Cuba aplica estrategias para convertir biomasa forestal en energía
Eliminar una planta invasiva como el marabú, obtener carbón vegetal de alta demanda en el mercado internacional y en el proceso producir energía eléctrica es una de las estrategias de Cuba para emplear la biomasa forestal.
A propósito del Proyecto Marabú Prensa Latina conversó con el especialista de Desarrollo y Negocios de la empresa Agroforestal Macurijes, Abelardo Dominguez, quien explicó que el carbón producido por esa planta hoy tiene todo el mercado cubierto debido a su alto nivel calórico.
Las exportaciones de esta hulla vegetal comenzaron hace unos cinco años, dijo y amplió que su uso tiene ventajas por ser una biomasa sin costo alguno y con un elevado potencial energético que posibilita su empleo en bioeléctricas para producir energía a través de fuentes renovables.
Dominguez explicó que la empresa Macurijes está por concretar un negocio con un socio europeo para generar electricidad a partir de los desperdicios de la industria forestal como son las plantaciones degradadas del marubú y de eucalipto.
La suscripción de dicho acuerdo se prevé para el primer trimestre de este año, y luego de sus ejecución iniciar la producción de electricidad para 2019.
Asi mismo, se desarrollan otros proyectos con el marabú, entre ellos, uno en la provincia Camaguey con la empresa vietnamita Tintan - en proceso de firma- , y otros en Villa Clara y Ciego de Ávila, en todos ellos está previsto que una vez eliminado el espinoso arbusto se sembrarán plantaciones energéticas para darle sostenibilidad al proyecto, añadió el especialista.
Especificó que en el caso de Camaguey se pretende generar unos 60 megavatios, y agregó que una vez erradicado el marabú se cultivará sorgo dulce para alimento animal cuyos residuos se utilizarán también en la bioeléctrica, además, de las nuevas plantaciones forestales que en total ascenderán a unas 18 mil hectáreas.
La perspectiva del Proyecto Marabú es eliminar la planta, destacó y explicó que se trata de un arbusto invasivo cuyos rendimientos de madera son muy bajos entre los 35 y 40 toneladas por hectáreas, mientras que una plantación de bosque energético de eucalipto a los siete años puede alcanzar las 150 toneladas por hectáreas, acotó.
Sin embargo, Dominguez señaló que el marabú es una planta que forma suelo, pues al ser tan intrincada protege la tierra de la erosión del viento y del agua, por lo que las fertiliza y prepara para nuevos cultivos.
La aspiracion es eliminar el marabú y sustituirlo, para devolver a los terrenos su uso inicial, en la ganaderia sembrar pastos, si es la actividad forestal plantar bosques, o en cultivo varios, concluyó.
SIERRA MAESTRA - CUBA - 12 febrero 2018