LOGO UPM UTEUTE, UPM y los uruguayos

El manoteo al Fondo de Estabilización Energética y el compromiso de que UTE le compre durante 20 años a UPM la energía excedente a un precio exorbitante, vuelcan sobre la tarifa de UTE —sobre todos quienes la pagamos— el peso de gran parte de la inversión de UPM.

 

El Fideicomiso de Administración del Fondo de Estabilización Energética se constituyó para mitigar el impacto de los déficit hídricos y UTE deba generar a un costo mayor, evitando así trasladar ese sobrecosto a las tarifas. El fideicomiso es administrado por la Corporación Nacional para el Desarrollo (CND).

 

Siendo un fideicomiso administrado por un ente como la CND, que se rige por el derecho privado, uno pensaba que estaba a salvo del manoteo gubernamental. Pues no, nada de eso. El gobierno decidió a mediados de año que una parte de los excedentes del fondo fueran transferidos a la Tesorería a efectos de financiar parte de la obra de infraestructura que debe llevarse a cabo para que UPM —eventualmente, recordemos— instale su segunda pastera.

Pero ahora, en esa suerte de “carta de entendimiento” (que no constituye un contrato, aunque así lo llamen en el gobierno) entre la multinacional y el Estado uruguayo se ha incluido el compromiso de que UTE le compre a UPM el excedente de energía eléctrica que genere la planta a un costo de U$S 70 el MW. El precio “spot” (a la salida del generador) hoy se cotiza a U$S 11,50 en las horas pico de consumo, lo cual es lógico por la sobreproducción de energía generada por los parques eólicos (productos de una sobreinversión, pero ese es otro tema que eventualmente abordaremos más adelante). O sea, se obliga a UTE a comprar energía a UPM a un precio exorbitante, contribuyendo así el ente a la amortización de la inversión finlandesa.

¿Pero si sobra energía eso no significa que esa energía también va a sobrar? Seguramente, y habrá que intentar exportarla pero no a U$S 70 sino a un precio infinitamente menor, con lo cual será una operación totalmente a pérdida. ¿Adivine sobre quién recaerá solventar esa pérdida, estimado lector? 

CORREO DE LOS VIERNES -  Montevideo -  URUGUAY -  17 noviembre 2017