
el establecimiento y la defensa de recursos forestales
PODER LEGISLATIVO
LEY Nº 15.939 - Ley forestal - 28 de diciembre de 1987
EL SENADO Y LA CÁMARA DE REPRESENTANTES DE LA REPÚBLICA ORIENTAL DEL URUGUAY, REUNIDOS EN ASAMBLEA GENERAL
DECRETAN:
Artículo 1º. Declárense de interés nacional la defensa, el mejoramiento,
la ampliación, la creación de los recursos forestales, el desarrollo de las industrias
forestales, y en general, de la economía forestal. nativos e implantados, (ii) el desarrollo de industrias forestales y (iii) la puesta en marcha de instrumentos de apoyos y exoneraciones para la atracción de inversio
-
nes nacionales e internacionales.
A 30 años de promulgación de esta ley, estadísticas públicas y privadas recientes de la cadena de valor de la madera permiten aquilatar sus impactos y ratificar el acierto estratégico de su proyección como política de estado, ampliamente avalada por diferentes actores políticos, económicos, sociales y académicos. A título ilustrativo, se presentan algunos indicadores del desarrollo del sector: (i) 1,2 millones de hectáreas de superficie forestada en el 2016, (ii) 14 millones de m3 de extracción de madera en el 2016, (iii) creación de 25.000 empleos directos e indirectos, (iv) 3,6% de contribución al PBI y (v) 17,5% de los bienes de exportación, ubicándose como segundo rubro exportador del
país. Adicionalmente, la conmemoración de estos 30 años toma un particular relieve en el contexto de las actuales negociaciones del gobierno para la concreción de la instalación de una tercera planta de producción de celulosa en el centro del país.
El papel de esta ley en la consolidación del sector forestal nacional es afianzado por múltiples antecedentes de acciones y trabajos de varias décadas, dedicados a la construcción de una cultura nacional de integración de los árboles en la matriz productiva del país, a sus usos multipropósito (producción, protección y recreo) y a la generación de capacidades institucionales docentes y de investigación. La lista de visionarios y pioneros es amplia, con raíces arraigadas en el siglo pasado.
Como acciones históricas de aquella época previa a la ley, alcanza con citar las introducciones de especies de eucaliptos, la conformación de parques y arboretos, el fomento de la forestación, la captación de cooperación internacional, el lanzamiento de carreras de técnicos e ingenieros forestales y los primeros pasos fundacionales de la investigación en el rubro.
CONMEMORACIÓN DE LOS 30 AÑOS DE LA LEY FORESTAL
Se han celebrado eventos de diferente índole para conmemorar los 30 años de la promulgación de la Ley Forestal 15.939/1987: un seminario en Montevideo con la presencia de autoridades de instituciones públicas y privadas del sector, el lanzamiento de un estudio sobre la contribución de la cadena forestal a la economía del país, encomendado por la Sociedad de Productores Forestales.
El encuentro de Durazno, bajo el lema “30 años de la Ley Forestal en el Uruguay: una mirada hacia el futuro”, reflejó de manera óptima el alcance de esta conmemoración por el alto componente interinstitucional de su organización, la representatividad de las temáticas abordadas, su convocatoria multitudinaria y su alto grado simbólico debido a la probable instalación de la tercera planta de producción de celulosa en esta región
del país.
En este encuentro la investigación forestal tuvo un importante espacio, abordándose desde diferentes perspectivas con trabajos del Departamento Forestal de Facultad de Agronomía (UdelaR) y del Programa Nacional de Investigación en Producción Forestal de INIA. Por otra parte, el estudio encomendado por la Sociedad de Productores Forestales permitió visualizar el impacto actual de la forestación y sus proyecciones hacia el 2030 desde un enfoque de cadena de valor
RETROSPECTIVA DE LA INVESTIGACIÓN FORESTAL
En vísperas de la fecha de promulgación de la Ley Forestal en 1987, la investigación forestal en Uruguay contaba con un desarrollo incipiente para el respaldo de las necesidades tecnológicas del sector.
Este acervo fue fruto de múltiples iniciativas y esfuerzos llevados a cabo por varias instituciones públicas y privadas. El mismo se alimentó básicamente de los trabajos de la Escuela Forestal de Maldonado, del Departamento Forestal de Facultad de Agronomía (UdelaR) y de la Dirección General Forestal del
MGAP, desde la década de los sesenta con introducción de especies forestales y mejoramiento genético de Eucalyptus y Pinus
.
La creación del Programa Nacional de Investigación Forestal de INIA en 1991, con sede en la Estación Experimental de Tacuarembó, permitió la posterior sistematización a nivel nacional de los programas de mejoramiento genético de las especies declaradas de prioridad forestal, con el establecimiento de una red nacional de ensayos en suelos de prioridad forestal definidos por la ley y con el apoyo decidido de empresas forestales
de diferentes regiones del país. En este proceso de creación de capacidades, se destaca el rol de la cooperación técnica de JICA (Agencia de Cooperación Internacional del Gobierno de Japón) que se extendió por dos periodos (1993-1998, 2000-2002).
