containers montevideoLA ÚLTIMA DÉCADA DE LOS EXPORTADORES
Sector exportador: menos empresas, pero más ventas

Desde 2007 descendió 11,4% la cantidad de firmas que venden al exterior.

MAYTE DE LEÓN

Este año, el Día de la Exportación sirvió para celebrar los 50 años de la Unión de Exportadores (UEU), oportunidad en la que las autoridades de la gremial aprovecharon para volver a poner sobre la mesa los temas que desvelan a los empresarios del rubro.

En el tradicional almuerzo que se realiza cada año y frente a varios miembros del gabinete, el presidente de la UEU apuntó los reflectores a la necesidad de mejorar la competitividad del país.

"Hay un sentimiento generalizado entre los exportadores que estamos soportando una pesada carga, la cual nos impide crecer", dijo ayer Alejandro Bzurovski ante un público netamente empresarial que llegó hasta Kibón.

A unos pasos del estrado, seguían su discurso el ministro de Economía Danilo Astori, que compartía mesa con los titulares de Trabajo, Ernesto Murro, y de Industria, Carolina Cosse, y el presidente del Banco República, Jorge Polgar. En una mesa contigua, el presidente del Banco Central, Mario Bergara, escuchaba junto al presidente del Pit Cnt, Fernando Pereira.

Más allá de los golpes que tuvo que afrontar en los últimos 10 años —entre otros, el colapso financiero tras la caída de Lehman Brothers en 2008 y, más recientemente, la fuerte contracción de las economías de Argentina y Brasil, dos de sus principales compradores— lo que Uruguay comercia hoy con sus socios de fuera de fronteras suma un monto mayor que en 2007. Ese año sus exportaciones alcanzaron los US$ 4.515 millones, número que trepó hasta US$ 7.022 millones el año pasado. Se trata de una suba de 55,5% pese a que 2016 está lejos de ser el año récord de exportaciones para Uruguay. Esa distinción se la llevó 2013, cuando las colocaciones llegaron a los US$ 9.121 millones. La experiencia de uno de los mayores exportadores locales sirve para ilustrar este punto. En 2007 Conaprole —la láctea más grande del país y la compañía nacional que más vendió al exterior el año pasado— colocó fuera de Uruguay productos por un total de US$ 196 millones. Para el año pasado, en tanto, ese número había trepado a US$ 432 millones.

El incremento de las exportaciones medidas en dinero se dio de forma paralela a un proceso de disminución de la cantidad de firmas que venden al extranjero desde Uruguay. Mientras que en 2007 fueron 1.780, para 2016 esa cantidad había descendido a 1.577, lo que marca una caída de 11,4%, según datos del Instituto Uruguay XXI a los que accedió El País. De todas maneras, este proceso no se acerca al registrado en Argentina. En el país vecino, entre 2006 y 2016 el número de empresas exportadoras se contrajo 36,5% —de 15.100 pasaron a 9.600— según datos del Ministerio de Producción divulgados por el diario La Nación a principios de abril.

De hecho, con la excepción de 2015, el año pasado fue el que registró la menor cantidad de firmas de esta naturaleza, (estas estadísticas no incluyen empresas que operan desde zonas francas y tampoco consideran a los exportadores "esporádicos" que no poseen RUT).

Para encontrar el récord de empresas que venden desde Uruguay al mundo en los últimos 10 años hay que mirar a 2008, cuando se llegó a 1.843 firmas.

Si se toma en cuenta el primer cuatrimestre del año, en 2016 fueron 1.011 las empresas exportadoras, cifra que descendió muy levemente en el mismo periodo del año en curso hasta llegar a 1.005.

Carne, soja.
Carne de vaca, lácteos, cueros, arroz y madera y productos de madera. Si se miran los cinco productos que Uruguay más colocó en el extranjero en 2007, esos fueron los que encabezaron la lista. El primero —la emblemática carne bovina— explicó casi un quinto de las exportaciones nacionales. En concreto, el 18% (las ventas se tradujeron en unos US$ 804 millones). Estos datos, proporcionados por Uruguay XXI, no incluyen lo que salió del país a través de las zonas francas.

