incendio forestal 4Se impone revisar la estrategia forestal

El incendio que, al cierre de esta edición, amenazaba uno de los parajes naturales más importantes del mundo, Doñana, demuestra que la mera política de extinción, por muchos medios personales y materiales de que se disponga, resulta insuficiente cuando se combinan las altas temperaturas veraniegas de un clima como el nuestro, con un período prolongado de sequía y un régimen de fuertes vientos. Así, causaba desasosiego ayer la afirmación del responsable de las labores de extinción de que no era cuestión de enviar más efectivos o más medios aéreos, sino de aguardar un cambio favorable del viento. En efecto, España dedica enormes esfuerzos presupuestarios en la lucha contra los incendios forestales y posee una de las organizaciones más eficientes de la UE.

Y sin embargo, es preciso revisar la estrategia forestal si queremos adecuarnos a la nuevas realidades de una época de incremento medio de las temperaturas y pluviosidad más irregular, que son los efectos de un cambio climático de alcance imprevisible y que exigirá mayores inversiones en prevención. Habrá tiempo para analizar qué pudo fallar en la catástrofe de Doñana y, sobre todo, para deslindar responsabilidades si, como señaló ayer la presidenta de la Junta de Andalucía, se confirma que el factor humano está, como viene siendo habitual, en el origen del incendio.

Diario LA RAZON ESPAÑA - 26 junio 2017