A la fecha, sumando los esfuerzos de INIA y las propias acciones de las empresas forestales, el sector transitó con éxito su camino hacia un abastecimiento en semillas y materiales de reproducción mejorados propios a partir de fuentes de origen local, asegurando las bases del desarrollo del primer eslabón de la cadena. Hoy en día, INIA dispone de un capital científico de más de 100 ensayos instalados en el país, una red nacional y de bancos de germoplasma de respaldo y transita hacia el desarrollo de tecnologías de avanzada en biología molecular y en selección genómica.
Atendiendo lineamientos políticos del estado, la institución dispone también de un acervo genético en especies de alto valor para responder al impulso de modelos forestales alternativos de integración con los rubros agrícola-ganaderos.
El desarrollo de técnicas de manejo silvicultural siguió prácticamente el mismo patrón, con el destaque de los trabajos específicos del LATU en tecnología de la madera y la introducción y validación de tecnologías de implantación y cosecha lideradas por empresas forestales. El Programa Forestal de INIA sumó significativamente con el desarrollo del primer Sistema de Apoyo a la Gestión (SAG) para especies de Eucalyptus
. A la fecha permite proyectar y modelar el crecimiento, trozado y valoración económica de 4 especies, incluido el género Pinus
. Atendiendo demandas tecnológicas en política nacional de energía renovable, hoy contamos con un gran número de coeficientes técnicos en dendroenergía que permiten evaluar alternativas de negocio.
Las temáticas de sanidad y de ambiente cobraron paulatinamente importancia a partir de 1998 y recibieron el aporte de diferentes instituciones académicas como las Facultades de Agronomía, Ciencias, Ingeniería y Química.
Desde el Programa Forestal de INIA, la cobertura de la temática ambiental se canalizó a través de la ejecución de proyectos del Fondo de Promoción de Tecnologías Agropecuarias y de consultorías con financiación internacional. La temática de sanidad se internalizó institucionalmente con la creación de capacidades propias en la Estación Experimental de INIA Tacuarembó y la participación activa en el establecimiento del Polo de Desarrollo Universitario de Sanidad del Centro Universitario de Tacuarembó (UdelaR).
El alcance de más de un millón de hectáreas forestales implantadas generó ineludiblemente la demanda tecnológica de un manejo integrado de plagas y enfermedades. Fruto de la investigación de los últimos 10 años, hoy en día se cuenta con innumerables publicaciones técnicas y de tecnologías de la información, así como plataformas de productos, tales como la App PFORINIA o el SIM-Escolítidos.
En este proceso de consolidación de la investigación forestal del país, los canales de prospección de la demanda tecnológica merecen una especial atención.
En INIA, la prospección de la demanda tecnológica ocupa un lugar central y es contemplada en su propia ley de creación a través de la conformación y del funcionamiento de los Consejos Asesores Regionales y de los Grupos de Trabajo Técnicos, propios a cada sector.
El Grupo de Trabajo Forestal de INIA tuvo una participación destacada en la identificación, priorización y evaluación de las líneas de investigación del Programa Forestal desde sus inicios, en 1991. La Mesa Tecnológica de la Madera, creada a iniciativa de la Sociedad de
Productores Forestales, jugó a su vez un valioso papel de articulación interinstitucional en el sector, al incorporar los eslabones de la transformación y de comercio de la cadena y al habilitar una excelente retroalimentación de la investigación.
ALGUNAS REFLEXIONES
En términos absolutos, el desarrollo de la investigación forestal en el país en general y en INIA en particular, ha procurado responder a los diferentes desafíos planteados en el colectivo de actores de la cadena de valor de la madera. Las etapas de configuración y desarrollo del Programa Forestal de INIA, desde su creación en 1991 a la fecha, constituyen un nítido ejemplo de este spaldo tecnológico al sector.
En términos relativos, ponderando el importante desarrollo del sector forestal, su contribución a la economía de país y sus necesidades en tecnología e innovación, las capacidades actuales de investigación forestal del país requieren de un decidido salto cualitativo y cuantitativo a todos los niveles y de acciones urgentes de fortalecimiento para el aprovechamiento de las oportunidades que ofrecerá un rubro que se perfila como el
primero en exportaciones en 2030.
En INIA, en el marco del Plan Estratégico 2016-2020 (con visión 2030), estas interrogantes están siendo tratadas en un mano a mano con los representantes del sector, en un proceso de intensificación en dicho relacionamiento. Desde su posición y desde su trabajo diario, el Programa Forestal de INIA asume con compromiso y orgullo ser parte de este proceso de consolidación del sector.
REFERENCIAS Y AGRADECIMIENTOS
• Los datos estadísticos incluidos en este artículo son promedios obtenidos de diferentes fuentes (DGF del MGAP, SPF y Uruguay XXI).
• La foto del Complejo Industrial en Punta Pereira de Montes del Plata (Colonia) fue extraída de la galería pública de esta empresa
(https://www.montesdelplata.com.uy/fotos.php?lang=es).
• Las fotos del Encuentro de Durazno llevado a cabo el 29/11/2017 son gentileza del Dr. José Luis Queirolo, presidente del comité organizador del evento