Ahora hay que viajar 10 años en el tiempo y aterrizar en 2016. El año pasado —y luego de haber perdido la corona durante tres años en la última década a manos de la recién llegada soja, lugar que reconquistó en 2015— la carne bovina repitió en el primer puesto del podio, solo que esta vez sus ventas llegaron a US$ 1.434 millones, cifra que explicó el 20% de las colocaciones nacionales en el exterior. El top cinco se mantuvo incambiado respecto a 2007, salvo por la salida de los cueros y el ingreso de la niña mimada de los últimos años: la soja.

En comparación con 2007, además, el país logró acortar la brecha que había entre el primer rubro de exportación y los que le seguían. Mientras que en aquél año la carne bovina tenía una participación de 18% en la canasta exportadora, el segundo producto más demandado (lácteos) estaba en un distante 8% y el tercero (cueros) apenas llegaba al 7%.

El año pasado, en tanto, la carne concentró el 20% —todavía un porción importante—, pero la soja acompañó más de cerca, con 12%, al tiempo que madera y productos de madera alcanzó el 11%.

Al igual que con los productos más vendidos en la última década —dos, carne y soja, alternaron en el primer puesto— fueron dos las empresas que desde 2007 hasta el año pasado estuvieron al tope del ranking exportador por firma: Conaprole y Saman. La empresa láctea ocupó ese lugar nueve veces, y el restante primer lugar fue para el productor de arroz.
Las diez principales empresas exportadoras

El año pasado fueron 1.577 las empresas que exportaron desde Uruguay hacia el mundo, según los datos de Uruguay XXI. La primera fue Conaprole (al igual que en nueve de los diez años desde 2007 a 2016). Le siguieron: Eufores S.A. (Montes del Plata), Compañía Forestal Oriental (UPM), Saman, Frigorífico Tacuarembó, Breeders & Packers Uruguay, Crop Uruguay S.A., Barraca Jorge W. Erro S.A., LDC Uruguay S.A. y Pulsa S.A. En los primeros cuatro meses de este año, en tanto, la cantidad de firmas que colocaron productos en el exterior llegó a 1.005.
Bzurovski: competitividad es la "gran materia pendiente"

El presidente de la Unión de Exportadores, Alejandro Bzurovski, hizo un repaso a lo largo de su discurso de las transformaciones que experimentó el sector en las décadas pasadas, de la mano, primero, del abandono de la "política de crecimiento hacia dentro" que primó hasta los años 60. También deslizó críticas hacia el funcionamiento del Mercosur —"lamentablemente nunca terminó de convertirse en un mercado común ni en una forma de insertarnos mejor en el mundo", dijo— y valoró que, con la entrada del nuevo siglo la gremial se había profesionalizado y "pasó del lobby político al discurso de propuesta".

Pero Bzurovski también destinó parte de su oratoria al camino que falta recorrer. Fue allí que mencionó la urgencia del país por volverse más competitivo. "Es nuestra gran materia pendiente", dijo. El dirigente gremial insistió que Uruguay ha quedado "caro frente al mundo", fruto tanto de los costos de producción y logísticos, a lo que se suma la trayectoria del dólar. "Por descensos o estancamientos borra las mejoras que nos ha costado tanto lograr a las empresas", dijo sobre el tipo de cambio.

Para Bzurovski el país también debe mejorar a nivel de infraestructura, educación, seguridad e inserción internacional, y reconoció que estos temas vuelven a señalarse cada tanto. "Cada año que pasa y no se avanza es un retroceso frente a países más eficientes que tienen una estrategia definida y la ejecutan", lamentó.

A su turno, uno de los dos expositores de la jornada, el académico especializado en política exterior Nicolás Albertoni, calificó como de una "inmensa valentía empresarial" a los exportadores nacionales. Tras dibujar un panorama del mundo hoy, enumeró algunos de los males que aquejan el sector exportador uruguayo: baja competitividad, una diversificación de mercados que dificulta el crecimiento y encarecimiento. También Albertoni mencionó que más allá de la diversificación de mercados que el país ha logrado —hoy son alrededor de 170 los destinos a los que exporta— la mayoría de sus colocaciones no ingresan a esos lugares beneficiándose de preferencias comerciales, lo que las deja en un lugar de debilidad frente a competidores. Demandó, además, una "estrategia clara" de comercio exterior, de la que, a su juicio, el país carece. La "garra charrúa" es cada vez menos una ventaja comparativa, agregó.

Diario EL PAIS - Montevideo - URUGUAY . 20 mayo 2017